La mediación es un instrumento eficaz pero hace falta concienciar a la sociedad de su utilidad y ventajas La Asociación Solucion@ Granada se ha marcado un claro objetivo: potenciarla
YENALIA HUERTAS GRANADA 
"Hablando se entiende la gente" es un aforismo tan sabio como usado. Conversar con el contrario es la clave de la solución en un conflicto. También es la base de la mediación, una beneficiosa alternativa a los litigios judiciales cada vez más extendida. Pero no siempre las dos partes en discordia están dispuestas ni preparadas para mantener un diálogo respetuoso, presidido por la empatía y por las ganas de buscar una salida en común a la controversia. Por eso, la mayoría de los desencuentros acaban en los tribunales. La gente olvida que la solución está mucho más cerca: en su mano. Para impulsar la mediación como alternativa al pleito, potenciarla y concienciar a la sociedad de sus bondades nació hace casi un año en Granada la Asociación Solucion@.
Hoy, con motivo de la celebración del Día Europeo de la Mediación, la presidenta de Solucion@ Granada, Estefanía Roldán, manda un mensaje claro sobre su efectividad: "Cuando la gente acude con buena fe y con ganas, en la mayoría de los casos se consiguen acuerdos muy buenos, beneficiosos y duraderos".
Solucion@ Granada tiene sus raíces en Málaga, donde surgió en 2002. Con el tiempo, sus impulsores abrieron delegaciones también en Antequera y Marbella. El aterrizaje en Granada se produjo la pasada primavera. Su sede se halla en el despacho profesional que Roldán -abogada experta en asuntos de Familia- tiene en el número 51 de la calle San Antón.
El equipo de Solucion@ Granada está integrado actualmente por ocho profesionales, entre juristas, trabajadores sociales, psicólogos y sociólogos con experiencia en mediación. Todos ellos apuestan "por la necesidad de un cambio en la forma tradicional de resolver los conflictos".
"Éramos cinco y hemos tenido tres nuevas incorporaciones. Nuestra idea es que la asociación se amplíe, que sea abierta y todo el mundo tenga posibilidad de entrar", indica Roldán, al tiempo que precisa que hasta ahora no cuentan con ningún tipo de ayuda institucional. Para afrontar los gastos que genera su actividad Solucion@ cuenta con una cuota de inscripción inicial y otra mensual.
"Nuestro objetivo principal es hacer divulgación y dar a conocer la mediación", detalla la presidenta. Aparte, la asociación tiene un servicio propio de mediación en el despacho, aunque aún no ha llevado a cabo ningún proceso como entidad (sus integrantes como mediadores sí, pero de forma individual). Una mediación suele costar "entre 100 y 120 euros, a dividir entre las dos partes". En cualquier caso, como ensalza la presidenta, en los juzgados de Granada (tanto en los tres de Familia, como en algunos civiles, laborales, penales y de instrucción) se hace mediación intrajudicial "totalmente gratuita".
En estos primeros meses de vida, tres personas se han dirigido a la sede de Solucion@ interesadas en resolver su problema lejos del despacho de un juez, pero ninguna ha acabado fraguando su pretensión porque la otra parte declinó resolver el conflicto por esta vía. Y ello pese a ser mucho más económica que la judicial.
A la hora de enumerar las ventajas de la mediación, Roldán se muestra contundente: "es mucho más rápida que un proceso judicial". La mediación se puede hacer de inmediato si las partes se ponen de acuerdo y se someten voluntariamente. El abanico de controversias que pueden solucionarse a través de la mediación es muy amplio: desde disputas y rifirrafes vecinales, a asuntos de familia, pasando por disoluciones de empresas, etc.
"Hay muchos tipos de mediaciones", subraya Roldán, para aclarar que lo primero que se hace cuando alguien acude a la mediación es hacer una "sesión informativa" que es "siempre gratuita". En ella, se explica el proceso a las partes y, si aceptan la mediación, se hace "una especie de acuerdo, de contrato, para que conste que realmente están ahí porque quieren". Tras ese primer paso, van surgiendo los temas a tratar y se van alcanzando acuerdos. La solución va cogiendo forma. "Lo primero que se ofrece es la posibilidad de las partes se comuniquen, devolverles la comunicación, que puedan hablar con respeto, entendiendo un poco la posición del otro", señala la abogada, quien confirma que sobre todo en Familia "cuando la gente se divorcia no se habla".
En cuanto a la figura del mediador, Roldán deja claro que "en ningún momento excluye el papel del abogado, que es el que asesora legalmente". El mediador lo que hace es, de forma imparcial, guiar a las partes por ese proceso de negociación, de diálogo y de comunicación, y aunque sea abogado no puede asesorar legalmente en el proceso.
