La Guardia Civil cuenta con una oficina especializada que ha recuperado ya 53 vehículos
P. FEIXAS MOTRIL , COSTa
El nerviosismo que muestra un conductor al pasar el control fronterizo, un raspado en el bastidor, fallos en la documentación o un simple dato que lleve a pensar que se está cometiendo una actividad ilícita, son suficientes para que los agentes del grupo especializado de la Oficina de Análisis e Investigación Fiscal (Odaifi) de la Guardia Civil en el Puerto de Motril se pongan manos a la obra y en un corto espacio de tiempo obtengan magníficos resultados.
De hecho, este grupo de especialistas de la Guardia Civil ha conseguido en un corto espacio de tiempo detener a 58 personas cuando intentaban pasar hacia el continente africano con un total de 53 vehículos, la mayoría de alta gama, sustraídos en diferentes ciudades europeas, principalmente de España, Francia, Alemania, Holanda, Italia y Bélgica.
Los vehículos preferidos para estas redes mafiosas están muy lejos del poder adquisitivo de la mayoría de los españoles: BMW, Audi o Mercedes, coches que tienen un valor de más de 40.000 euros pero que en el norte de África se venden como auténticas gangas a mitad de precio. Y si no los vehículos son vendidos por piezas.
Organizaciones que están perfectamente estructuradas y en las que cada uno tiene una función, contando con medios muy sofisticados y de las que, normalmente, se atrapa al llegar a cualquier puerto tan solo al último eslabón. Por ello, este grupo operativo recibe una formación continua y de alta especialización que les hace detectar de forma rápida e inmediata cualquier anomalía. Dicen que "funcionan con un cúmulo de indicios o de pequeños detalles" que no son apreciables a simple vista, pero que ellos "localizan inmediatamente, en segundos". Se ha dado el caso de documentaciones que ponían que el vehículo era de gasoil siendo de gasolina, fechas de expedición posteriores a la inspección, hundimientos en las placas de la matricula, raspaduras para cambiar la numeración del bastidor (el autentico código de barras del coche) o cambio de textura en las documentaciones, pequeños detalles que hacen que se detecte un vehículo que se intenta sacar de forma fraudulenta. Pesquisas posteriores permiten a la Guardia Civil averiguar que la mayoría de estos vehículos habían sido robados en distintos países de la Unión Europea, por lo que se mantiene un contacto permanente y fijo con otros puntos.
En la última actuación , realizada esta semana, se detuvo a tres personas y se recuperó un BMW robado en junio en Alemania y que tenía documentación doblada de un coche holandés, con un valor de mercado de cerca de 60.000 euros. La pretensión era llevarlo al norte de Marruecos vía Motril para venderlo, una acción que certifica que este tipo de delitos está proliferando. La principal razón del aumento es el importante margen de beneficios que obtienen las bandas organizadas que se dedican a ello, además de la baja carga penal para sus autores.
Desde hace algo más de dos años, con la entrada en servicio de las líneas que operan desde Motril con Melilla o Marruecos, la Guardia Civil está realizando de forma diaria controles de los automóviles que están a punto de embarcar para detectar cualquier irregularidad que destape el delito. Los agentes también centran su atención en otro tipo de vehículos , como son las motocicletas o las furgonetas, ya que en varias ocasiones han podido comprobar que en su interior transportaban piezas de vehículos que posteriormente son montadas de nuevo en África, como fue un caso ocurrido el año pasado, cuando encontraron un frigorífico lleno de los elementos de una moto para que fuera reconstruida después en su lugar de destino.
Los agentes dicen que funcionan con el principio básico del control de la credibilidad y que precisan de ver muchos bastidores y documentaciones para poder dar una respuesta rápida en cualquiera de las inspecciones.
En los últimos tiempos se han detectado diferentes variantes en el tráfico ilegal de vehículos que consistirían en intentar pasar coches que han sido alquilados en distintos puntos de Europa, por lo que los autores quitan todos los identificativos de la empresa arrendadora para no ser descubiertos, una acción que se encuentra prohibida en base a los contratos firmados que impide el que puedan ser embarcados con la correspondiente salida de Europa. Si lo consiguieran tras llevarlos a Marruecos, a la vuelta presentarían una denuncia por robo en el lugar donde suscribieron el contrato. En estos casos, el operativo, tras informar a la empresa propietaria, inmoviliza el vehículo hasta que vengan a recogerlo
También se da el hecho de pasar legalmente los coches para su posterior venta y, de vuelta a España, presentar una denuncia por robo para intentar cobrar la indemnización. En este caso, se llegaría a cometer dos delitos: por denuncia falsa y por intento de estafa a las aseguradoras.
