Entrevista. "Sólo la austeridad y el amor a la tierra de nuestros agricultores permite que el mercado del vino siga en pie", asegura María Isabel Mijares y García Pelayo
MARGARITA LOZANO 
NACIÓ en Mérida (Badajoz) en 1942, de padre leonés y madre extremeña, que "tuvieron el arte de hacer que todos los hermanos nos sintiéramos tan ligados a Extremadura como a Castilla y León". Hoy tiene su casa en Madrid pero vive saltando de avión en avión pues sus conocimientos son requeridos en cualquier manifestación vitivinícola que se celebre a lo largo y ancho del mundo. Ex secretaria general de la Unión Internacional de Enólogos, fue distinguida como Chevalier de la Orden del Mérito Agrícola de Francia, es asesora en Proyectos Vitivinícolas de la ONU, presidenta de la Asociación Española de Periodistas y Escritores del Vino (AEPEV) y vicepresidenta de la Federación Internacional de Periodistas del Vino (FIJEV, en sus siglas en francés), miembro numerario de la Real Academia Española de Gastronomía, presidenta del Laboratorio de Análisis Sensorial, jurado en los más prestigiosos concursos de vinos nacionales e internacionales y asesora de bodegas en España y Latinoamérica principalmente. Esto es un brevísimo extracto de un currículum impresionante, que la hacen un personaje necesario e inevitable cuando hablamos de vino.
En 1989 fundó su empresa Equipo TEAM (Tecnología Enológica y Alimentaria Mijares), dedicada alconsulting para el sector alimentario en general y el vitivinícola en particular. Es coautora del libroDe la Cepa a la Copa, junto a José Antonio Sáenz Illobre (Mundiprensa 2007), cuyo prólogo escribió su profesor Emile Peynaud, considerado el padre de la enología moderna, de quien fue alumna aventajada. Es asesora de la Guía Repsol de los Mejores Vinos de España, la guía de vinos más vendida en nuestro país.
-Cuando decidió estudiar enología era una profesión poco corriente en hombres e insólita para una mujer en España, y aún menos sin una tradición detrás de una familia bodeguera. ¿Qué le impulsó a dedicarse al vino?
-Cuando terminé mi Licenciatura en Ciencias Químicas en Madrid quise dedicarme a una 'química con alma'. La verdad es que dudé entre el vino y el perfume… Y venció el vino. No valoré si era una profesión de mujeres o de hombres. Elegí cursar dichos estudios en Burdeos, en la mejor escuela de Enología del mundo y cuyos profesores eran los mejores en esta materia. Allí me doctoré.
-Fue la primera mujer presidenta de un Consejo Regulador en España, el de la Denominación de Origen Valdepeñas. ¿Cómo se veía entonces a una mujer en un puesto así, tradicionalmente ocupado por hombres y además en un ámbito rural, como era la Castilla-La Mancha de los años 70?
-Fui la primera mujer presidenta de una Denominación de Origen, no en España, sino en el mundo. Supongo que entonces, sencillamente, no 'se veía' a una mujer en ese puesto, pero a mí me llamó el sector vitivinícola y yo decidí, al terminar mis estudios, que me debía al sector.
-A lo largo de su carrera ha tenido innumerables logros, pero dígame cuál o cuáles han sido realmente especiales para usted.
-He tenido muchos logros y también tropiezos. Lo que más me llega es que me respeten a nivel personal y profesional y que reconozcan mi dedicación en cuerpo y alma al vino. Para conseguir ese respeto he procurado prepararme al máximo a lo largo de toda mi vida. El estudio y la investigación no terminan nunca.
-Las cosas han ido cambiando, afortunadamente, y cada día hay más mujeres en el mundo del vino en todos los ámbitos. ¿Cómo animaría a las chicas de hoy en día a dedicarse profesionalmente al vino?
-Creo que están cada vez más animadas, lo cual es algo muy bueno para el sector. Les diría varias cosas: ante todo, que la Enología es una ciencia, y hay que estudiarla, no se improvisa; además, que el vino una vocación, es mágico pero hay que amarlo, no tiene horas, ni días, es un trabajo permanente; y por último, que tenemos la misma capacidad que los hombres y más imaginación y sensibilidad para el vino .
-Dígame, en su opinión, los puntos fuertes y los puntos débiles del vino español actualmente.
-Sus puntos fuertes son, sin duda, su calidad, su diversidad y su especificidad. Sin embargo, sufren de una falta de imagen y de una promoción insuficiente. No hemos sabido venderlo y esto es algo que debemos solucionar rápidamente, pues la competencia extranjera es feroz.
-¿A qué cree que se debe el descenso brutal del consumo de vino que viene sucediendo en las últimas décadas en nuestro país y cómo podría invertirse esa tendencia?
-Fundamentalmente hemos fallado no sabiendo llevarlo a los jóvenes con palabras sencillas y enamorándoles. Tampoco es que lo hayamos hecho mejor con los mayores. No sabemos transmitir todo lo que tiene de bueno, de positivo, complicamos mucho la comunicación y eso hace que la gente lo perciba como algo elitista o reservado a una minoría entendida. Y el vino es para todos. Solo hay que acercarse y disfrutarlo.
-¿Qué políticas podrían adoptarse para ayudar al sector a salir de la crisis?
