Páginas

miércoles, 5 de octubre de 2016

Armonías: pan con aceite el Huffington Post

 
Director, Fundación Carolina
 Hazte fan 
Presidente de la Real Academia de Gastronomía


Lo primero, naturalmente, es elegir un pan adecuado, lo que se llama en general un pan de campo, con abundante miga. No es necesario tostarlo pero tampoco importaría mucho.
A partir de ahí, lo fundamental es el aceite. En primer lugar, que sea de oliva. En segundo lugar, que sea virgen extra. En tercer lugar, que sea el del tipo de aceituna que armoniza mejor con el pan.
De lo que se trata es de encontrar la "pareja" ideal. Para ello, hay que colocar 4 rebanadas no muy grandes y seleccionar 4 tipos de aceite de oliva virgen extra más o menos básicos.
En nuestro caso, hemos elegido arbequina, picual, cornicabra y hojiblanca. Pueden añadirse otros a la cata, por ejemplo, el empeltre, el royal o la manzanilla. Pero pensamos que con los 4 que hemos elegido es suficiente.
Foto: ISTOCK

El aceite de oliva virgen extra es una grasa y un condimento. Cuando se combina con productos que tienen mucho sabor o que tienen matices muy elegantes, conviene utilizar un aceite de oliva suave, que, en el fondo, únicamente añade algo de grasa, fundamental para la palatabilidad de los alimentos.
Por el contrario, si se utiliza con productos que tienen poco sabor, que son más neutros, conviene buscar un aceite de oliva intenso, que aporte condimento al producto.
Lo primero, naturalmente, es elegir un pan adecuado, lo que se llama en general un pan de campo, con abundante miga. No es necesario tostarlo pero tampoco importaría mucho.
A partir de ahí, lo fundamental es el aceite. En primer lugar, que sea de oliva. En segundo lugar, que sea virgen extra. En tercer lugar, que sea el del tipo de aceituna que armoniza mejor con el pan.
De lo que se trata es de encontrar la "pareja" ideal. Para ello, hay que colocar 4 rebanadas no muy grandes y seleccionar 4 tipos de aceite de oliva virgen extra más o menos básicos.
En nuestro caso, hemos elegido arbequina, picual, cornicabra y hojiblanca. Pueden añadirse otros a la cata, por ejemplo, el empeltre, el royal o la manzanilla. Pero pensamos que con los 4 que hemos elegido es suficiente.
El aceite de oliva virgen extra es una grasa y un condimento. Cuando se combina con productos que tienen mucho sabor o que tienen matices muy elegantes, conviene utilizar un aceite de oliva suave, que, en el fondo, únicamente añade algo de grasa, fundamental para la palatabilidad de los alimentos.
Por el contrario, si se utiliza con productos que tienen poco sabor, que son más neutros, conviene buscar un aceite de oliva intenso, que aporte condimento al producto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario