La Junta pasa la pelota al Ejecutivo central y supedita su inversión a un "mayor esfuerzo" desde Madrid
ENRIQUE ABUÍN GRANADA 
Ganar la Champions League de la ciencia durante veinte años seguidos. Este fue el símil futbolístico que eligió Antonio Suárez, de Ciudadanos, para explicar lo que significaría instalar en Granada el acelerador de partículas del macroproyecto científico IFMIF, con el que se probarían materiales para crear futuros reactores de fusión. Una infraestructura de primera talla mundial para la que se necesita una inversión total de 600 millones dividida al 50% entre España y las aportaciones de los socios internacionales. Este esfuerzo reportaría un impacto económico de 1.000 millones y 12.000 puestos de trabajo en los próximos 18 años, entre las fases de construcción y operación. De los cuales, habría seguro unos 1.000 empleos fijos destinados a personal cualificado. Estas cifras avaladas por un organismo como el ICEX y por economistas, que han mostrado su apoyo incondicional al proyecto, no parecen convencer, de momento, a la Junta de Andalucía, que a través del consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano, mostró cierta distancia con esta iniciativa y desvió la responsabilidad al Gobierno.
Fue en referencia a la pregunta que elevó desde Ciudadanos la parlamentaria Marta Escrivá, que solicitó información sobre cómo van las gestiones para que Granada se convierta en sede de IFMIF. La respuesta del consejero fue aclarar que esta propuesta es una idea del Gobierno central, "que ha impulsado la candidatura, la idea de usar fondos europeos regionales e, incluso, el que se instalara en Granada". Asimismo, Ramírez de Arellano reconoció que "con todas estas decisiones tomadas, hace un año el Gobierno de España pidió la colaboración de Andalucía para el proyecto, a lo que la Junta ha respondido afirmativamente" como se demuestra en la carta de apoyo que firmó su antecesor donde se aseguraba un soporte logístico, pero sin mencionar en ningún momento una oferta económica. Lo cual se considera indispensable para que la candidatura española tenga verdaderas opciones de ganar, ya que sin la inversión autonómica, Granada no podría competir con Polonia, la gran rival en la carrera por el acelerador.
Por tanto, el consejero se limitó a subrayar el "carácter nacional" del proyecto del acelerador de partículas de Granada e instó al Ejecutivo español a realizar un "mayor esfuerzo" para el desarrollo de esta iniciativa. En todo caso, Ramírez de Arellano abrió una pequeña puerta a una colaboración de la Junta y afirmó que la institución andaluza está dispuesta a involucrarse siempre y cuando el Gobierno "realice también aportaciones propias". En concreto, según las estimaciones actuales España tendría que financiar unos 300 millones para conseguir IFMIF, de los cuales el 80% se recibirían en Andalucía a través de fondos Feder. Es decir, que además de lo que se reciba desde Europa, la Junta tendría que aportar 100 millones repartidos en los diez años que duraría el proceso de construcción y el resto del dinero lo sufragaría el Ministerio de Economía y Competitividad.
Por su parte, Escrivá señaló la importancia que tendría la plataforma de IFMIF en una provincia como Granada a nivel socioeconómico y comparó la inversión total con la del Metro para apuntar que Andalucía "no se puede permitir" dejar pasar este tren y luchar por el retorno del talento que ha emigrado ante la falta de posibilidades. "Es urgente que el Parlamento haga lo oportuno para agilizar las actuaciones y facilitar las condiciones para cumplir los requisitos", manifestó la parlamentaria.
En la misma línea se pronunciaron sus compañeros de Ciudadanos Granada, que además anunciaron que buscarán el consenso con el resto de partidos representados en el Ayuntamiento y la Diputación para aprobar una declaración institucional que impulse la candidatura. Así, el portavoz provincial de C's, Luis Salvador, remarcó la importancia de "generar consensos y acuerdos y comprometer instituciones" para presentar una candidatura ganadora, además de solicitar un receso hasta otoño cuando ya esté formado el Gobierno de España y la propuesta pueda ser más sólida.
Fue en referencia a la pregunta que elevó desde Ciudadanos la parlamentaria Marta Escrivá, que solicitó información sobre cómo van las gestiones para que Granada se convierta en sede de IFMIF. La respuesta del consejero fue aclarar que esta propuesta es una idea del Gobierno central, "que ha impulsado la candidatura, la idea de usar fondos europeos regionales e, incluso, el que se instalara en Granada". Asimismo, Ramírez de Arellano reconoció que "con todas estas decisiones tomadas, hace un año el Gobierno de España pidió la colaboración de Andalucía para el proyecto, a lo que la Junta ha respondido afirmativamente" como se demuestra en la carta de apoyo que firmó su antecesor donde se aseguraba un soporte logístico, pero sin mencionar en ningún momento una oferta económica. Lo cual se considera indispensable para que la candidatura española tenga verdaderas opciones de ganar, ya que sin la inversión autonómica, Granada no podría competir con Polonia, la gran rival en la carrera por el acelerador.
Por tanto, el consejero se limitó a subrayar el "carácter nacional" del proyecto del acelerador de partículas de Granada e instó al Ejecutivo español a realizar un "mayor esfuerzo" para el desarrollo de esta iniciativa. En todo caso, Ramírez de Arellano abrió una pequeña puerta a una colaboración de la Junta y afirmó que la institución andaluza está dispuesta a involucrarse siempre y cuando el Gobierno "realice también aportaciones propias". En concreto, según las estimaciones actuales España tendría que financiar unos 300 millones para conseguir IFMIF, de los cuales el 80% se recibirían en Andalucía a través de fondos Feder. Es decir, que además de lo que se reciba desde Europa, la Junta tendría que aportar 100 millones repartidos en los diez años que duraría el proceso de construcción y el resto del dinero lo sufragaría el Ministerio de Economía y Competitividad.
Por su parte, Escrivá señaló la importancia que tendría la plataforma de IFMIF en una provincia como Granada a nivel socioeconómico y comparó la inversión total con la del Metro para apuntar que Andalucía "no se puede permitir" dejar pasar este tren y luchar por el retorno del talento que ha emigrado ante la falta de posibilidades. "Es urgente que el Parlamento haga lo oportuno para agilizar las actuaciones y facilitar las condiciones para cumplir los requisitos", manifestó la parlamentaria.
En la misma línea se pronunciaron sus compañeros de Ciudadanos Granada, que además anunciaron que buscarán el consenso con el resto de partidos representados en el Ayuntamiento y la Diputación para aprobar una declaración institucional que impulse la candidatura. Así, el portavoz provincial de C's, Luis Salvador, remarcó la importancia de "generar consensos y acuerdos y comprometer instituciones" para presentar una candidatura ganadora, además de solicitar un receso hasta otoño cuando ya esté formado el Gobierno de España y la propuesta pueda ser más sólida.
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