GRANADA.- “Estas Jornadas son una mezcla magistral entre el turismo, con su correspondiente disfrute de la gastronomía, la cultura y el patrimonio histórico de Alhama y la defensa medio ambiental y el desarrollo sostenible del municipio” subrayó durante su intervención el Diputado de Medio Ambiente, José Francisco Tarifa.
Las V Jornadas Ecoturísticas de Alhama de Granada se han celebrado durante el pasado fin de semana, 29 y 30 de octubre, bajo un sol casi primaveral y la participación de más de sesenta personas.
La inauguración de las jornadas tenía lugar sobre las once de la mañana en el salón de plenos del Ayuntamiento del municipio, encabezada por el Concejal de Turismo, Ángel Muñoz, quién describió brevemente las diferentes actividades previstas durante los dos días que duraban las jornadas: visitas guiadas, rutas turísticas, degustación de platos típicos, la visita a la Resinera y como novedad este año una exposición de talleres artesanos ideados para que la gente participará y aprendiera oficios tan antiguos como la cestería, la latería, la piedra, el cuero, el esparto o el jabón, acompañada de una muestra gastronómica de productos locales y de la celebración de “La Ruta de la Tapa”.
Tras él intervino la Concejala de Medio Ambiente, Matilde Molina, quién destacó la importancia de estas jornadas tanto para la potenciación del turismo como en la concienciación de la ciudadanía en su labor de respetar y cuidar el medio que nos rodea.
El cierre de la inauguración corrió a cargo del Diputado de Medio Ambiente, José Francisco Tarifa, quién resaltó la importancia de la celebración de unas jornadas de estas características a la hora de dar a conocer a los visitantes los aspectos más sobresalientes del municipio, al tiempo que se apuesta por el desarrollo sostenible de éste, ensamblando a la perfección turismo y medio ambiente “estamos viviendo una época de muchos obstáculos en este terreno, con escasos recursos económicos, pero gracias a la imaginación y al impulso de estas iniciativas y proyectos vamos a poder seguir hacia delante, progresando tanto en la potenciación y ampliación del turismo como en la conservación del medio ambiente y el desarrollo sostenible del entorno”, enfatizó Tarifa.
Acto seguido bajaron hasta el Paseo del Cisne donde pudieron admirar la maestría de los artesanos a la hora de confeccionar sus productos. Una exposición que permaneció abierta al público durante todo el sábado y que recibió la visita tanto de la ciudadanía del municipio como de los participantes de las jornadas. Comenzando por la piedra, esculpida con paciencia y dedicación y seguida de la lata, el esparto, el jabón o el cuero y acompañada de una muestra de gastronomía en la que sobresalió la degustación y venta del queso y del vino de la zona.
Sobre las una y media comenzó la ruta turística por los Tajos, descendiendo por los Molinos y el camino de los Ángeles, donde el guía del municipio, amplio conocedor del terreno, José Ciruela, fue comentando los diferentes monumentos, así como las leyendas que recaen sobre cada uno de ellos.
Los majestuosos e imponentes Tajos, decorados con los colores más tenues de las hojas caídas del otoño, dejaron paso a la Pantaneta y a un almuerzo típico alhameño, para regresar sobre las cinco de la tarde por el camino de la Chorrera. Así, si por las mañana los participantes pudieron admirar los Tajos desde abajo, por la tarde los hicieron desde una perspectiva más alta, parándose en el Mirador desde donde se vislumbra el río, el Tajo, la Pantaneta y al fondo el pueblo. Pero, la tarde no hacía nada más que comenzar, ya que, a su llegada de nuevo a la localidad, le esperaba la guía de la Oficina de Turismo del Ayuntamiento para realizar una visita guiada por los diferentes monumentos y vestigios que quedan de época romana, árabe y cristiana y como colofón del día se obsequió a los participantes con tickets para que vivieran la ruta de la tapa en primera persona.
Al día siguiente, se realizó la visita al complejo La Resinera: el Centro de Interpretación del Parque Natural, el Centro de Defensa Forestal, la antigua fábrica de resina y como cierre a unas jornadas inolvidables un almuerzo campestre en el que no faltó el arroz y las pastas más típicas de Alhama.
Sobre las cinco de la tarde se regresaba al municipio con la satisfacción de haber cumplido las expectativas de los participantes y la preparación para el año que viene de unas nuevas jornadas ecoturisticas.
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