Más de 10.000 firmas para la reapertura de Las Palomas granadahoy.com

La plataforma vecinal presenta una iniciativa ciudadana en contra del cierre de la biblioteca del Zaidín

IVÁN ROMERO / GRANADA
Casi dos meses después del cierre unilateral de la biblioteca de la plaza de Las Palomas por parte del Ayuntamiento de Granada, la plataforma No al Cierre de la Biblioteca del Zaidín sigue protagonizando protestas que piden la reapertura inmediata del punto de lectura. La última tuvo lugar ayer a las puertas del Consistorio granadino, en la plaza del Carmen, aprovechando la entrega de 10.000 firmas de vecinos que se oponen a la medida.

La portavoz del movimiento vecinal, Flora Ros, aseguró que estas miles de firmas demuestran que los zaidineros no están conformes con las explicaciones que han dado los responsables políticos municipales en los últimos meses, tendentes todas ellas a justificar el cierre argumentando el bajo número de préstamos que registró la biblioteca el pasado año y la reciente inauguración de la biblioteca Francisco Ayala, a dos kilómetros y medio de la plaza de las Palomas.

"Siempre se nos dan los mismos argumentos, pero son engañosos. Tendrían que hacer un estudio comparativo entre todas las bibliotecas de la ciudad para ver si realmente las cifras de visitantes y de préstamos que se dieron en 2010 en la biblioteca de las plaza de Las Palomas son bajas o no. Utilizar una cifra descontextualizada es algo que carece de rigor", apuntó la portavoz.

Asimismo, Ros se esforzó en subrayar que la oposición vecinal al cierre no se basa, en realidad, en la distancia que separa una y otra biblioteca, sino en el cambio de contexto social que existen entre una zona y otra. "El tipo de gente que frecuenta la Francisco Ayala es totalmente diferente a la que iba a la biblioteca de las Palomas. Son dos clases de público distinto con necesidades distintas", puntualizó.

A este hecho se une, según Ros, que las instalaciones de la Francisco Ayala están últimamente a rebosar de usuarios y que los propios funcionarios, a los que Ros dice conocer personalmente, "no dan abasto en la tarea de gestionar el servicio de préstamo de libros".

Por su parte, María del Carmen Gutiérrez, otra representante del colectivo, quiso dejar claro que, aunque es competencia del Ayuntamiento de Granada velar por un adecuado acceso a la cultura de los ciudadanos. "La plataforma vecinal está dispuesta a crear un modelo de autogestión" de la biblioteca clausurada dirigido a seguir ofreciendo el servicio de préstamo de libros e, incluso, "ampliar la oferta cultural a actividades como impartir clases de español para inmigrantes".