La DGT prevé más de 135.000 desplazamientos hasta el próximo domingo El acceso a la Costa se realiza, por primera vez, sin retenciones gracias a los nuevos tramos de la A-7
R. FERNÁNDEZ · L.M.
Sucede cada verano. Con la llegada del mes de agosto los granadinos cierran la maleta y se marchan buscando el descanso. El calor aleja a los turistas y la ciudad presenta en algunos momentos un ambiente casi fantasmagórico. Este año sin embargo el mes amaneció fresco y la temperatura dio una tregua a los granadinos y turistas que paseaban en algunos momentos por las calles del centro. Mientras tanto toda la atención se centraba en las distintas conexiones con el litoral donde históricamente se han producido enormes atascos.
En este sentido, la página de la Dirección General de Tráfico (DGT) detectó un importante cambio nunca antes visto: las carreteras granadinas no presentaba retenciones. Eso, a pesar de que se han previsto 135.000 desplazamientos hasta el domingo en la llamada operación salida, pero también llegada aludiendo a todos aquellos que vuelven de pasar unos días de descanso.
Así, mientras la ciudad fue perdiendo paulatinamente habitantes, la Costa Tropical comenzó el 1 de agosto con una animación superior a la habitual. En los chiringuitos de Almuñécar, por ejemplo, era imposible encontrar una mesa en hora punta, a pesar de que el viento soplaba, lo que hacía que el día de playa fuese bastante desapacible. Sin embargo, esto no desanimó a los turistas que querían disfrutar de su primera jornada junto al mar, que lucharon estoicamente con sus sombrillas contra las circunstancias meteorológicas, que en algunos momentos del día se hicieron sin embargo bastante llevaderas.
En el casco urbano de la ciudad sexitana también se notaba más bullicio que en días pasados, pues agosto es el rey del verano en la Costa. Se podían ver a turistas de todas las nacionalidades, hablando en francés, alemán o inglés, sin embargo, la mayoría pedía sus tapas y raciones en español, sin que los camareros de las terrazas de los bares y restaurantes de la localidad pudiesen dar abasto a mediodía.
Pocos locales han quedado vacíos durante esta época del año. Excepto alguna extraña excepción, de negocios no directamente relacionados con el turismo (como un estudio de fotografía, por ejemplo), los bajos han abierto con carácter estacional, dispuestos a hacer su agosto.
Algunos de los que regentan estos negocios, como puestos de helados en la playa en Motril o Torrenueva, reconocen que desde ayer, jornada en que se inauguró de forma oficial la operación salida del mes de agosto, han notado un aumento de sus ventas y que con lo que saquen esperan mantenerse el resto del año.
Los municipios costeros también, conscientes de la mayor afluencia de público, han preparado sus platos fuertes culturales a lo largo de este mes, y algunos de ellos coinciden con sus ferias patronales. Los más populosos: Motril y Almuñécar, celebran sus días grandes con motivo de la 'Virgen de agosto' y, después, se suele decir en estas localidades que "ya se habrá acabado el verano".
En cuanto a la ocupación que se espera este año en agosto, según el presidente de la Asociación de Hoteleros de la Costa Tropical, Rafael Lamelas, con las reservas que existen ahora mismo llegarían al 70%, sin embargo esperan que se eleva hasta el 90% con las de última hora, como viene ocurriendo en sucesivos veranos.
De todas formas, el 1 de agosto ha coincidido en viernes, lo que también ha contribuido a un mayor movimiento de personas. Y es que aquellos turistas que solían disfrutar de todo el mes de agosto o, al menos de una quincena, han dado paso a los de fin de semana, que diseccionan sus vacaciones de jueves a domingo, o de viernes a lunes durante varias fechas a lo largo del verano.
Respecto al tráfico, los mayores problemas se dieron, como viene siendo habitual durante todo el verano, en la confluencia de la N-340 con la A-44, entre Motril y Salobreña. En cuanto a la vieja carretera nacional, también soportaba como podía bastante tráfico en la recta desde el embudo de Salobreña hasta Torrenueva, mientras que en las localidades donde se han abierto recientemente tramos de la A-7 (Almuñécar o Carchuna-Calahonda), los conductores se repartían, lo que hacía que no hubiera problemas de retenciones o atascos.
Sin embargo, habrá que esperar a mañana, domingo, pues casi todas las tardes suele haber colas a la hora de la salida de la playa hacia Granada o Jaén.
