Los centros se han tenido que gestionar con los remanentes del curso pasado La Junta pagó ayer la partida que tendría que haber abonado en octubre DIEGO J. GENIZ / A. ASENSIO
De regalar ordenadores a cada alumno a pedir la ayuda de los padres para reparar las instalaciones. Los centros educativos andaluces han pasado en poco tiempo de una situación a otra debido a la falta de liquidez que están sufriendo las arcas de la Administración autonómica y la política de austeridad impuesta desde el Gobierno central. A la larga lista de retrasos en los pagos a las empresas proveedoras y las que gestionan los distintos servicios educativos se suma ahora la demora de dos meses en el cobro de los gastos de funcionamiento, que la Junta debía haber abonado en octubre y sin embargo pagó ayer.
La Consejería de Educación ya ha ingresado la partida destinada a sufragar los gastos que genera el mantenimiento de los centros educativos con cuatro meses de retraso. Este concepto lo conforma un largo listado en el que se incluye el pago de la luz, el agua, el teléfono, el papel, los productos de limpieza y el material que use el equipo docente, así como las pequeñas reparaciones que tengan que acometerse. En los colegios de Infantil y Primaria, parte de este desembolso lo costean los ayuntamientos al ser responsables de su mantenimiento. Así, el dinero del teléfono, la luz o las reformas salen de los presupuestos municipales. En cambio, en los institutos todo el funcionamiento corre a cuenta de la Junta, al ser competencia exclusiva de dicha Administración.
La asociación de directores de institutos públicos de Andalucía (Adian) dio la dar la voz de alarma sobre la situación que están padeciendo los centros de Secundaria por la demora. Desde esta asociación se explica que durante el año se realizan cuatro pagos para sufragar el funcionamiento de las instalaciones. El primero es en octubre -cuando se paga entre el 30% y 40% de la partida-, el segundo en enero, el tercero en abril y el último en julio, mes en el que se ingresa un 10%, una liquidación que sirve a los centros para comenzar el nuevo curso con liquidez hasta que se reciba el primer pago del curso académico.
Según denuncian los parlamentarios del PP Rafael Salas y Patricia del Pozo, para el presente curso la Junta reservó una partida de 116 millones para el mantenimiento de todos los centros públicos (incluidos colegios e institutos), que se ha abonado ahora, con meses de retraso. "Especialmente grave es la situación en los institutos, que dependen sólo de los ingresos de la Consejería de Educación, lo que ha provocado que estén afrontando los gastos con los remanentes del curso pasado", expresó Del Pozo.
Tal tesitura fue confirmada por el presidente de la Adian, Juan Luis Belizón, quien señaló que "desde el 1 de octubre los institutos se mantienen con los remanentes económicos que tenemos del curso anterior, es decir, funcionamos con los ahorros".
Belizón detalla que la situación se convierte en "preocupante" cuando los remanentes desaparecen -en algunos antes que en otros- y no llega la partida económica para los gastos.
Esta carestía es aún más evidente en los institutos que cuentan con programas de Formación Profesional (FP). Pedro Arias, de Adian, asegura que estos centros acumulan más gastos, ya que requieren comprar continuamente material para las prácticas. "Los módulos de hostelería o de mecánica utilizan a diario herramientas cuyo coste es elevado. Aún no tenemos constancia de que ningún centro se haya quedado sin material, pero sí que están al límite y que las clases podrían verse afectadas si los ingresos no se efectúan próximamente", añade Arias.
Desde Granada, Miguel González Dengra, confirmó que entre el pasado jueves y ayer la Junta realizó el primer pago. Sobre la situación de los centros en la provincia, González reseñó que el problema de liquidez ha afectado "a unos más que a otros" ya que mientras en algunos institutos han podido echar mano del remanente del curso pasado, en otros la situación ha sido "delicada". Sobre el segundo pago, González confía en que "no se retrase tanto".
La Consejería de Educación, por su parte, confirmó esta demora en el ingreso de los pagos al indicar que desde este departamento "se ha hecho un gran esfuerzo este curso para mantener la partida destinada a gastos de funcionamiento sin recortes y sin bajar ni un euro". De igual modo, señalan que los centros recibirán el primero de los pagos habituales a la mayor brevedad teniendo en cuenta "la difícil coyuntura de liquidez que es común a todas las administraciones y áreas de gobierno".
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