El Ayuntamiento forma a 50 auxiliares para que atiendan en casa a personas con enfermedad mental
A. G. V. GRANADA 
Más de 500 personas mayores de Granada tienen que recurrir al servicio de comidas del Ayuntamiento para poder comer. Por dos causas: bien porque no tienen recursos para poder hacer frente a este gasto o bien porque los años han mermado sus habilidades y ya no pueden manejarse entre los fogones. De ahí que recurran al servicio de comida a domicilio del área de Bienestar Social del Ayuntamiento.
El programa de comidas se complementa con el de ayuda a domicilio, donde se ha dado servicio en 2013 a 1.920 personas, un 33% más que en el año anterior. Las personas que disfrutan de este servicio reciben la visita de un profesional que les ayuda a bañarse, a vestirse, les da de comer y les controla los tratamientos médicos en coordinación con los servicios sanitarios. También se les ayuda a comprar y hacer la comida, a lavar y planchar, a limpiar la casa y a hacer pequeñas reparaciones domésticas. La demanda de este tipo de servicio aumenta cada año, principalmente en La Chana, donde se atiende a 435 personas. Le siguen las personas mayores de la zona Norte (409), del distrito Ronda (376) y del Zaidín (349).
Como las personas que reciben este tipo de atención se van haciendo cada vez más mayores y tienen más limitaciones, han aumentado el número de horas de prestación, concretamente 11.955 horas respecto al año anterior. "A través de este servicio se da cobertura a una amplia gama de atenciones, teniendo en cuenta las necesidades de estas personas que son determinadas por los técnicos municipales y trabajadores sociales que visitan y entrevistan a estas personas y valoran sus necesidades en función de su situación económica y familiar", asegura el concejal de Bienestar Social en el Ayuntamiento de Granada, Fernando Egea.
Además de los propios beneficiarios y por extensión, el servicio también beneficia a las familias de estas personas. Actualmente la tipología de tareas que más se prestan son las de aseo e higiene personal así como las relacionadas con el apoyo doméstico.
Para llevar a cabo esta tarea, el año pasado el Ayuntamiento reservó cerca de cuatro millones de euros. Este año ha destinado la misma cantidad. Si se desglosa la partida, irán 3.306.000 euros a servicios de ayuda a domicilio y 646.014 para el servicio de comidas en domicilio para personas con limitaciones de autonomía.
Si ya de por sí el trabajo es complicado, la situación se agrava cuando la persona mayor padece alguna enfermedad mental, de ahí que Bienestar Social haya decidido formar a 50 auxiliares de ayuda a domicilio para que aprendan cómo atender a estas personas. Tras esta formación estarán coordinados por un profesional que incorporará la empresa adjudicataria del servicio con formación específica que supervisará las tareas de estos auxiliares.
El programa de comidas se complementa con el de ayuda a domicilio, donde se ha dado servicio en 2013 a 1.920 personas, un 33% más que en el año anterior. Las personas que disfrutan de este servicio reciben la visita de un profesional que les ayuda a bañarse, a vestirse, les da de comer y les controla los tratamientos médicos en coordinación con los servicios sanitarios. También se les ayuda a comprar y hacer la comida, a lavar y planchar, a limpiar la casa y a hacer pequeñas reparaciones domésticas. La demanda de este tipo de servicio aumenta cada año, principalmente en La Chana, donde se atiende a 435 personas. Le siguen las personas mayores de la zona Norte (409), del distrito Ronda (376) y del Zaidín (349).
Como las personas que reciben este tipo de atención se van haciendo cada vez más mayores y tienen más limitaciones, han aumentado el número de horas de prestación, concretamente 11.955 horas respecto al año anterior. "A través de este servicio se da cobertura a una amplia gama de atenciones, teniendo en cuenta las necesidades de estas personas que son determinadas por los técnicos municipales y trabajadores sociales que visitan y entrevistan a estas personas y valoran sus necesidades en función de su situación económica y familiar", asegura el concejal de Bienestar Social en el Ayuntamiento de Granada, Fernando Egea.
Además de los propios beneficiarios y por extensión, el servicio también beneficia a las familias de estas personas. Actualmente la tipología de tareas que más se prestan son las de aseo e higiene personal así como las relacionadas con el apoyo doméstico.
Para llevar a cabo esta tarea, el año pasado el Ayuntamiento reservó cerca de cuatro millones de euros. Este año ha destinado la misma cantidad. Si se desglosa la partida, irán 3.306.000 euros a servicios de ayuda a domicilio y 646.014 para el servicio de comidas en domicilio para personas con limitaciones de autonomía.
Si ya de por sí el trabajo es complicado, la situación se agrava cuando la persona mayor padece alguna enfermedad mental, de ahí que Bienestar Social haya decidido formar a 50 auxiliares de ayuda a domicilio para que aprendan cómo atender a estas personas. Tras esta formación estarán coordinados por un profesional que incorporará la empresa adjudicataria del servicio con formación específica que supervisará las tareas de estos auxiliares.
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