La biblioteca Ayala quintuplica el número de usuarios de la clausurada en la plaza de Las Palomas granadadigital

Pilar Arjona

Foto: Álex Cámara

La biblioteca Francisco Ayala se ha convertido en una “referencia” en la red de centros bibliotecarios de la ciudad y de Andalucía, según ha asegurado el concejal de Cultura en el Ayuntamiento de Granada, Juan García Montero, al conseguir una media de casi cinco mil usuarios durante los meses de verano. Una cifra que multiplica por cinco al número de beneficiarios que hicieron uso de las instalaciones de la recién clausurada biblioteca de la plaza de Las Palomas, durante el mismo período de 2010.

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El nuevo centro ubicado en la Plaza Fontiveros del Zaidín ha recibido un total de 4.189 usuarios a lo largo de este mes de julio y hasta 5.762 durante el mes de agosto. Asimismo, se han realizado 1.930 préstamos y 2.093 en los mismos meses, por los 1.233 y 1.021 logrados el año pasado por la biblioteca ya cerrada. Estos datos, en una temporada en la que tradicionalmente desciende la actividad de estos centros -por el período estival-, quintuplican el número de usuarios de la recién clausurada biblioteca del Zaidín durante el verano de 2010, que recibió a 1.246 usuarios en julio y 1.240 en agosto.

García Montero ha manifestado su satisfacción por estos datos tras la polémica suscitada por el cierre del centro de la plaza de Las Palomas y ha explicado que éste albergará a partir de ahora otro tipo de actividades culturales. Igualmente, ha insistido en que “los vecinos del distrito Beiro también tienen derecho a tener su biblioteca, ya que no la han tenido nunca” y ha anunciado que, aproximadamente en el plazo de dos meses, se habrán trasladado todos los libros hasta las instalaciones de la antigua cárcel donde, ha añadido, “se gana una gran biblioteca”, al igual que ocurre con el centro de Fontiveros.

“La cultura es un derecho de todo el mundo”, ha declarado el edil del ramo, quien ha precisado que ya se verá, al finalizar el proceso de traslado en el mes de abril, “si es mejor anteponer los intereses particulares a los generales”.