IU y PSOE acusan a los ediles del PP de limitarse a criticar la herencia recibida. En Pozoblanco, un socialista sustituyó al alcalde popular tras una moción
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Hasta seis municipios andaluces tienen hoy un gobierno municipal distinto al que salió de las urnas el 22 de mayo y tomó posesión el 11 de junio, es decir, hace exactamente 100 días. En este periodo de tiempo, se han registrado en los consistorios andaluces dos mociones de censura, dos rupturas de pactos de gobierno y dos dimisiones de alcaldes.
La regidora más breve fue la de Chipiona (Cádiz), Isabel María Fernández (IU), que ascendió sorprendentemente al poder, pese a ser la tercera fuerza más votada, por los votos que en el pleno constituyente le dieron los siete ediles socialistas para impedir un gobierno del PP. Renunció dos días después y el popular Antonio Peña fue proclamado alcalde.
Apenas once días duró también en el cargo el socialista Bernabé Oliva en El Saucejo (Sevilla), que gobernaba con mayoría relativa porque dos de los tres ediles del PP se abstuvieron en la investidura. Sin embargo, el 22 de junio, el grupo popular se unió a IU para presentar una moción de censura contra Oliva, que fue sustituido por el candidato de IU, Antonio Barroso en un pleno celebrado el 4 de julio. No es la única moción de censura que ha prosperado en este tiempo. En Pozoblanco (Córdoba), el 18 de julio, los cinco ediles de Ciudadanos Demócratas Independientes y los cuatro del PSOE presentaron una contra el alcalde del PP, Baldomero García, que gobernaba con el PA. Tras votarse el 29 de julio, PSOE e independientes pactaron alternarse dos años cada uno en la Alcaldía.
En estos cien días también se han roto algunos pactos y curiosamente no los que pudieran parecer inicialmente más anti-natura (los de IU y PP o PSOEy PP). En Albuñol (Granada), el PP rompió su acuerdo para gobernar con Convergencia Andaluza (CA) el 5 de agosto y el alcalde popular, Juan María Rivas, se mantiene en el cargo en minoría. En Cortes de la Frontera (Málaga), IU rompió su pacto de gobierno con el PA tras la expulsión por parte del alcalde andalucista, Antonio Granero, de su edil de Urbanismo, Manuel Carrasco. De momento el PA gobierna en minoría e IU ha descartado aliarse con el PSOE para presentar una moción de censura. Pero las aguas andan revueltas porque un integrante de la lista andalucista, que concurrió como suplente, ha denunciado al regidor ante los tribunales por presunta prevaricación, estafa y engaño.
El último cambio de alcalde se produjo el pasado viernes cuando el alcalde socialista de Villarrodrigo (Jaén), Angel Vera, dimitió para centrarse en su responsabilidad al frente del área de Agricultura y Medio Ambiente de la Diputación jiennense. Sin embargo, en este caso el Ayuntamiento no cambiará de color político ya que Vera ha propuesto como sustituto a su compañero de partido José Angel Olivas.
Al margen de estos cambios, la lectura de los partidos de estos cien días, tras unas elecciones en las que por primera vez ganó el PP en Andalucía, es muy distinta. El PSOE-A defiende que sus alcaldes se han centrado en crear empleo y poner en marcha proyectos e inversiones mientras los regidores populares "llevan cien días de propaganda y cero de gestión". "Están centrados en una estrategia de oposición a la Junta para ayudar al presidente del PP-A, Javier Arenas, en su batalla electoral", denunció a Europa Press el secretario de Política Municipal de los socialistas andaluces, Juan Manuel Fernández, que criticó que el PP ha dedicado mucho tiempo a "mirar atrás, a hacer ajustes de cuentas y a revisar el pasado buscando con qué atacar al PSOE".
Precisamente, desde el PP andaluz, el vicesecretario de Política Municipal, Miguel Angel Arauz, denunció que sus regidores se han topado con "trampas" y "sorpresas", especialmente en los ayuntamientos gobernados durante 30 años por el PSOE. Arauz defendió que han tenido que hacer frente a "una situación económica crítica, caos burocrático, desorden administrativo muy grande y sobredimensionamiento de cargos de confianza" que les ha obligado a aplicar "un plan urgente de austeridad". Sin embargo, para el coordinador regional de IU, Diego Valderas, el triunfo del PP el 22-M no ha traído "nada nuevo bajo el sol". Valderas coincidió con el PSOE en que el PP está abusando de la crítica a la "herencia" recibida para justificar ajustes de plantilla y "recortes". Además, PP y PSOE están enzarzados por la renovación de la Federación Andaluza de Municipios y por la expulsión de los alcaldes del Parlamento andaluz.
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