La Plataforma 8 de marzo, con más de 50 asociaciones de toda la provincia, organizó una marcha de protesta por los retrocesos en Igualdad
BELÉN RICO / GRANADA 
Los actos reivindicativos para celebrar el Día Internacional de la Mujer habían comenzado antes de que llegase el 8 de marzo, pero ayer se vivió el día grande con concentraciones, caceroladas y marchas en toda la provincia. El eje central de todo el programa fue la manifestición que ayer por la tarde recorrió Granada y que logró reunir a más de dos mil personas en las calles de la ciudad, según fuente de la Policía Nacional.
Todas las asociaciones, federaciones y colectivos femeninos de la provincia (más de 50), así como los sindicatos, todos los partidos políticos y las administraciones competentes se sumaron a la marcha y a la redacción del manifiesto que se leyó en ella: un acuerdo de mínimos que trató de conseguir que ninguna formación se quedara fuera, como ocurrió con la celebración del Día Internacional contra la Vilencia de Género, como recordó Natividad Moreno. "El 25 de noviembre al final se salió Diputación y no queríamos que pasara lo mismo", cuenta la coordinadora de la comisión que elaboraba el manifiesto, quien señaló que el texto se votó en asamblea general. "Fue necesaria la celebración de dos y se han quedado fuera puntos como el de la Ley del Aborto o la Reforma Laboral", explicó.
El día comenzó con la lectura de otro manifiesto: el que habían redactado las Secretarías de la Mujer de UGT y CCOO para "hacer un llamamiento y una denuncia a los poderes públicos, pues aunque hay acuerdo en que existe un peligro evidente del aumento de la desigualdad entre mujeres y hombres", los sindicatos consideran "que no se le está dando la dimensión que merece a algo que afecta a más de la mitad de la población y cuyo desencadenante es absolutamente discriminatorio e injusto".
Un centenar de personas se dieron cita a las puertas del edificio de los sindicatos a las diez de la mañana para la lectura de dicho texto.
La secretaria de Políticas de Igualdad de UGT Granada, Maravilla Vargas Quesada, aprovechó la oportunidad para señalar que "los recorte de los servicios públicos en materia de dependencia y también en servicios a la infancia (de 0 a 3 años), intensifica el trabajo de la mujer en el seno de los hogares y refuerza los estereotipos". "Eso dificulta su incorporación al mercado laboral porque ellas son las que se dedican a este tipo de tareas: el 29,1%, frente al 3,5% de los hombres", explica Vargas Quesada.
"La reforma laboral es absolutamente nefasta porque se le da todo el poder al empresario y al final eso repercute en la compatibilidad del trabajo y la vida familiar", sostiene Vargas Quesada. "La discriminación salarial alcanza cifras del 31,1%. Eso quiere decir que las mujeres tienen que trabajar 62 días más al año para alcanzar el mismo salario que los hombres".
La delegada de UGT coincidió en criticar "la propuesta de Gallardón para acabar con la ley de plazos y volver a la ley de supuestos: es volver a un periodo anticonstitucional, porque va contra el derecho a decidir".
Por su parte, María Dolores Sánchez Ortiz, secretaria de la Mujer de CCOO de Granada, reivindicó el cumplimiento de los planes de igualdad en las empresas, para que se lleven a término y criticó las declaraciones que el día anterior habían realizado la diputada Concha de Santa Ana sobre el beneficio para las mujeres de la reforma. "Son servidores públicos y deben informarse antes de hablar, como también ha ocurrido recientemente con Toni Cantó. Precisamente han perdido el empleo este año en Granada 20.000 mujeres, la cifra más alta de las provincias de toda Andalucía".
Ya por la tarde, en la manifestación que partía de la Plaza Mariana Pineda a las 18:00 horas, la edil de UPyD, Mayte Olalla también reprobó las declaraciones de su compañero Toni Cantó, que han sido muy censuradas estos días por todas las asociaciones de mujeres. "Evidentemente se equivocó y hemos pedido perdón a través de él mismo. Hemos hecho un manifiesto y venimos aquí porque creemos en la igualdad", zanjó Olalla, quien aseguró que quedan muchos años para conseguir cambiar la sociedad.
Ella fue una de las representantes políticas que encabezó la pancarta de la manifestación de la Plataforma 8 de marzo junto a la delegada del Gobierno de la Junta, María José Sánchez, quien señaló que este día es una ocasión para reivindicar los temas que quedan pendientes en materia de igualdad, "que son muchos. "Hay que estar más unidas que nunca porque la crisis tiene cara de mujer y está repercutiendo en materia de empleo y de cuidados en nosotras, por la reducción de servicios sociales". "Nos quedan muchos 8 de marzo para llegar a la igualdad real", dijo la delegada, quien recordó que la Junta no ha disminuido sino que "ha aumentado sus presupuestos en materia de género (un 9%) y todos los centros de información a la mujer mantienen sus presupuestos" y pidió "que los ayuntamientos tampoco bajen la guardia".
