El viento fue el gran protagonista de la jornada de ayer y dejó incidencias en toda la provincia
S. V. - R. F. GRANADA 
Los diferentes temporales que están pasando por la provincia de Granada en este mes y las lluvias -en muchos momentos intensas- que han caído ya en la provincia han hecho que febrero, con los datos recabados a día de hoy, sea ya el más lluvioso desde 1973. Según explicaron ayer desde la oficina de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Málaga, en el aeropuerto de Granada la media recogida en lo que llevamos de mes es de casi 42 litros cuando la media habitual de este mes según las series anuales analizadas es de 39,7 litros. Y queda todavía medio mes para seguir superando el récord.
En este exceso de precipitaciones han contribuido los diferentes temporales que han cruzado la península y Andalucía en las últimas semanas. El último, la ciclogénesis explosiva que ayer mismo mantuvo en alerta a todo el país por nieve y sobre todo fuertes vientos.
Precisamente el viento fue el protagonista ayer en la provincia por las fuertes rachas que soplaron desde la medianoche del domingo. Se llegaron a registrar vientos superiores a los 80 kilómetros por hora.
El servicio de emergencias 112 gestionó 750 incidencias en Andalucía durante la noche del domingo relacionadas con el temporal de viento y lluvia que afectó a Andalucía. En Granada, se registraron 56 incidencias relacionadas con desprendimiento de ladera, árboles caídos, elementos inestables en la vía pública y cables descolgados. En carreteras, lo más relevante estuvo en Peligros, donde se acumularon balsas de agua en la carretera A-44 y el corte por nevadas de la A-395 en el kilómetro 32 en Monachil.
Los Bomberos de la capital también tuvieron una noche muy activa por el viento. Según explicaron desde el Parque Norte, desde las 23:00 horas del domingo hasta las 02:00 de la madrugada concentraron una docena de avisos por los efectos del viento. Así, atendieron llamadas por retiradas de macetas, farolas rotas, persianas descolgadas, árboles caídos y vallas tiradas no sólo en la capital sino en municipios del Cinturón como Albolote, Armilla, Pinos Puente o Belicena.
En Sierra Nevada también hubo complicaciones. La estación de esquí permaneció cerrada durante la jornada de ayer por condiciones meteorológicas adversas, especialmente por viento, ya que se registraron rachas de hasta 90 kilómetros por hora, según informó Cetursa.
Tráfico también advirtió del corte de la carretera que da acceso a la estación, la A-395, por nevadas desde el kilómetros 32 al 39,5 en ambos sentidos. La carretera autonómica A-4025, también en el término municipal de Monachil, tuvo interrumpida la circulación por hielo en la calzada.
En la Costa la alerta era por fenómenos costeros, que dejaron la flota amarrada y provocaron daños en invernaderos. Las fuertes rachas de viento superaron en Motril los 100 kilómetros por hora. El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Motril, Ignacio López, comentó que en la mañana de ayer la fuerza del viento impidió la salida de todas las embarcaciones, las 16 de arrastre, 9 de artes menores y 4 de cerco. "Todas sin excepción se han quedado en el Puerto", dijo.
Según López, "está siendo un invierno duro". "Hay que aguantar como viene, porque contra el tiempo no se puede hacer nada", añadió. El patrón reconoció que otros años ha habido más margen entre un temporal y otro pero que "este año no hay tregua" y auguró que "este mes lo esperamos todo malo".
Pero no sólo en el mar la fuerza del aire ha producido daños sino que también en el campo se ha dejado sentir el temporal con virulencia. En concreto, los agricultores de cultivos bajo plástico dentro del término municipal de Lújar, que son explotados por vecinos en su mayoría de Castell de Ferro, han visto cómo resultaban afectadas las estructuras de sus invernaderos. El alcalde de esta localidad, Eloy Martín, informó de que están pasando "unos últimos días complicados" y detalló que "en la Rambla del Espinar, la pasada madrugada y la mañana de ayer, los agricultores han sufrido daños en las estructuras de invernaderos". "Aunque cada año invierten más los vecinos en mejorar los invernaderos y por ello están más asegurados, cuando se mete este temporal de días tan seguidos no hay nada que hacer", apostilló el alcalde, que también se dedica a la agricultura.
Martín reconoció que él personalmente se vio afectado y que "aunque el seguro se pueda hacer cargo de una cantidad de lo estropeado, la cosecha ya se tiene que dar por finalizada, las plantas ya quedan inservibles, rompe el plástico, y hay que retirarlas".
