Desde el primer trimestre de
2007 se ha multiplicado por seis el número de hogares que no perciben
ningún tipo de ingresos laborales
G. S. M.
granada
La
crisis ha generado en siete años miles de situaciones de urgencia que ni
el débil mercado de trabajo ni el sistema de protección social han sido
capaces de paliar. El proceso de empobrecimiento de la población ha
desembocado en que hoy en día haya más de 62.000 hogares con todos sus
miembros activos en paro. Es decir, 62.000 hogares en los que no entra
ningún ingreso por las rentas del trabajo.
La cifra es objetiva y alarmantemente elevada. Pero todavía resulta más preocupante al compararla con el total de hogares de Granada. Según el detalle de la EPA publicado por el Instituto de Estadística de Andalucía, esos 62.000 hogares con todos sus miembros activos en paro representan un 16,9% de todas las familias granadinas, lo que se dice pronto.
El dato se debe sin ninguna duda a la crisis económica. Basta con echar la vista atrás, al primer trimestre de 2007, por ejemplo, para cerciorarse de que la coyuntura económica ha ido sumiendo a buena parte de la población granadina en un pozo sin fondo cuya salida todavía no se ve. Hace siete años, justo antes de que comenzara la depresión económica, en Granada había solamente 10.700 familias con todos sus miembros en paro. En siete ejercicios se han sumado a esta triste estadística 51.300 hogares, multiplicando por seis las familias que no cuentan con ningún tipo de ingresos más que con las prestaciones o subsidios -con suerte- o las ayudas familiares. En términos porcentuales, el espectacular incremento ha sido del 479,4%.
La situación que padecen miles de granadinos es una de las más graves de toda la comunidad autónoma. Granada es la segunda provincia andaluza que más ha visto crecer el número de hogares con todos sus miembros en paro, sólo por detrás de Málaga, donde esta cifra ha crecido un 611,4%, hasta las 112.400. Sevilla, que ocupa el tercer puesto de este ranking, ha registrado en los últimos siete años un crecimiento del número de familias sin ingresos del 354,2%, hasta las 109.000 actuales. En el resto de las provincias, aunque el incremento también ha sido notable, el crecimiento no supera el 280%. Es el caso de Cádiz, que cuenta con 93.000 familias con todos sus miembros en paro; Córdoba, con 41.900 hogares en esta difícil situación; Almería, con 39.500; Jaén, con 24.300; y Huelva, con 23.200.
En todo caso, la estadística de la EPA demuestra que en el último año las cosas sí que han mejorado ligeramente para los granadinos. Desde el primer trimestre de 2013 el número de hogares con todos sus miembros en paro se ha reducido un 4%, lo que ha permitido salir de esta situación a 2.600 familias granadinas.
La cifra es objetiva y alarmantemente elevada. Pero todavía resulta más preocupante al compararla con el total de hogares de Granada. Según el detalle de la EPA publicado por el Instituto de Estadística de Andalucía, esos 62.000 hogares con todos sus miembros activos en paro representan un 16,9% de todas las familias granadinas, lo que se dice pronto.
El dato se debe sin ninguna duda a la crisis económica. Basta con echar la vista atrás, al primer trimestre de 2007, por ejemplo, para cerciorarse de que la coyuntura económica ha ido sumiendo a buena parte de la población granadina en un pozo sin fondo cuya salida todavía no se ve. Hace siete años, justo antes de que comenzara la depresión económica, en Granada había solamente 10.700 familias con todos sus miembros en paro. En siete ejercicios se han sumado a esta triste estadística 51.300 hogares, multiplicando por seis las familias que no cuentan con ningún tipo de ingresos más que con las prestaciones o subsidios -con suerte- o las ayudas familiares. En términos porcentuales, el espectacular incremento ha sido del 479,4%.
La situación que padecen miles de granadinos es una de las más graves de toda la comunidad autónoma. Granada es la segunda provincia andaluza que más ha visto crecer el número de hogares con todos sus miembros en paro, sólo por detrás de Málaga, donde esta cifra ha crecido un 611,4%, hasta las 112.400. Sevilla, que ocupa el tercer puesto de este ranking, ha registrado en los últimos siete años un crecimiento del número de familias sin ingresos del 354,2%, hasta las 109.000 actuales. En el resto de las provincias, aunque el incremento también ha sido notable, el crecimiento no supera el 280%. Es el caso de Cádiz, que cuenta con 93.000 familias con todos sus miembros en paro; Córdoba, con 41.900 hogares en esta difícil situación; Almería, con 39.500; Jaén, con 24.300; y Huelva, con 23.200.
En todo caso, la estadística de la EPA demuestra que en el último año las cosas sí que han mejorado ligeramente para los granadinos. Desde el primer trimestre de 2013 el número de hogares con todos sus miembros en paro se ha reducido un 4%, lo que ha permitido salir de esta situación a 2.600 familias granadinas.
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