Cuando ya se ha establecido la comunicación y se han limado las primeras asperezas, lo normal es que todo vaya sobre ruedas. "Las partes -añade- tienen mucha capacidad y en el 99% de los casos están capacitadas para poder llegar acuerdos ellos mismos, sin que un abogado o un juez les diga lo que les conviene o interesa". Por eso: hablando se entiende la gente.
Hoy, con motivo de la celebración del Día Europeo de la Mediación, la presidenta de Solucion@ Granada, Estefanía Roldán, manda un mensaje claro sobre su efectividad: "Cuando la gente acude con buena fe y con ganas, en la mayoría de los casos se consiguen acuerdos muy buenos, beneficiosos y duraderos".
Solucion@ Granada tiene sus raíces en Málaga, donde surgió en 2002. Con el tiempo, sus impulsores abrieron delegaciones también en Antequera y Marbella. El aterrizaje en Granada se produjo la pasada primavera. Su sede se halla en el despacho profesional que Roldán -abogada experta en asuntos de Familia- tiene en el número 51 de la calle San Antón.
El equipo de Solucion@ Granada está integrado actualmente por ocho profesionales, entre juristas, trabajadores sociales, psicólogos y sociólogos con experiencia en mediación. Todos ellos apuestan "por la necesidad de un cambio en la forma tradicional de resolver los conflictos".
"Éramos cinco y hemos tenido tres nuevas incorporaciones. Nuestra idea es que la asociación se amplíe, que sea abierta y todo el mundo tenga posibilidad de entrar", indica Roldán, al tiempo que precisa que hasta ahora no cuentan con ningún tipo de ayuda institucional. Para afrontar los gastos que genera su actividad Solucion@ cuenta con una cuota de inscripción inicial y otra mensual.
"Nuestro objetivo principal es hacer divulgación y dar a conocer la mediación", detalla la presidenta. Aparte, la asociación tiene un servicio propio de mediación en el despacho, aunque aún no ha llevado a cabo ningún proceso como entidad (sus integrantes como mediadores sí, pero de forma individual). Una mediación suele costar "entre 100 y 120 euros, a dividir entre las dos partes". En cualquier caso, como ensalza la presidenta, en los juzgados de Granada (tanto en los tres de Familia, como en algunos civiles, laborales, penales y de instrucción) se hace mediación intrajudicial "totalmente gratuita".
En estos primeros meses de vida, tres personas se han dirigido a la sede de Solucion@ interesadas en resolver su problema lejos del despacho de un juez, pero ninguna ha acabado fraguando su pretensión porque la otra parte declinó resolver el conflicto por esta vía. Y ello pese a ser mucho más económica que la judicial.
A la hora de enumerar las ventajas de la mediación, Roldán se muestra contundente: "es mucho más rápida que un proceso judicial". La mediación se puede hacer de inmediato si las partes se ponen de acuerdo y se someten voluntariamente. El abanico de controversias que pueden solucionarse a través de la mediación es muy amplio: desde disputas y rifirrafes vecinales, a asuntos de familia, pasando por disoluciones de empresas, etc.
"Hay muchos tipos de mediaciones", subraya Roldán, para aclarar que lo primero que se hace cuando alguien acude a la mediación es hacer una "sesión informativa" que es "siempre gratuita". En ella, se explica el proceso a las partes y, si aceptan la mediación, se hace "una especie de acuerdo, de contrato, para que conste que realmente están ahí porque quieren". Tras ese primer paso, van surgiendo los temas a tratar y se van alcanzando acuerdos. La solución va cogiendo forma. "Lo primero que se ofrece es la posibilidad de las partes se comuniquen, devolverles la comunicación, que puedan hablar con respeto, entendiendo un poco la posición del otro", señala la abogada, quien confirma que sobre todo en Familia "cuando la gente se divorcia no se habla".
En cuanto a la figura del mediador, Roldán deja claro que "en ningún momento excluye el papel del abogado, que es el que asesora legalmente". El mediador lo que hace es, de forma imparcial, guiar a las partes por ese proceso de negociación, de diálogo y de comunicación, y aunque sea abogado no puede asesorar legalmente en el proceso.
Cuando ya se ha establecido la comunicación y se han limado las primeras asperezas, lo normal es que todo vaya sobre ruedas. "Las partes -añade- tienen mucha capacidad y en el 99% de los casos están capacitadas para poder llegar acuerdos ellos mismos, sin que un abogado o un juez les diga lo que les conviene o interesa". Por eso: hablando se entiende la gente.
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