La Escolanía de la Catedral, en Granada ultimahoramenorca

Granada ha sido la sede del congreso organizado por la Federación española, donde los cantantes menorquines han sido protagonistas.

Dirigida por Cristina Álvarez, ha participado activamente en los actos del Congreso Internacional de Pueri Cantores

Dirigida por Cristina Álvarez, ha participado activamente en los actos del Congreso Internacional de Pueri Cantores

Mas de 3000 niños procedentes de 90 coros de catedrales, iglesias y templos de 18 países se han encontrado en Granada, entre el 11 y 15 de julio, en el XXXVII Congreso Internacional Pueri Cantores, organizado por primera vez por la Federación Española, y cuyo objetivo general es acercar las naciones a través de la música, del canto de los jóvenes.

Entre ellos los 25 cantantes (entre 8 y 17 años) procedentes de la Escolanía de la Catedral de Menorca, acompañados por su directora Cristina Álvarez, y por el vicario general y rector de la catedral Gerard Villalonga, concelebrante de la delegación menorquina.

«La participación de nuestra Escolanía ha sido muy emocionante, por relevancia y notoriedad», comenta Álvarez muy satisfecha del trabajo realizado. Y es que además de las intervenciones al lado de las otras corales en la ‘Misa de las naciones’, celebrada el jueves en diferentes idiomas, y en el ‘Concierto de las Estrellas’ el viernes en la iglesia de La Encarnación de Granada en concierto individual, y ante un público deleitado por su programa. También cantaron con los 3000 niños en el concierto inaugural del miércoles, y en la Misa-Concierto, tanto del sábado en la catedral de Granada, como en la clausura del domingo. «El nivel y calidad de las escolanías es muy alto, algunas tienen 50 años de antigüedad, pero la nuestra demostró muy buen nivel y estoy muy satisfecha de su trabajo», asegura la directora.

Fue precisamente el viernes en la ‘Oración ecuménica por la paz’, dirigida por la menorquina Álvarez, cuando la participación de la Escolanía «tuvo un simbolismo muy bonito». Fueron los encargados de presentar las ofrendas y leer las pregarias en las diversas lenguas, «además de ser los entrevistados por los medios de comunicación, se convirtieron en un grupo popular». Por ello la directora destaca la experiencia de este congreso. «No sólo es ir a cantar, sino que hablan idiomas, hacen amigos y contactos que continúan y reencuentran en el próximo congreso; o por mi parte el enriquecimiento de estar con los mejores pedagogos musicales». Un hecho musical que une culturas y acerca personas.