Enoturismo: unas vacaciones diferentes granadahoy.com

Ocio. Llega el verano y ya empezamos a planear las vacaciones: ¿Playa? ¿Montaña? Les propongo una opción diferente: el enoturismo

MARGARITA LOZANO
EL enoturismo o turismo enológico nace con la idea de potenciar y gestionar la riqueza vitivinícola de una determinada zona y dar a conocer sus productos al consumidor final. Está íntimamente relacionado con el turismo gastronómico, cultural (arquitectura, arte) y de la salud y belleza (vinoterapia). Los turistas conocen así una zona vitivinícola a través de la degustación de sus vinos y la visita a bodegas y viñedos. Para el turista es una experiencia realmente enriquecedora en cualquiera de sus vertientes y formas, y para las bodegas supone una fuente suplementaria de ingresos. Pero lo esencial, es transmitir al viajero todas esas emociones que sólo se pueden descubrir al ver, sentir, escuchar y saborear en primera persona todo lo que el enoturismo ofrece. 

Quizás la primera referencia en enoturismo hay que buscarla en Francia, cuando a principios del siglo XX, en el Château Smith Haut Laffite (Grand Cru Classé de Burdeos) se abre el primer balneario de vinoterapia, aprovechando el agua de las Fuentes de Caudalie y proponiendo un programa de cuidados muy exclusivos en un entorno de una belleza extraordinaria: cabinas llenas de refinamiento, mezcla de materiales nobles (madera y piedra) en un edificio que recuerda los antiguos secaderos de tabaco… Todo estudiado para armonizar perfectamente el ambiente con el paisaje de las viñas. Así nace un concepto de turismo destinado a las clases altas y que se expande por Francia, unido al estilo del bon vivant, al que le gusta la buena mesa, los buenos vinos y los ambientes refinados. 

Cuando los grandes restaurantes, los grandes vinos y las vacaciones se "democratizan" y se hacen accesibles a las clases medias, el concepto de enoturismo cambia y se populariza, sobre todo en los países productores del llamado "Nuevo Mundo": EEUU, Sudáfica, Australia, Nueva Zelanda, Argentina y Chile. Las bodegas europeas no han sabido desarrollar un marketing tan efectivo y el enoturismo es aún un concepto novedoso para el viajero. En Europa, las zonas más visitadas son Oporto y el valle del Duero en Portugal; Burdeos en Francia; y La Rioja y Jerez en España. 

De hecho, en español, la palabra enoturismo es de reciente creación, y ni siquiera se encuentra en el Diccionario de la Real Academia de la Lengua. Incluso, si usted escribe "enoturismo" en un documento Word en su ordenador, el corrector ortográfico le sugerirá la palabra "ecoturismo" y se la subrayará como incorrecta. 

Sin embargo, este tipo de turismo tiene cada día más adeptos y son ya múltiples las rutas del vino en España: Jumilla, Rías Baixas, Ribera del Duero, Navarra, Rioja Alta, Rioja Alavesa, Penedès, La Mancha, Jerez, Somontano, Alicante, Yecla, Montilla Moriles, Ribera del Guadiana, Tenerife… Todas cargadas de grandes propuestas de turismo: cultura, gastronomía, deportes de acción, ocio, playa. Existe incluso la Asociación de Ciudades Españolas del Vino (ACEVIN), integrada en la Red Europea de Ciudasumsumdes del Vino (RECEVIN), dedicadas ambas a promover el turismo enológico y a que el vino se disfrute desde la cepa hasta la copa. 

Sin ir más lejos, en la provincia de Granada encontramos bodegas con una amplia y variada oferta. Una de ellas es Bodegas Muñana, en el Altiplano de Sierra Nevada, que ofrece "Muñana Experience", un paquete turístico que incluye una comida en la Cueva Delirio, visitas con degustación de vinos, senderismo por viñedos y alojamiento en sus casas rurales, y que se completa con la oferta de la zona: las casas cueva, el poblado troglodita de Purullena, el Castillo de la Calahorra, las antiguas minas de Alquife, los baños árabes de Cortes y Graena… 

También en Torvizcón, en la Alpujarra granadina, encontramos el Centro Temático del Vino Alpujárride, en Bodegas Nestares Rincón. La "Experiencia Alpujárride" incluye una visita al Museo del Vino, una cata de los vinos de la bodega, un taller gastronómico y un menú degustación preparado con productos de las diferentes Denominaciones de Origen de Granada: aceite, jamón, espárragos, miel, pan… Por supuesto, el senderismo por la Alpujarra, la visita de viñedos y la de los pueblos de la comarca completan la oferta turística. 

En internet son numerosos los portales donde podrán encontrar información, programar sus visitas y empezar a sumergirse de lleno en el maravilloso mundo del vino.