-Apoyo, apoyo y apoyo a la promoción e información ante los consumidores y los sectores compradores. Hemos de dejar de hacer leyes y normas y ocuparnos más de la promoción. Es decir, no seguir complicando la información, ni la legislación, dejando de lado los corsés de las denominaciones de origen y de los tipos de vinos (Vinos de la Tierra, Vinos de Pago…). ¡¡Pobre consumidor!!
-¿Qué opinión le merecen los vinos de la Denominación de Origen Protegida Vinos de Granada?
-Es una denominación de origen sorprendente, la podríamos llamar 'la bella desconocida'. Si quieres hoy tener emociones nuevas y fuertes, tienes que probar los vinos de la DOP Granada... puro contraste, vinos 'colgados' del sol, la montaña y la playa.
En 1989 fundó su empresa Equipo TEAM (Tecnología Enológica y Alimentaria Mijares), dedicada alconsulting para el sector alimentario en general y el vitivinícola en particular. Es coautora del libroDe la Cepa a la Copa, junto a José Antonio Sáenz Illobre (Mundiprensa 2007), cuyo prólogo escribió su profesor Emile Peynaud, considerado el padre de la enología moderna, de quien fue alumna aventajada. Es asesora de la Guía Repsol de los Mejores Vinos de España, la guía de vinos más vendida en nuestro país.
-Cuando decidió estudiar enología era una profesión poco corriente en hombres e insólita para una mujer en España, y aún menos sin una tradición detrás de una familia bodeguera. ¿Qué le impulsó a dedicarse al vino?
-Cuando terminé mi Licenciatura en Ciencias Químicas en Madrid quise dedicarme a una 'química con alma'. La verdad es que dudé entre el vino y el perfume… Y venció el vino. No valoré si era una profesión de mujeres o de hombres. Elegí cursar dichos estudios en Burdeos, en la mejor escuela de Enología del mundo y cuyos profesores eran los mejores en esta materia. Allí me doctoré.
-Fue la primera mujer presidenta de un Consejo Regulador en España, el de la Denominación de Origen Valdepeñas. ¿Cómo se veía entonces a una mujer en un puesto así, tradicionalmente ocupado por hombres y además en un ámbito rural, como era la Castilla-La Mancha de los años 70?
-Fui la primera mujer presidenta de una Denominación de Origen, no en España, sino en el mundo. Supongo que entonces, sencillamente, no 'se veía' a una mujer en ese puesto, pero a mí me llamó el sector vitivinícola y yo decidí, al terminar mis estudios, que me debía al sector.
-A lo largo de su carrera ha tenido innumerables logros, pero dígame cuál o cuáles han sido realmente especiales para usted.
-He tenido muchos logros y también tropiezos. Lo que más me llega es que me respeten a nivel personal y profesional y que reconozcan mi dedicación en cuerpo y alma al vino. Para conseguir ese respeto he procurado prepararme al máximo a lo largo de toda mi vida. El estudio y la investigación no terminan nunca.
-Las cosas han ido cambiando, afortunadamente, y cada día hay más mujeres en el mundo del vino en todos los ámbitos. ¿Cómo animaría a las chicas de hoy en día a dedicarse profesionalmente al vino?
-Creo que están cada vez más animadas, lo cual es algo muy bueno para el sector. Les diría varias cosas: ante todo, que la Enología es una ciencia, y hay que estudiarla, no se improvisa; además, que el vino una vocación, es mágico pero hay que amarlo, no tiene horas, ni días, es un trabajo permanente; y por último, que tenemos la misma capacidad que los hombres y más imaginación y sensibilidad para el vino .
-Dígame, en su opinión, los puntos fuertes y los puntos débiles del vino español actualmente.
-Sus puntos fuertes son, sin duda, su calidad, su diversidad y su especificidad. Sin embargo, sufren de una falta de imagen y de una promoción insuficiente. No hemos sabido venderlo y esto es algo que debemos solucionar rápidamente, pues la competencia extranjera es feroz.
-¿A qué cree que se debe el descenso brutal del consumo de vino que viene sucediendo en las últimas décadas en nuestro país y cómo podría invertirse esa tendencia?
-Fundamentalmente hemos fallado no sabiendo llevarlo a los jóvenes con palabras sencillas y enamorándoles. Tampoco es que lo hayamos hecho mejor con los mayores. No sabemos transmitir todo lo que tiene de bueno, de positivo, complicamos mucho la comunicación y eso hace que la gente lo perciba como algo elitista o reservado a una minoría entendida. Y el vino es para todos. Solo hay que acercarse y disfrutarlo.
-¿Qué políticas podrían adoptarse para ayudar al sector a salir de la crisis?
-Apoyo, apoyo y apoyo a la promoción e información ante los consumidores y los sectores compradores. Hemos de dejar de hacer leyes y normas y ocuparnos más de la promoción. Es decir, no seguir complicando la información, ni la legislación, dejando de lado los corsés de las denominaciones de origen y de los tipos de vinos (Vinos de la Tierra, Vinos de Pago…). ¡¡Pobre consumidor!!
-¿Qué opinión le merecen los vinos de la Denominación de Origen Protegida Vinos de Granada?
-Es una denominación de origen sorprendente, la podríamos llamar 'la bella desconocida'. Si quieres hoy tener emociones nuevas y fuertes, tienes que probar los vinos de la DOP Granada... puro contraste, vinos 'colgados' del sol, la montaña y la playa.
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