Si las carreteras han dado por primera vez una tregua a los granadinos gracias a la inauguración de nuevos tramos como Taramay-Lobres y Lobres-Guadalfeo o Puntalón-Carchuna, la meteorología también ha hecho su parte. Granada despertó ayer con un clima más fresco que se prolongará durante todo el fin de semana. De hecho, según Aemet los termómetros alcanzarán hoy una máxima de 34 grados en Granada; 27 en Motril; y 28 en Loja y Baza con mínimas de entre 14 y 20.
En este sentido, la página de la Dirección General de Tráfico (DGT) detectó un importante cambio nunca antes visto: las carreteras granadinas no presentaba retenciones. Eso, a pesar de que se han previsto 135.000 desplazamientos hasta el domingo en la llamada operación salida, pero también llegada aludiendo a todos aquellos que vuelven de pasar unos días de descanso.
Así, mientras la ciudad fue perdiendo paulatinamente habitantes, la Costa Tropical comenzó el 1 de agosto con una animación superior a la habitual. En los chiringuitos de Almuñécar, por ejemplo, era imposible encontrar una mesa en hora punta, a pesar de que el viento soplaba, lo que hacía que el día de playa fuese bastante desapacible. Sin embargo, esto no desanimó a los turistas que querían disfrutar de su primera jornada junto al mar, que lucharon estoicamente con sus sombrillas contra las circunstancias meteorológicas, que en algunos momentos del día se hicieron sin embargo bastante llevaderas.
En el casco urbano de la ciudad sexitana también se notaba más bullicio que en días pasados, pues agosto es el rey del verano en la Costa. Se podían ver a turistas de todas las nacionalidades, hablando en francés, alemán o inglés, sin embargo, la mayoría pedía sus tapas y raciones en español, sin que los camareros de las terrazas de los bares y restaurantes de la localidad pudiesen dar abasto a mediodía.
Pocos locales han quedado vacíos durante esta época del año. Excepto alguna extraña excepción, de negocios no directamente relacionados con el turismo (como un estudio de fotografía, por ejemplo), los bajos han abierto con carácter estacional, dispuestos a hacer su agosto.
Algunos de los que regentan estos negocios, como puestos de helados en la playa en Motril o Torrenueva, reconocen que desde ayer, jornada en que se inauguró de forma oficial la operación salida del mes de agosto, han notado un aumento de sus ventas y que con lo que saquen esperan mantenerse el resto del año.
Los municipios costeros también, conscientes de la mayor afluencia de público, han preparado sus platos fuertes culturales a lo largo de este mes, y algunos de ellos coinciden con sus ferias patronales. Los más populosos: Motril y Almuñécar, celebran sus días grandes con motivo de la 'Virgen de agosto' y, después, se suele decir en estas localidades que "ya se habrá acabado el verano".
En cuanto a la ocupación que se espera este año en agosto, según el presidente de la Asociación de Hoteleros de la Costa Tropical, Rafael Lamelas, con las reservas que existen ahora mismo llegarían al 70%, sin embargo esperan que se eleva hasta el 90% con las de última hora, como viene ocurriendo en sucesivos veranos.
De todas formas, el 1 de agosto ha coincidido en viernes, lo que también ha contribuido a un mayor movimiento de personas. Y es que aquellos turistas que solían disfrutar de todo el mes de agosto o, al menos de una quincena, han dado paso a los de fin de semana, que diseccionan sus vacaciones de jueves a domingo, o de viernes a lunes durante varias fechas a lo largo del verano.
Respecto al tráfico, los mayores problemas se dieron, como viene siendo habitual durante todo el verano, en la confluencia de la N-340 con la A-44, entre Motril y Salobreña. En cuanto a la vieja carretera nacional, también soportaba como podía bastante tráfico en la recta desde el embudo de Salobreña hasta Torrenueva, mientras que en las localidades donde se han abierto recientemente tramos de la A-7 (Almuñécar o Carchuna-Calahonda), los conductores se repartían, lo que hacía que no hubiera problemas de retenciones o atascos.
Sin embargo, habrá que esperar a mañana, domingo, pues casi todas las tardes suele haber colas a la hora de la salida de la playa hacia Granada o Jaén.
Si las carreteras han dado por primera vez una tregua a los granadinos gracias a la inauguración de nuevos tramos como Taramay-Lobres y Lobres-Guadalfeo o Puntalón-Carchuna, la meteorología también ha hecho su parte. Granada despertó ayer con un clima más fresco que se prolongará durante todo el fin de semana. De hecho, según Aemet los termómetros alcanzarán hoy una máxima de 34 grados en Granada; 27 en Motril; y 28 en Loja y Baza con mínimas de entre 14 y 20.
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