Páginas

domingo, 15 de marzo de 2020

Ocho datos sobre el coronavirus que debes leer cuando sientas ansiedad elhuffingtonpost

La epidemia es un problema muy real, pero es importante mantener la calma en momentos de estrés. Esta información puede ayudarte.

Por
Lindsay Holmes


ZOONO3 VIA GETTY IMAGES
Los expertos coinciden en que estar preparados (que no es lo mismo que estar histéricos) es fundamental a la hora de afrontar la crisis del coronavirus. Pero es muy fácil decirlo, ¿no?

Es complicado mantener la calma con la avalancha de noticias que están saliendo sobre el COVID-19 y la preocupación por la población de riesgo, las consecuencias económicas y el sistema sanitario. Por no mencionar que la combinación de mal tiempo y gripe está provocando enfriamientos que no son coronavirus, pero que hace que la ansiedad se dispare. Estamos siendo testigos de cambios radicales en las rutinas de la población: la forma de vivir, de trabajar y de viajar.

Con tanta incertidumbre, es completamente normal estar preocupados o tener miedo ahora mismo. No obstante, los expertos insisten en que hay que controlar la ansiedad. Una de las mejores formas de hacerlo es poseer una mayor perspectiva de la situación.
A continuación puedes leer varios datos sobre el COVID-19 para que no solo tengas en mente la información más preocupante. No se trata de quitarle importancia al problema, sino de recordar que también hay motivos para la esperanza.

La mayoría de la gente se recupera del COVID-19

La editorial especializada Harvard Health informa de que la mayoría de la gente que contrae el coronavirus lo supera.

A fecha de hoy, ya se han recuperado completamente más de 66.000 personas en todo el mundo, según datos de la Universidad John Hopkins.

La mayoría sufre una sintomatología “leve”

Los expertos explican que los casos pueden variar de leves a severos. Incluso hay gente asintomática.

Los síntomas pueden llegar a ser “fiebre de más de 38 grados, malestar e incluso náuseas y diarrea. En casos más graves, puede provocar falta de aliento, dolor en el pecho y neumonía”, enumera la doctora Linda Anegawa, de la plataforma PlushCare.

Los médicos recomiendan tratar la enfermedad con paracetamol para la fiebre, bebiendo mucha agua y descansando.

Es improbable que se pueda transmitir por los alimentos

“No conocemos ningún informe que sugiera que el COVID-19 se pueda transmitir a través de los alimentos o los envases”, comentó recientemente un portavoz de la USDA (Departamento de Agricultura de Estados Unidos) en un comunicado.

Los principales medios de transmisión son estar cerca de gente que tiene la enfermedad, las gotículas respiratorias y llevarte las manos a la cara después de tocar superficies contaminadas.

Tampoco hay pruebas de que las mascotas lo transmitan

La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala en su web que “no hay pruebas” de que perros o gatos puedan infectarse con el coronavirus, por lo que no pueden propagarlo. Así que puedes seguir acariciarlos sin miedo, lo cual te ayudará con el estrés, pero no olvides lavarte bien las manos después.

Es posible que remita cuando llegue el calor

Todavía hay muchas cosas que desconocemos sobre el virus, ya que es nuevo. Una de ellas es la duración que tendrá la pandemia, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Nadie sabe con certeza cuándo se frenará la expansión del coronavirus ni si será más leve cuando llegue la primavera y el verano. Sin embargo, los expertos sospechan que es probable que así sea, basándose en enfermedades similares del pasado.

Los científicos ya están trabajando en una vacuna

Probablemente no esté disponible pronto, pero sí en los próximos 12 o 18 meses. Aunque no es una buena noticia inmediata, al menos hay esperanza en que los investigadores desarrollen más medicamentos en el futuro.

Una de las mejores formas de prevenirlo es muy simple

Lávate. Las. Manos.

Fin.

Los médicos recomiendan lavarse las manos con agua caliente y jabón y frotar durante un mínimo de 20 segundos. Utiliza el sentido común para decidir con cuánta frecuencia lavarte las manos: después de ir al baño, antes de hacer la comida, después de estar en lugares públicos y después de tocar cualquier superficie potencialmente contaminada.

Intenta también no llevarte las manos a la cara, sobre todo si no están recién lavadas (aquí tienes unos consejos para lograrlo), ya que el virus se transmite con facilidad al tocarte los ojos, la nariz o la boca. Las toallitas desinfectantes son una buena opción para mantener las cosas limpias.

Y recordemos que estas medidas de higiene son válidas en todo momento y lo seguirán siendo una vez termine la pandemia.

Recuerda que tú también puedes ayudar a frenar el coronavirus

Si quieres canalizar tu pánico en algo productivo, cambia de mentalidad: conviértete en tu prioridad. A muchísima gente, esta enfermedad no les afectará gravemente, pero a muchas otras personas, sí. Es el caso de ancianos y gente con enfermedades crónicas, como cardiopatías, diabetes y enfermedades pulmonares.

Llevar a cabo una buena higiene y autoimponerse distancia social siempre que se posible, vacunarte de la gripe y quedarte en casa si estás enfermo son formas de colaborar con la salud de la sociedad en cualquier circunstancia.

Todo el mundo tiene su parte de responsabilidad para con las demás personas de este mundo. Una de las mejores formas de ser responsables es cuidar los hábitos y la salud de uno mismo. Si hasta ahora no lo has hecho, no hay mejor momento para empezar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario