La formación pide su catalogación como Bien Patrimonial, debido a su "potencial de recursos agrarios, paisajísiticos y culturales"
REDACCIÓN Manuel Cala, cabeza de lista de EQUO en Granada para las elecciones generales del 20 de noviembre, ha manifestado el apoyo de su formación política para que la Vega de Granada sea declarada Bien de Interés Cultural, bajo la tipología de Patrimonio Cultural.
"De las figuras de protección que la legislación actual permite, es la más adecuada, ya que reconoce la Vega como un bien patrimonial, con un tremendo potencial de gestión de sus recursos agrarios, paisajísiticos y culturales con un proyecto de economía sostenible que permita incrementar sus niveles de empleo y su productividad conectada al sol", ha asegurado Cala.
En la rueda de prensa celebrada en la sede de EQUO en Granada, Cala ha estado acompañaño de Mar Salas, también candidata de EQUO, y de Mario Ortega, miembro de la actual Gestora Estatal de EQUO, tras la asamblea que esta nueva formación política celebró en Madrid los días 8 y 9 del pasado fin de semana.
EQUO aprobaba en Madrid un Decálogo de Compromisos, cuyo punto tercer recogemos que "llevaremos a las instituciones propuestas ciudadanas y de organizaciones sociales que trabajen con el horizonte de sociedad que, como EQUO, queremos construir". "La primera iniciativa relacionada con este Decálogo de Compromisos en todo el Estado Español, la hacemos aquí en Granada", dice Ortega. "a partir de este momento EQUO se suma al amplio movimiento socio-ambiental para defender la Vega de Granada, algo que a nivel individual y dentro de los colectivos sociales a los que pertenecemos ya veníamos haciendo. Igual que cerca de 200 personas nos hemos tirado a la calle a recoger firmas boca a boca para conseguir los avales necesarios para poder presentarnos a las elecciones generales, también nos sumaremos a la recogida de firmas para que se haga realidad esta declaración. EQUO hará todo lo que esté su mano para conseguirlo".
En este sentido, la candidata Mar Salas ha explicado que "las razones son muchas, la Vega de Granada es patrimonio económico y productivo, pues tiene uno de los suelos más ricos de Europa cargado de grandes potencialidades ambientales y socioeconómicas. Además de patrimonio histórico y natural, fruto de miles de años de trabajo de la naturaleza, de los agricultores, y de la sabiduría, así como técnicas de las diferentes culturas de nuestra historia. Por no decir de su patrimonio paisajístico y ambiental, diversidad de elementos naturales y culturales, contrastes cromáticos, fragosidad vegetal, abundancia hídrica y bonificación climática estival, entre otras muchas", y finaliza Salas "en definitiva, la Vega de Granada puede y debe ser una fuente ambiental de riqueza y trabajo, por lo que hay que recuperarla como un agroecosistema y cultivarla con prácticas basadas en la agroecología".
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