Sin embargo, el cruce de acusaciones entre los políticos de distinto signo político, como era previsible, también surgió con motivo de tal efeméride.
También encabezó la manifestación la diputada de Igualdad, Leticia Moreno, que hizo el recorrido aunque iba con muletas. Si ella había pedido el día anterior a la Junta de Andalucía, "que tiene las competencias de Igualdad de Oportunidades, que deje de cerrar centros de información de la mujer y de recortar los presupuestos de las Diputaciones provinciales en este área", su compañero de partido en el Ayuntamiento de Granada, el edil de Igualdad, Fernando Egea, reclamamó a la administración autonómica que "no paralice los centros de información o la ley de la dependencia que tanto afecta a las mujeres como cuidadoras.
Egea, para quien el Ayuntamiento de Granada "puede sacar pecho" en esta materia, recordó que ya hay hombres que asumen las competencias de Igualdad porque se ha avanzado, aunque coincidió en que "queda mucho por trabajar.
También encabezaban la movilización -que trascurrió por Gran Vía y Reyes Católicos para terminar en Plaza Nueva a las 20:00 horas- la coordinadora provincial del IAM, Ana Belén Palomares, que cogió la pancarta de una manifestación "que tiene caracter conmemorativo y también reivindicativo". Según Palomares, "este 8 de marzo es un poco especial porque las mujeres estamos en un estado de incertidumbre". "El Gobierno está llevando a cabo una serie de cambios como el anteproyecto de reformas de las entidades locales que deja en el aire qué va a pasar con las concejalías de Igualdad y con los centros municipales de formación a la mujer. Nos encontramos en una situación de duda, de qué queda por venir y qué va a pasar".
Otra de las participantes, la edil de IU, Maite Molina, afirmó que la formación quería "salir a conmemorar, no a celebrar, esta fecha". "No queremos flores, queremos derechos porque un año más estamos asisitiendo a un recorte brutal en nuestras libertades. No podemos permitir que ningún gobierno nos haga retroceder, porque cuando retroceden las mujeres retrocede la sociedad".
Además de la concentración de los sindicatos y la manifestación de la Plataforma, el Ayuntamiento de Maracena organizó una concentración de representantes municipales, asociaciones de mujeres y vecinos de la localidad en la plaza Sor María Luisa por la consolidación de los derechos adquiridos de las mujeres bajo el lema Ahora más que nunca, las mujeres juntas. A esta le siguió una cacerolada contra los recortes y un reparto de lazos morados.
También hubo actos en Motril, donde se entregaron los premios de la Mujer; en Guadix, con una jornada dedicada a las artes escénicas; en la Alpujarra, con un programa de exposciones, conferencias y talleres; o Fuente Vaqueros, también con premios a la mujer.
Todas las asociaciones, federaciones y colectivos femeninos de la provincia (más de 50), así como los sindicatos, todos los partidos políticos y las administraciones competentes se sumaron a la marcha y a la redacción del manifiesto que se leyó en ella: un acuerdo de mínimos que trató de conseguir que ninguna formación se quedara fuera, como ocurrió con la celebración del Día Internacional contra la Vilencia de Género, como recordó Natividad Moreno. "El 25 de noviembre al final se salió Diputación y no queríamos que pasara lo mismo", cuenta la coordinadora de la comisión que elaboraba el manifiesto, quien señaló que el texto se votó en asamblea general. "Fue necesaria la celebración de dos y se han quedado fuera puntos como el de la Ley del Aborto o la Reforma Laboral", explicó.
El día comenzó con la lectura de otro manifiesto: el que habían redactado las Secretarías de la Mujer de UGT y CCOO para "hacer un llamamiento y una denuncia a los poderes públicos, pues aunque hay acuerdo en que existe un peligro evidente del aumento de la desigualdad entre mujeres y hombres", los sindicatos consideran "que no se le está dando la dimensión que merece a algo que afecta a más de la mitad de la población y cuyo desencadenante es absolutamente discriminatorio e injusto".
Un centenar de personas se dieron cita a las puertas del edificio de los sindicatos a las diez de la mañana para la lectura de dicho texto.
La secretaria de Políticas de Igualdad de UGT Granada, Maravilla Vargas Quesada, aprovechó la oportunidad para señalar que "los recorte de los servicios públicos en materia de dependencia y también en servicios a la infancia (de 0 a 3 años), intensifica el trabajo de la mujer en el seno de los hogares y refuerza los estereotipos". "Eso dificulta su incorporación al mercado laboral porque ellas son las que se dedican a este tipo de tareas: el 29,1%, frente al 3,5% de los hombres", explica Vargas Quesada.
"La reforma laboral es absolutamente nefasta porque se le da todo el poder al empresario y al final eso repercute en la compatibilidad del trabajo y la vida familiar", sostiene Vargas Quesada. "La discriminación salarial alcanza cifras del 31,1%. Eso quiere decir que las mujeres tienen que trabajar 62 días más al año para alcanzar el mismo salario que los hombres".
