«Hay más gente solidaria de lo que pensaba» ideal.es

A grandes males, grandes remedios. El refrán se queda corto porque Sandra Martín y su novio están totalmente abrumados por la generosidad de algunas personas que se han ofrecido a darles un cobijo y trabajo. «De verdad que no me lo esperaba», declara la joven tras el vuelco que ha dado su vida. Después de unos meses «muy duros», de repente se enciende la luz y sobre todo «me doy cuenta de que hay más gente solidaria de lo que yo pensaba», confiesa Sandra, que presenta ahora un semblante más alegre y reconoce tener más confianza en los demás.

Le asombra que personas a las que no conoce de nada les ofrezcan de forma altruista una vivienda y la posibilidad de trabajar. Se le están abriendo algunas puertas tras dar a conocer IDEAL que habían estado durmiendo en el coche durante cuatro meses y que acaban de trasladarse al trastero de una familia amiga. «Ahora empiezo a ver las cosas de otra manera», admite Sandra, que acaba de recibir una propuesta de trabajo y una vivienda de la mano de un vecino de un pueblo cercano. Ofertas que le dan seguridad y ganas de seguir luchando.

Tras unos meses angustiosos, las cosas empiezan a aclararse, algo que para esta chica es muy importante ya que estaba desesperada. Aunque tiene trabajo, solo cobra 80 euros al mes, un dinero que gasta en comprar algo de comida. Su novio está en una situación parecida, empleado de comercial en una empresa en la que solo cobra por contrato firmado.

En la piel de los demás

«En cuanto he visto la noticia en IDEAL me he puesto en la situación de esta pareja», explica un joven granadino que les ha ofrecido vivienda durante unos meses y que se ha propuesto incluso conseguirles un trabajo. La pareja ha agradecido el interés de esta persona, cuya generosidad no tiene límites y que ha manifestado su intención de «mover los hilos» para conseguir un empleo a Sandra y su novio. «Sé que la situación está difícil, pero tengo fe y hago que las cosas se hagan realidad», sentencia muy seguro, al tiempo que insiste en que «hay que ponerse en el lugar de los demás y ayudar siempre». Otro vecino de Granada les ha manifestado su interés por darles un trabajo. «Hay que ponerse en la piel de quienes lo pasan mal y ayudar en lo que se pueda», explica mientras espera que la oferta que le hace a la joven pareja pueda solucionar algo su delicada situación.

Aunque anoche Sandra y su novio durmieron de nuevo en el trastero, reconocen tener más esperanza que en días anteriores. «No solo me siento respaldada por personas que ni conozco, sino también por los medios de comunicación, que se han interesado por mi problema y me están ayudando», explica agradecida.
«Agradezco de todo corazón el interés que me están mostrando y me alegra ver que todo el mundo no es tan malo», señala ahora más tranquila.