La estación recibió entre 50 centímetros y un metro de nieve y cuenta ya con 63 pistas esquiables
E. P. GRANADA La estación de esquí granadina de Sierra Nevada amaneció ayer con el mejor aspecto de la temporada tras recibir durante la jornada anterior entre 50 centímetros y un metro de nieve en todas las zonas. Además, el viento, que sopló este sábado tan fuerte que obligó a cerrar la estación, hizo acumular grandes cantidades de nieve en ventisqueros y paravientos. Cetursa, la empresa que gestiona el espacio invernal, explica en un comunicado que la apertura de la estación de esquí ayer domingo fue "complicada" debido a los bloques de hielo que se formaron en las pilonas de los remontes y a la acumulación de nieve en las estaciones superiores e inferiores de casi todos los medios mecánicos. Era tan complicada la situación de bloqueo que el equipo de mantenimiento a tenido que desbloquear las poleas "pilona a pilona" para que los remontes entraran en funcionamiento a lo largo de la mañana. Finalmente dos telecabinas, tres telesillas y una alfombra dieron servicio a más de 20 kilómetros esquiables.
Para esta semana, la estación se prepara para abrir cerca de 60 kilómetros esquiables con una calidad de nieve excepcional en 63 pistas que en su mayoría se concentrarán en Loma de Dílar, Borreguiles, Río y Parador-Cauchiles. En el snowpark Sulayr (Loma de Dílar) se ha acumulado tal cantidad de nieve que el half pipe, con seis metros en su punto más profundo, está casi colmatado de nieve, lo que propiciará su entrada en servicio como instalación de Freestyle entre finales de enero y principios de febrero.
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