EN GRANADA NO HAY MÁS PUEBLOS DONDE SE HAYAN ROTO LOS PACTOS
Luis F. Ruiz / E.P.
La constitución de los gobiernos en la provincia de Granada cumplen cien días, salvo en Lújar, con solo una ruptura de un pacto en Albuñol, en donde el PP anunció el pasado 5 de agosto que rompía el pacto de gobierno que mantenía con Convergencia Andaluza en dicho pueblo. En el resto de localidades, los primeros cien días no han deparado sobresaltos, aunque sí dimisiones que, antes de las elecciones, eran difíciles de presagiar.
En el caso de la localidad costera, el pacto electoral se rompió apenas dos meses después de la constitución de los ayuntamientos, situación desde la que entonces el PP gobierna con sus cuatro concejales frente a los cinco del PSOE, que fue la lista más votada electoralmente, los tres ediles de CA y el único concejal del Partido Independiente de La Rábita.
Hasta ese momento, el alcalde, Juan María Rivas (PP), había gobernado con mayoría absoluta gracias al frustrado pacto de gobierno, que le permitía sumar ocho concejales, dos más que los que acumulaban PSOE y el Partido Independiente de La Rábita.
La tercera teniente de alcalde en el Ayuntamiento de Albuñol, Patricia Fernández (PP), dijo que el primer edil es consciente de que la oposición podría presentar una moción de censura, si bien CA “se ha comprometido a seguir apoyándonos si las mociones que nosotros llevamos a pleno son buenas para el pueblo”.
Fernández explicó que la ruptura del pacto de gobierno fue consecuencia de las desavenencias surgidas con CA, que incumplió algunos de los puntos del acuerdo suscrito y que además hizo “algunas cosas sin comentárselas al alcalde”.
Renuncias al acta de concejal
Pese a que en estos cien días no se han roto más gobiernos en la provincia ni se han producido situaciones delicadas como las de Albuñol, que pongan en riesgo la estabilidad del gobierno, sí se han registrado otras situaciones no menos delicadas.
Es el caso de la decisión que tuvo que tomar solo diez días después de iniciar el mandato la concejal del PP en Granada Cristina Almagro, a la que asignaron el área de Juventud, y que presentó su renuncia al acta de concejal y cargo que ostentaba en el consistorio granadino después de haber sido condenada por el Juzgado de Instrucción número 7 de Granada como autora, junto a A.F.L., de un delito de falsedad en documento público oficial.
Tras conocerse esta sentencia, Almagro compareciendo ante los medios afirmando que quería demostrar su inocencia y que decidió dimitir “para no perjudicar ni al Ayuntamiento ni al partido”
La exedil anunció que iba a recurrir la sentencia al considerar que era “inocente” y sin estar “de acuerdo” con ella. “No se trata de tirar la toalla, simplemente me quiero defender desde mi persona y no quiero perjudicar ni por asomo ni a mi partido, ni al Ayuntamiento, que se han portado conmigo de una manera inmejorable”, dijo por entonces en rueda de prensa la concejala. Posteriormente, el número 18 en la lista, Juanfran Gutierrez, pasó a ocupar el cargo de su compañera como edil de Juventud y presidente de la Junta de Distrito del Albaicín.
En otras poblaciones, los perdedores de las elecciones o quienes auguraban que presumiblemente no iban a ser investidos alcaldes decidieron renunciar a su acta antes de la jornada de constitución de los ayuntamientos.
Fue el caso de Miguel Castellano, exalcalde de Loja, que renunció a su puesto después de que Convocatoria por Loja (CPL) propusiese un pacto con PP y PSOE (bienal), a cambio de que los líderes de ambas formaciones renunciasen a ser candidatos. Solo los ‘populares’ accedieron a la propuesta para alcanzar un pacto de gobierno con el que recuperaron la alcaldía 12 años después.
En Caniles, el municipio del expresidente de la Diputación, el PA alcanzó la alcaldía pese a no ser la fuerza más votada con la connivencia del PP. El PSOE, que perdió la mayoría, no se quedó sin embargo si Antonio Martínez Caler, quien mantiene su acta de concejal en el municipio.
También dejó el acta de concejal en estos tres primeros meses Herminia Fornieles, exalcaldesa socialista en Ogíjares, quien pese a que sí tomó posesión el 11 de junio posteriormente renunció a seguir como portavoz de su formación en un municipio en el que PIO y APPO se unieron para conseguir la alcaldía pese a que el PP fue la fuerza más votada.
En Almuñécar, el exregidor de CA, Juan Carlos Benavides, no dejó el acta de concejal, aunque sí renunció a ser el portavoz de la formación política y pasó a un segundo plano con la aspiración de convertirse en miembro de la Mancomunidad de Municipios de la Costa e incluso como candidato a presidente.
Estos cien días de gobierno se cumplen en todas las localidades, a excepción de Lújar, en donde el recuento de votos terminó en los tribunales tras la denuncia del PSOE, con lo que se demoró la constitución del Ayuntamiento así como el de la Diputación que gobierna el PP con mayoría absoluta.
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