En la zona Norte, en la comarca de Guadix, lo que se está notando es el frío y el viento pero sin incidentes importantes.
El tiempo seguirá sin dar tregua y para hoy, aunque sólo se mantiene la alerta en la costa por fenómenos costeros, se sigue esperando lluvia, viento y nieve aunque en cotas más altas.
En este exceso de precipitaciones han contribuido los diferentes temporales que han cruzado la península y Andalucía en las últimas semanas. El último, la ciclogénesis explosiva que ayer mismo mantuvo en alerta a todo el país por nieve y sobre todo fuertes vientos.
Precisamente el viento fue el protagonista ayer en la provincia por las fuertes rachas que soplaron desde la medianoche del domingo. Se llegaron a registrar vientos superiores a los 80 kilómetros por hora.
El servicio de emergencias 112 gestionó 750 incidencias en Andalucía durante la noche del domingo relacionadas con el temporal de viento y lluvia que afectó a Andalucía. En Granada, se registraron 56 incidencias relacionadas con desprendimiento de ladera, árboles caídos, elementos inestables en la vía pública y cables descolgados. En carreteras, lo más relevante estuvo en Peligros, donde se acumularon balsas de agua en la carretera A-44 y el corte por nevadas de la A-395 en el kilómetro 32 en Monachil.
Los Bomberos de la capital también tuvieron una noche muy activa por el viento. Según explicaron desde el Parque Norte, desde las 23:00 horas del domingo hasta las 02:00 de la madrugada concentraron una docena de avisos por los efectos del viento. Así, atendieron llamadas por retiradas de macetas, farolas rotas, persianas descolgadas, árboles caídos y vallas tiradas no sólo en la capital sino en municipios del Cinturón como Albolote, Armilla, Pinos Puente o Belicena.
En Sierra Nevada también hubo complicaciones. La estación de esquí permaneció cerrada durante la jornada de ayer por condiciones meteorológicas adversas, especialmente por viento, ya que se registraron rachas de hasta 90 kilómetros por hora, según informó Cetursa.
Tráfico también advirtió del corte de la carretera que da acceso a la estación, la A-395, por nevadas desde el kilómetros 32 al 39,5 en ambos sentidos. La carretera autonómica A-4025, también en el término municipal de Monachil, tuvo interrumpida la circulación por hielo en la calzada.
En la Costa la alerta era por fenómenos costeros, que dejaron la flota amarrada y provocaron daños en invernaderos. Las fuertes rachas de viento superaron en Motril los 100 kilómetros por hora. El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Motril, Ignacio López, comentó que en la mañana de ayer la fuerza del viento impidió la salida de todas las embarcaciones, las 16 de arrastre, 9 de artes menores y 4 de cerco. "Todas sin excepción se han quedado en el Puerto", dijo.
Según López, "está siendo un invierno duro". "Hay que aguantar como viene, porque contra el tiempo no se puede hacer nada", añadió. El patrón reconoció que otros años ha habido más margen entre un temporal y otro pero que "este año no hay tregua" y auguró que "este mes lo esperamos todo malo".
Pero no sólo en el mar la fuerza del aire ha producido daños sino que también en el campo se ha dejado sentir el temporal con virulencia. En concreto, los agricultores de cultivos bajo plástico dentro del término municipal de Lújar, que son explotados por vecinos en su mayoría de Castell de Ferro, han visto cómo resultaban afectadas las estructuras de sus invernaderos. El alcalde de esta localidad, Eloy Martín, informó de que están pasando "unos últimos días complicados" y detalló que "en la Rambla del Espinar, la pasada madrugada y la mañana de ayer, los agricultores han sufrido daños en las estructuras de invernaderos". "Aunque cada año invierten más los vecinos en mejorar los invernaderos y por ello están más asegurados, cuando se mete este temporal de días tan seguidos no hay nada que hacer", apostilló el alcalde, que también se dedica a la agricultura.
Martín reconoció que él personalmente se vio afectado y que "aunque el seguro se pueda hacer cargo de una cantidad de lo estropeado, la cosecha ya se tiene que dar por finalizada, las plantas ya quedan inservibles, rompe el plástico, y hay que retirarlas".
En la zona Norte, en la comarca de Guadix, lo que se está notando es el frío y el viento pero sin incidentes importantes.
El tiempo seguirá sin dar tregua y para hoy, aunque sólo se mantiene la alerta en la costa por fenómenos costeros, se sigue esperando lluvia, viento y nieve aunque en cotas más altas.
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