Los perros guía saldrán mañana, sábado, a la calle en Madrid para reivindicar los derechos de sus usuarios a acceder con total normalidad, acompañados por el perro, a todos los lugares y servicios, públicos o de uso privado.
Con motivo de la celebración del Día Internacional del Bastón Blanco, un año más la Asociación de Usuarios y Amigos del Perro Guía de Madrid se suma a la labor de concienciación social sobre distintos aspectos que pueden frenar la movilidad de las personas con ceguera o discapacidad visual.
Por ello, mañana los usuarios y amigos de estos animales pondrán de manifiesto la labor que desempeñan estos perros en la vida de las personas ciegas, poniendo a su servicio un bien tan preciado como la vista.
El paseo con perros guía dará comienzo a las 11.30 horas desde el número 3 de la calle Prim, con la presencia de usuarios de perros guía y familias que, voluntariamente, se convierten en educadoras de cachorros que serán guías en el futuro. Los cachorros acudirán con su chaleco amarillo.
Desde la calle Prim se iniciará un paseo que recorrerá el paseo de Recoletos, la calle de Alcalá, Puerta del Sol, calle Montera, Fuencarral y Augusto Figueroa, para terminar, aproximadamente a las 12.45 horas, en la calle Prim, donde, en el Salón de Actos de la Delegación Territorial de La ONCE, se leerá un manifiesto y rendirá un homenaje de reconocimiento a los perros jubilados y fallecidos. La lectura del manifiesto correrá a cargo de Carlos Rodríguez, director del programa 'Como el perro y el gato', de Onda Cero.
El manifiesto de los usuarios de perro guía denuncia "los problemas con los que cada día tenemos que enfrentarnos a la hora de movernos por nuestra ciudad", como contenedores de basuras, bolardos, señales diversas, vehículos mal aparcados, andamios, etc.
Pero ahora se suma otro problema más, el "de las bicicletas circulando entre las personas, que aunque nuestros perros intentan esquivarlas, como pueden, cuando las ven venir, a pesar del sobresalto que esto les supone, en ocasiones, si vienen por la espalda o demasiado rápidas o porque nosotros necesitamos hacer un giro inesperado, el caso es que a veces resulta inevitable que nos pasen demasiado cerca e incluso el contacto, con el correspondiente susto para nuestros expertos guías y para nosotros mismos".
Por esto piden que, "a pesar de la crisis, se hagan los esfuerzos que sean posibles para crear las condiciones que permitan que tanto personas con dificultades de movilidad, personas mayores, niños, ciclistas, tráfico rodado y ciudadanos en general, podamos convivir con garantías para todos".
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