La estación del Palacio de Congresos ha superado las emisiones de ozono tres veces en junio Ecologistas en Acción alerta de que Granada es una de las ciudades más contaminadas
L. MINGORANCE GRANADA
No falla. Con la llegada del verano y el aumento de la radiación ultravioleta se disparan los niveles de ozono en la capital. Uno de los contaminantes más problemáticos que se regulan en el marco de la Comunidad Europea junto al monóxido de carbono CO, el dióxido de azufre SO2, los óxidos de nitrógeno (NO, NO2 y NOx) y el material particulado, más conocido como PM10. Según los datos que baraja la red de vigilancia y control del aire en Andalucía, desde el inicio del mes de junio, se han superado los niveles de ozono en la estación ubicada en el Palacio de Congresos hasta en tres ocasiones.
Este contaminante, que se forma en el aire a partir de la reacción química de los compuestos volátiles CO y NOx, con oxígeno y presencia de luz solar así como contribuye es uno de los que provoca mayor preocupación pues es altamente oxidante y puede afectar a la salud así como generar un calentamiento en la superficie de la tierra. No obstante, hay que destacar que el valor objetivo para la protección de la salud humana (120 µg/m3 como máxima media octohoraria del día) recoge que los niveles no deberán superarse más de 25 días por cada año civil por lo que la evaluación final y de sus perjuicios en la capital no se realizará hasta recoger todos los datos.
A la espera de ese momento, la organización Ecologistas en Acción puso ayer de relieve que Granada sigue siendo una de las ciudades con un aire más contaminado de España. El exceso de tráfico motorizado y las instalaciones para la calefacción son los máximos responsables de estas cifras que para la organización son "alarmantes" teniendo en cuenta los perjuicios que la contaminación provoca en la salud: causa más de 25.000 muertes prematuras en el Estado español cada año, quince veces más que los accidentes de tráfico. En este sentido, Ecologistas en Acción también alerta sobre el incremento de las alergias y la aparición de alteraciones del sistema inmunológico como consecuencia de la contaminación.
En concreto, según Ecologistas en Acción, los contaminantes más preocupantes en Granada y el Área Metropolitana han sido las partículas en suspensión (PM10 y PM2,5), el dióxido de nitrógeno (NO2) y el ozono troposférico (O3). "El Área Metropolitana ha superado en 2015 los valores límite establecidos por el ozono por estos contaminantes establecidos por la normativa vigente para alguno de estos contaminantes", detalla la organización que alerta sobre que, con el aumento del calor estival, la mayor parte de la población está expuesta a concentraciones de ozono peligrosas para la salud. En cuanto a las partículas PM10 y PM2,5, los ecologistas informan de que las tres estaciones de la capital sobrepasaron los límites recomendados por la OMS para. Asimismo, Granada está entre los territorios donde se alcanzaron los peores registros de partículas PM10 y PM2,5.
Respecto al dióxido de nitrógeno, la organización remarcó que volvió a tener sus peores registros en el Área Metropolitana como consecuencia del tráfico rodado que soporta. Asimismo, en la estación de Norte "se empeoró". La superación del valor límite anual establecido en la normativa ha alcanzado una media de 48 µg/m3 frente a las 42 de 2014, para cuyo cumplimiento la capital tenía concedida una prórroga que expiró en 2015". "Lo mismo puede decirse respecto a la recomendación de la OMS para el cancerígeno benzo(a)pireno, en la estación de Norte que, con 0,29 µg/m3, supera los 0,12 de referencia aunque dichas concentraciones se mantienen muy por debajo del objetivo legal", sostienen los ecologistas.
En febrero de 2016 la capital presentó el esperado Diagnóstico de la calidad del Aire. Este documento fue el primer paso establecer una serie de medidas consensuadas en una mesa técnica para rebajar los niveles de contaminación. El informe, encargado por el Área de Medio Ambiente, desgranó los resultados en materia de gases contaminantes y material particulado durante entre 2010-2015.
En ese periodo, el límite anual de PM10 de 40 µg/m3 no se ha superado en ninguna de las estaciones. Sin embargo, el número de días con concentración superior a 50 mg/m3 permitido se superó en la estación de Norte en 2010 y 2011. "El límite anual de NO2 se superó repetidamente en Norte aunque, el nivel de alerta para la población nunca ha estado activo". Por último, el diagnóstico desveló que todas las estaciones "superan el límite medio octohorario de O3 de 120 µg/m3 en alguna ocasión" siendo la de Armilla la que registra más superaciones que se producen con más frecuencia en verano por una mayor radiación ultravioleta. Como conclusiones, el diagnóstico plantea la necesidad de controlar las calefacciones y reducir las emisiones como consecuencia del tráfico rodado, principales emisores. El nuevo concejal de Medio Ambiente, Miguel Ángel Madrid, tiene ahora la papeleta de iniciar estas actuaciones.