La Odaifi es la que garantiza la seguridad de nuestras costas y fronteras y contribuye a prevenir el contrabando, el fraude del IVA en mercancías que entran o salen del puerto y otros tráficos ilícitos.
De hecho, este grupo de especialistas de la Guardia Civil ha conseguido en un corto espacio de tiempo detener a 58 personas cuando intentaban pasar hacia el continente africano con un total de 53 vehículos, la mayoría de alta gama, sustraídos en diferentes ciudades europeas, principalmente de España, Francia, Alemania, Holanda, Italia y Bélgica.
Los vehículos preferidos para estas redes mafiosas están muy lejos del poder adquisitivo de la mayoría de los españoles: BMW, Audi o Mercedes, coches que tienen un valor de más de 40.000 euros pero que en el norte de África se venden como auténticas gangas a mitad de precio. Y si no los vehículos son vendidos por piezas.
Organizaciones que están perfectamente estructuradas y en las que cada uno tiene una función, contando con medios muy sofisticados y de las que, normalmente, se atrapa al llegar a cualquier puerto tan solo al último eslabón. Por ello, este grupo operativo recibe una formación continua y de alta especialización que les hace detectar de forma rápida e inmediata cualquier anomalía. Dicen que "funcionan con un cúmulo de indicios o de pequeños detalles" que no son apreciables a simple vista, pero que ellos "localizan inmediatamente, en segundos". Se ha dado el caso de documentaciones que ponían que el vehículo era de gasoil siendo de gasolina, fechas de expedición posteriores a la inspección, hundimientos en las placas de la matricula, raspaduras para cambiar la numeración del bastidor (el autentico código de barras del coche) o cambio de textura en las documentaciones, pequeños detalles que hacen que se detecte un vehículo que se intenta sacar de forma fraudulenta. Pesquisas posteriores permiten a la Guardia Civil averiguar que la mayoría de estos vehículos habían sido robados en distintos países de la Unión Europea, por lo que se mantiene un contacto permanente y fijo con otros puntos.
En la última actuación , realizada esta semana, se detuvo a tres personas y se recuperó un BMW robado en junio en Alemania y que tenía documentación doblada de un coche holandés, con un valor de mercado de cerca de 60.000 euros. La pretensión era llevarlo al norte de Marruecos vía Motril para venderlo, una acción que certifica que este tipo de delitos está proliferando. La principal razón del aumento es el importante margen de beneficios que obtienen las bandas organizadas que se dedican a ello, además de la baja carga penal para sus autores.
Desde hace algo más de dos años, con la entrada en servicio de las líneas que operan desde Motril con Melilla o Marruecos, la Guardia Civil está realizando de forma diaria controles de los automóviles que están a punto de embarcar para detectar cualquier irregularidad que destape el delito. Los agentes también centran su atención en otro tipo de vehículos , como son las motocicletas o las furgonetas, ya que en varias ocasiones han podido comprobar que en su interior transportaban piezas de vehículos que posteriormente son montadas de nuevo en África, como fue un caso ocurrido el año pasado, cuando encontraron un frigorífico lleno de los elementos de una moto para que fuera reconstruida después en su lugar de destino.
Los agentes dicen que funcionan con el principio básico del control de la credibilidad y que precisan de ver muchos bastidores y documentaciones para poder dar una respuesta rápida en cualquiera de las inspecciones.
En los últimos tiempos se han detectado diferentes variantes en el tráfico ilegal de vehículos que consistirían en intentar pasar coches que han sido alquilados en distintos puntos de Europa, por lo que los autores quitan todos los identificativos de la empresa arrendadora para no ser descubiertos, una acción que se encuentra prohibida en base a los contratos firmados que impide el que puedan ser embarcados con la correspondiente salida de Europa. Si lo consiguieran tras llevarlos a Marruecos, a la vuelta presentarían una denuncia por robo en el lugar donde suscribieron el contrato. En estos casos, el operativo, tras informar a la empresa propietaria, inmoviliza el vehículo hasta que vengan a recogerlo
También se da el hecho de pasar legalmente los coches para su posterior venta y, de vuelta a España, presentar una denuncia por robo para intentar cobrar la indemnización. En este caso, se llegaría a cometer dos delitos: por denuncia falsa y por intento de estafa a las aseguradoras.
La Odaifi es la que garantiza la seguridad de nuestras costas y fronteras y contribuye a prevenir el contrabando, el fraude del IVA en mercancías que entran o salen del puerto y otros tráficos ilícitos.
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ResponderEliminarNo, no soy de Motril, soy de Albuñol y me gusta publicar lo que se publica de la comarca. Gracias de todas formas.
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