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viernes, 14 de mayo de 2010

El PSOE discrimina a Almuñécar en el modelo territorial del POT de la costa costatropicalinformacion

Paco Morales | 14 Mayo 2010

El Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía (POTA), aprobado por el Parlamento en noviembre de 2006, es un instrumento de planificación y ordenación del territorio, donde se establecieron las bases y estrategias para diseñar el modelo territorial, de prestación de servicios y por tanto el sistema de jerarquización de ciudades y núcleos de población para toda la comunidad autónoma.

En el POTA, que se puede consultar en la Web de la consejería de Obras Públicas y Vivienda, queda plasmado un modelo territorial, en el que la ‘Costa Tropical’ se define como una ‘Unidad Territorial’ encuadrada dentro de las ‘Redes de Ciudades Medias Litorales’. Comparte el modelo con el ‘Poniente Almeriense’ y con ‘Vélez-Málaga y Axarquía’ en las vecinas provincias de Almería y Málaga. Al norte se sitúa ‘Alpujarras-Sierra Nevada, definida como una unidad organizada por ‘Centros rurales’.

En la Unidad territorial de la Costa Tropical, el POTA contempla un sistema de ciudades donde aparece Motril como eje central, al que se define como ‘Ciudad Media 1′ y Almuñécar como segundo núcleo de población importante, al que considera ‘Ciudad Media 2″. En la escala jerárquica del POTA le sigue Salobreña, como ‘Centro rural o pequeña ciudad 1′, y después Albuñol, que designa como ‘Centro rural o pequeña ciudad 2′. En el mapa donde se especifica el modelo territorial, aparecen el resto de municipios, a los que define como ‘Otros asentamientos’, donde se especifican, por orden alfabético, Albondón, Gualchos, Guajar Faragüit, Ítrabo, Jete, Lentegí, Lújar, Molvizar, Otívar, Polopos, Rubite, Sorvilán y Vélez de Benaudalla. Figuran, además, otros asentamientos en los que no figura el nombre de la población, como sucede con La Herradura.

Es obvio que la definición o jerarquización de las ciudades o núcleos de población llevan parejo la asignación de sedes o centros administrativos y de equipamientos, por lo que los servicios que se prestarán están en función de la categoría que se le asigne a cada uno. No es lo mismo que se considere ciudad a que sólo sea un centro rural. Se verá reflejado en las inversiones y dotaciones presupuestarias de cada anualidad. En clave de comparación, en la provincia de Granada hay un Centro Regional en la capital, una ciudad media 1 que es Motril y sólo 4 ‘Ciudades Medias 2′, que son Almuñécar, Baza, Guadix y Loja.

Modelo territorial del POT

A pesar de que todos los planes de ordenación territorial de ámbito subregional que se han aprobado en los últimos años han debido adaptarse a ese marco andaluz recogido en el POTA, el que se está tramitando en la Costa Tropical no concuerda, ni respeta, ese modelo de organización territorial, en detrimento de Almuñécar. El texto aprobado inicialmente por la Comisión de Redacción del ‘Plan de Ordenación del Territorio del Litoral de Granada’ (POT) no ha desarrollado la jerarquía funcional del sistema de ciudades explicado más arriba, sino que difiere sustancialmente, perjudicando la posición o jerarquización de Almuñécar en el contexto comarcal y provincial, a la que se le resta importancia. Una propuesta que en este momento se encuentra en tramitación, tras la presentación de alegaciones al documento aprobado por la Junta de Andalucía, gobernada por el PSOE. La propuesta socialista pretende discriminar Almuñécar, quitándole la categoría de ‘Ciudad Media’, para definirla y equipararla con Gualchos, por ejemplo. Una discriminación intolerable.

Sin tener en cuenta lo establecido en el POTA, el POT del Litoral define una jerarquía territorial donde sólo existe un único “núcleo prestatario de servicios de nivel superior”, Motril, como gran cabecera de la comarca, y el establecimiento de cuatro “núcleos prestatarios de servicios supramunicipales”, a saber: Albuñol, Almuñécar, Castell de Ferro y Salobreña.

No se contemplan, pues, las especificidades ni realidades socioeconómicas de Almuñécar, tal como aparecen recogidas en el POTA que aparece “caracterizada por su intenso dinamismo económico y urbano, y por la presencia de sectores productivos innovadores: turismo y nuevas agriculturas”. Recordemos que las dotaciones, servicios y equipamientos supramunicipales se suelen definir en función de esas premisas, estableciendo el plan de ordenación andaluz que en los futuros procesos de planificación han de tenerse en cuenta una serie de factores a la hora de establecer las áreas de oportunidad y/o reservas de espacio, “favoreciendo la implantación de actividades vinculadas a los sistemas productivos locales”.
Es decir, que se debe tener en cuenta la realidad turística de Almuñécar, capital turística de la Costa Tropical, que ve multiplicar su población por más de cinco veces en determinadas épocas del año, así como la pujanza de sus cultivos subtropicales. Algo que desde el Partido socialista no parecen dispuestos a asumir. La prueba más evidente es la negativa a proceder a la declaración de Municipio Turístico, a pesar de cumplir con todos los requisitos legales, o (tal vez), la inexplicable tardanza en iniciar las obras del Palacio de Justicia, como si quisieran demorarlo ’sine die’.

Como almuñequeros, no debemos consentir la actitud del PSOE, pretendiendo escamotear la realidad de una ciudad pujante, con un futuro prometedor, merced a sus recursos naturales, al dinamismo de sus gentes y a la definición de un proyecto de desarrollo municipal, que se está reflejando en un Plan General de Ordenación Urbana sobre el que tuvimos ocasión de pronunciarnos y que fue respaldado por el 79% de quienes acudimos a votar hace algo más de un año. Es de impresentables tratar de equipararnos con poblaciones claramente ‘menores’ en el contexto comarcal y provincial, como son Albuñol o Castell de Ferro, sin pretender minusvalorarlos o despreciarlos. Sólo reivindicamos lo que en justicia nos corresponde. Todo lo demás, como ésta propuesta socialista, es pretender negar no sólo la realidad, sino la trayectoria histórica de un pueblo milenario. Confiemos que Paco Prados y sus compañeros socialistas locales no respalden esta discriminación.

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