Un local de Logroño se ha convertido en noticia por añadir un suplemento de 30 céntimos en concepto "muy hecho".
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ara mí, muy hecho.
La frase se escucha día tras día en los restaurantes de media España. Cuando se trata de pedir carne, algunos la prefieren más cruda, otros al punto y están también los que la prefieren muy hecha.
Es lo que pidió un cliente del restaurante Entrepuentes, de Logroño, al que sus gustos gastronómicos le salieron caros. Tuvo que pagar 30 céntimos más para que su pollo tex-mex se sirviese “muy hecho”.
El cliente, de cuya historia se ha hecho eco el diario larioja.com y elcomercio.es, había hecho un pedido a domicilio y no se enteró del extra hasta que la comida (y la factura) llegó a su casa.
“Llamé por teléfono al restaurante para vacilarles diciendo que si cobran más barato por la carne cruda o cómo me llegaría un pedido en el que sólo solicitásemos un tiempo en el fuego de 10 céntimos”, contó a El Comercio, y aclara que nadie le cogió el teléfono.
¿Es legal este cobro?
El cliente fue al día siguiente al restaurante. Allí le aclararon lo ocurrido y le devolvieron los 30 céntimos, que dejó como bote. “Fue un fallo informático y ese día todo lo que se pedía como extra se cobraba a 30 céntimos, pero fue un fallo que ya está corregido”, explican desde el restaurante a El HuffPost.
Subsanado el error y aclarada estas historia concreta, la duda es: ¿se puede cobrar por el punto de la carne? ¿Es legal este cobro? Y la respuesta es ambigua, porque depende de lo que diga la carta.
“Sí [se puede]. Si lo pone en la carta, lo puede cobrar. Si no lo dice, no”, explicaba Enrique García, de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), a El HuffPost en un reportaje sobre cobros abusivos de restaurantes.
En este mismo artículo, Rubén Sánchez, de Facua, tachaba un cobro así de abusivo, “ya que el producto en sí no varía y no es ningún añadido al plato como sí podrían ser unas patatas fritas”.
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