ALBA MARTÍN GRANADA
La nueva exposición que se instaló ayer en el Parque de las Ciencias no podía evidenciar mejor los cambios que se están produciendo en Andalucía. La unión entre educación y cultura refulge a través de veintinueve obras con sello milenario. De hecho, se trata de una selección de trabajos realizados por alumnos de ciclos formativos de grado medio, superior y bachillerato vinculados al mundo plástico y que han representado la conmemoración del Milenio del Reino de Granada desde un punto de vista artístico.
La propuesta está organizada por el Consorcio para la Conmemoración del Primer Milenio de Granada, El legado andalusí, las fundaciones Reino de Granada, la Pública Andaluza y la Robles Pozo, a la que se suma una evidente perseverancia del profesorado de la Escuela de Arte de Granada que han trabajado para que sus alumnos colaboraran mano a mano con el festejo de tan especial efeméride. Así, los proyectos finales de todas las especialidades de la escuela se han realizado en torno a la celebración de los mil años del Reino de Granada.
Para mostrar lo que la futura generación de artistas granadinos puede aportar al patrimonio cultural de la provincia, el Parque de las Ciencias ha cedido una de sus salas de exposiciones, que estará abierta al público hasta el día 9 de octubre. Tras finalizar de estos dos años de estudio, cada uno de los autores seguirá su propio camino. Laura Sotelo, por ejemplo, continuará formándose para ser ilustradora. Por su parte, Rocío López finalizará la carrera de Bellas Artes que compaginaba con esmero con el ciclo formativo que oferta la Escuela de Arte. Javier Recho, Marcelo Quevedo y Ana Soler, en cambio, crearán una empresa de diseño tras haber colaborado en el proyecto realizando la parte gráfica de la exposición.
Asimismo, la muestra refleja el estudio de aquellos elementos que han caracterizado el relieve granadino en estos mil años de historia: la importancia del agua, el cultivo de la caña de azúcar, la significación de la Vega o el patrimonio cultural de la provincia. "La Escuela de Arte ha sido siempre un centro educativo que ha sabido volcar su trabajo en nuestra ciudad y que hoy da como resultado esta exposición que refleja bien la unión de la educación y la cultura", expresó la delegada de Educación de la Junta de Andalucía en la provincia, Ana Gámez, en la inauguración de la muestra.
La organización de la exposición evidencia el potencial artístico de los alumnos en todas sus vertientes, pues en la misma se recogen obras basadas en la serigrafía, la escultura, el grabado, la tinta seca e incluso la realización de una celosía, uno de los elementos decorativos más representativos de la Alhambra.
Blas Calero, el jefe del Departamento de Innovación Educativa y comisario de la muestra, es uno de los artífices de que ésta haya llegado a descubrirse al público. "Queríamos colaborar con las instituciones que participaban en el Milenio, se lo propusimos al profesorado y desde el primer momento se volcó con la iniciativa". Tras plantearlo a sus alumnos, se seleccionaron los mejores proyectos para dar vida a una de las visiones más artísticas del Milenio. Nada tienen que envidiar estos creadores a los que han hecho de la ciudad de la Alhambra una de las más admiradas del mundo.
La propuesta está organizada por el Consorcio para la Conmemoración del Primer Milenio de Granada, El legado andalusí, las fundaciones Reino de Granada, la Pública Andaluza y la Robles Pozo, a la que se suma una evidente perseverancia del profesorado de la Escuela de Arte de Granada que han trabajado para que sus alumnos colaboraran mano a mano con el festejo de tan especial efeméride. Así, los proyectos finales de todas las especialidades de la escuela se han realizado en torno a la celebración de los mil años del Reino de Granada.
Para mostrar lo que la futura generación de artistas granadinos puede aportar al patrimonio cultural de la provincia, el Parque de las Ciencias ha cedido una de sus salas de exposiciones, que estará abierta al público hasta el día 9 de octubre. Tras finalizar de estos dos años de estudio, cada uno de los autores seguirá su propio camino. Laura Sotelo, por ejemplo, continuará formándose para ser ilustradora. Por su parte, Rocío López finalizará la carrera de Bellas Artes que compaginaba con esmero con el ciclo formativo que oferta la Escuela de Arte. Javier Recho, Marcelo Quevedo y Ana Soler, en cambio, crearán una empresa de diseño tras haber colaborado en el proyecto realizando la parte gráfica de la exposición.
Asimismo, la muestra refleja el estudio de aquellos elementos que han caracterizado el relieve granadino en estos mil años de historia: la importancia del agua, el cultivo de la caña de azúcar, la significación de la Vega o el patrimonio cultural de la provincia. "La Escuela de Arte ha sido siempre un centro educativo que ha sabido volcar su trabajo en nuestra ciudad y que hoy da como resultado esta exposición que refleja bien la unión de la educación y la cultura", expresó la delegada de Educación de la Junta de Andalucía en la provincia, Ana Gámez, en la inauguración de la muestra.
La organización de la exposición evidencia el potencial artístico de los alumnos en todas sus vertientes, pues en la misma se recogen obras basadas en la serigrafía, la escultura, el grabado, la tinta seca e incluso la realización de una celosía, uno de los elementos decorativos más representativos de la Alhambra.
Blas Calero, el jefe del Departamento de Innovación Educativa y comisario de la muestra, es uno de los artífices de que ésta haya llegado a descubrirse al público. "Queríamos colaborar con las instituciones que participaban en el Milenio, se lo propusimos al profesorado y desde el primer momento se volcó con la iniciativa". Tras plantearlo a sus alumnos, se seleccionaron los mejores proyectos para dar vida a una de las visiones más artísticas del Milenio. Nada tienen que envidiar estos creadores a los que han hecho de la ciudad de la Alhambra una de las más admiradas del mundo.
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