La delegada de UGT coincidió en criticar "la propuesta de Gallardón para acabar con la ley de plazos y volver a la ley de supuestos: es volver a un periodo anticonstitucional, porque va contra el derecho a decidir".
Por su parte, María Dolores Sánchez Ortiz, secretaria de la Mujer de CCOO de Granada, reivindicó el cumplimiento de los planes de igualdad en las empresas, para que se lleven a término y criticó las declaraciones que el día anterior habían realizado la diputada Concha de Santa Ana sobre el beneficio para las mujeres de la reforma. "Son servidores públicos y deben informarse antes de hablar, como también ha ocurrido recientemente con Toni Cantó. Precisamente han perdido el empleo este año en Granada 20.000 mujeres, la cifra más alta de las provincias de toda Andalucía".
Ya por la tarde, en la manifestación que partía de la Plaza Mariana Pineda a las 18:00 horas, la edil de UPyD, Mayte Olalla también reprobó las declaraciones de su compañero Toni Cantó, que han sido muy censuradas estos días por todas las asociaciones de mujeres. "Evidentemente se equivocó y hemos pedido perdón a través de él mismo. Hemos hecho un manifiesto y venimos aquí porque creemos en la igualdad", zanjó Olalla, quien aseguró que quedan muchos años para conseguir cambiar la sociedad.
Ella fue una de las representantes políticas que encabezó la pancarta de la manifestación de la Plataforma 8 de marzo junto a la delegada del Gobierno de la Junta, María José Sánchez, quien señaló que este día es una ocasión para reivindicar los temas que quedan pendientes en materia de igualdad, "que son muchos. "Hay que estar más unidas que nunca porque la crisis tiene cara de mujer y está repercutiendo en materia de empleo y de cuidados en nosotras, por la reducción de servicios sociales". "Nos quedan muchos 8 de marzo para llegar a la igualdad real", dijo la delegada, quien recordó que la Junta no ha disminuido sino que "ha aumentado sus presupuestos en materia de género (un 9%) y todos los centros de información a la mujer mantienen sus presupuestos" y pidió "que los ayuntamientos tampoco bajen la guardia".
Sin embargo, el cruce de acusaciones entre los políticos de distinto signo político, como era previsible, también surgió con motivo de tal efeméride.
También encabezó la manifestación la diputada de Igualdad, Leticia Moreno, que hizo el recorrido aunque iba con muletas. Si ella había pedido el día anterior a la Junta de Andalucía, "que tiene las competencias de Igualdad de Oportunidades, que deje de cerrar centros de información de la mujer y de recortar los presupuestos de las Diputaciones provinciales en este área", su compañero de partido en el Ayuntamiento de Granada, el edil de Igualdad, Fernando Egea, reclamamó a la administración autonómica que "no paralice los centros de información o la ley de la dependencia que tanto afecta a las mujeres como cuidadoras.
Egea, para quien el Ayuntamiento de Granada "puede sacar pecho" en esta materia, recordó que ya hay hombres que asumen las competencias de Igualdad porque se ha avanzado, aunque coincidió en que "queda mucho por trabajar.
También encabezaban la movilización -que trascurrió por Gran Vía y Reyes Católicos para terminar en Plaza Nueva a las 20:00 horas- la coordinadora provincial del IAM, Ana Belén Palomares, que cogió la pancarta de una manifestación "que tiene caracter conmemorativo y también reivindicativo". Según Palomares, "este 8 de marzo es un poco especial porque las mujeres estamos en un estado de incertidumbre". "El Gobierno está llevando a cabo una serie de cambios como el anteproyecto de reformas de las entidades locales que deja en el aire qué va a pasar con las concejalías de Igualdad y con los centros municipales de formación a la mujer. Nos encontramos en una situación de duda, de qué queda por venir y qué va a pasar".
Otra de las participantes, la edil de IU, Maite Molina, afirmó que la formación quería "salir a conmemorar, no a celebrar, esta fecha". "No queremos flores, queremos derechos porque un año más estamos asisitiendo a un recorte brutal en nuestras libertades. No podemos permitir que ningún gobierno nos haga retroceder, porque cuando retroceden las mujeres retrocede la sociedad".
Además de la concentración de los sindicatos y la manifestación de la Plataforma, el Ayuntamiento de Maracena organizó una concentración de representantes municipales, asociaciones de mujeres y vecinos de la localidad en la plaza Sor María Luisa por la consolidación de los derechos adquiridos de las mujeres bajo el lema Ahora más que nunca, las mujeres juntas. A esta le siguió una cacerolada contra los recortes y un reparto de lazos morados.
También hubo actos en Motril, donde se entregaron los premios de la Mujer; en Guadix, con una jornada dedicada a las artes escénicas; en la Alpujarra, con un programa de exposciones, conferencias y talleres; o Fuente Vaqueros, también con premios a la mujer.
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