- Investigadores
de la UPM han desarrollado un ladrillo cerámico con una estructura interna
diferente, a base de hexágonos irregulares, capaz de ofrecer el mismo
aislamiento acústico que cuatro de sus alternativas habituales
Un grupo de científicos de la Universidad Politécnica de
Madrid ha desarrollado una nueva forma de construir ladrillos para aumentar sus
capacidades de aislamiento acústico. Su tecnología se basa en cambiar la
estructura interna de los mismos sin alterar su aspecto exterior, ni los costes
de manufactura.
Uno solo de sus ladrillos, explican los investigadores,
tiene las mismas propiedades de aislamiento acústico que cuatro convencionales.
Esto lo consiguen gracias a un modificación de las celdas del mismo, a las que
confieren una forma de hexágonos irregulares. «Nuestra investigación se basa en
el principio físico de amortiguación acústica de los materiales, que reivindica
que la onda sonora disminuye exponencialmente su intensidad según el camino
recorrido», explica David Corbella, miembro del equipo.
Es decir, cuanto más distancia ha de recorrer el sonido a
través de un material, más se atenúa. «A partir de esta idea desarrollamos la
idea de sustituir los rectángulos por hexágonos en la formación de las celdas
de los ladrillos cerámicos de hueco horizontal», afirma el investigador. Estos
son muy habituales en la construcción de toda clase de edificios, para levantar
las paredes que separan unas viviendas de otras. «Quedamos sorprendidos al
determinar gráfica y analíticamente que un solo ladrillo, con una nueva
geometría de celdas formadas por hexágonos no regulares multiplica por más de
cuatro el recorrido entre las caras exteriores del ladrillo a través de los
tabiques del exterior», señala.
Prototipo
El trabajo lo han presentado en el encuentro internacional
sobre ingeniería, diseño y construcción avanzada, donde fue galardonado como
uno de los mejores proyectos de investigación. Aun así, aseguran los autores,
todavía están al principio del camino para llevar esta tecnología del
laboratorio a la obra. «La aplicación inmediata es la fabricación de los
primeros prototipos de los nuevos ladrillos cerámicos de hueco hexagonal, y el
diseño de nuevas boquillas de las máquinas extrusoras empleadas para su
fabricación», explica Corbella.
«Estos prototipos nos permitirán seguir estudiando el
comportamiento mecánico y la amortiguación acústica de estos ladrillos». Si los
resultados son los esperados, afirma el investigador, esperan verlos
convertidos en un elemento común en toda clase de obras alrededor del mundo.
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