Este contaminante, que se forma en el aire a partir de la reacción química de los compuestos volátiles CO y NOx, con oxígeno y presencia de luz solar así como contribuye es uno de los que provoca mayor preocupación pues es altamente oxidante y puede afectar a la salud así como generar un calentamiento en la superficie de la tierra. No obstante, hay que destacar que el valor objetivo para la protección de la salud humana (120 µg/m3 como máxima media octohoraria del día) recoge que los niveles no deberán superarse más de 25 días por cada año civil por lo que la evaluación final y de sus perjuicios en la capital no se realizará hasta recoger todos los datos.
A la espera de ese momento, la organización Ecologistas en Acción puso ayer de relieve que Granada sigue siendo una de las ciudades con un aire más contaminado de España. El exceso de tráfico motorizado y las instalaciones para la calefacción son los máximos responsables de estas cifras que para la organización son "alarmantes" teniendo en cuenta los perjuicios que la contaminación provoca en la salud: causa más de 25.000 muertes prematuras en el Estado español cada año, quince veces más que los accidentes de tráfico. En este sentido, Ecologistas en Acción también alerta sobre el incremento de las alergias y la aparición de alteraciones del sistema inmunológico como consecuencia de la contaminación.
En concreto, según Ecologistas en Acción, los contaminantes más preocupantes en Granada y el Área Metropolitana han sido las partículas en suspensión (PM10 y PM2,5), el dióxido de nitrógeno (NO2) y el ozono troposférico (O3). "El Área Metropolitana ha superado en 2015 los valores límite establecidos por el ozono por estos contaminantes establecidos por la normativa vigente para alguno de estos contaminantes", detalla la organización que alerta sobre que, con el aumento del calor estival, la mayor parte de la población está expuesta a concentraciones de ozono peligrosas para la salud. En cuanto a las partículas PM10 y PM2,5, los ecologistas informan de que las tres estaciones de la capital sobrepasaron los límites recomendados por la OMS para. Asimismo, Granada está entre los territorios donde se alcanzaron los peores registros de partículas PM10 y PM2,5.
Respecto al dióxido de nitrógeno, la organización remarcó que volvió a tener sus peores registros en el Área Metropolitana como consecuencia del tráfico rodado que soporta. Asimismo, en la estación de Norte "se empeoró". La superación del valor límite anual establecido en la normativa ha alcanzado una media de 48 µg/m3 frente a las 42 de 2014, para cuyo cumplimiento la capital tenía concedida una prórroga que expiró en 2015". "Lo mismo puede decirse respecto a la recomendación de la OMS para el cancerígeno benzo(a)pireno, en la estación de Norte que, con 0,29 µg/m3, supera los 0,12 de referencia aunque dichas concentraciones se mantienen muy por debajo del objetivo legal", sostienen los ecologistas.
En febrero de 2016 la capital presentó el esperado Diagnóstico de la calidad del Aire. Este documento fue el primer paso establecer una serie de medidas consensuadas en una mesa técnica para rebajar los niveles de contaminación. El informe, encargado por el Área de Medio Ambiente, desgranó los resultados en materia de gases contaminantes y material particulado durante entre 2010-2015.
En ese periodo, el límite anual de PM10 de 40 µg/m3 no se ha superado en ninguna de las estaciones. Sin embargo, el número de días con concentración superior a 50 mg/m3 permitido se superó en la estación de Norte en 2010 y 2011. "El límite anual de NO2 se superó repetidamente en Norte aunque, el nivel de alerta para la población nunca ha estado activo". Por último, el diagnóstico desveló que todas las estaciones "superan el límite medio octohorario de O3 de 120 µg/m3 en alguna ocasión" siendo la de Armilla la que registra más superaciones que se producen con más frecuencia en verano por una mayor radiación ultravioleta. Como conclusiones, el diagnóstico plantea la necesidad de controlar las calefacciones y reducir las emisiones como consecuencia del tráfico rodado, principales emisores. El nuevo concejal de Medio Ambiente, Miguel Ángel Madrid, tiene ahora la papeleta de iniciar estas actuaciones.
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