Cáñar y Murtas son los dos pueblos con mayor caída demográfica en el último año Sólo cinco localidades de la provincia han crecido más de un 5%
GUADALUPE S. MALDONADO GRANADA 
Una economía en crisis difícilmente va asociada a una demografía expansiva. Lo que significa que, mientras los números no acompañen, los municipios de Granada seguirán perdiendo población. Si a un movimiento natural (nacimientos y defunciones) que no favorece el crecimiento se le une la fuga de miles de ciudadanos en busca de mejores oportunidades laborales, el resultado es precisamente el que arrojan los últimos datos del INE: el 61,9% de los pueblos de Granada han sido 'víctimas' de la despoblación en el último año.
Según la información del Instituto Nacional de Estadística, referente a 1 de enero de 2014, la población apenas ha variado en el conjunto provincial -que ha pasado en este periodo de 919.319 en 2013 a 919.455 en 2014, un 0,01% más-, pero sí que lo ha hecho en la gran mayoría de los municipios granadinos. En concreto, 104 de las 170 localidades de la provincia (aunque la estadística oficial sólo recoja 168 por ser de principios de 2014) comenzaron el año con menos habitantes que en 2013.
Los casos más llamativos son los de Cáñar y Murtas, los dos municipios que mayor pérdida de población han registrado en el último año. En el caso de Cáñar, de los 462 vecinos que residían en el municipio a principios de 2013 han pasado a 408, un 11,7% menos; mientras que Murtas, que ha visto reducida su población un 10,6%, ha pasado de 605 a 541 habitantes. Aunque no se trata de caídas absolutas impresionantes (54 y 64 vecinos, respectivamente), sí que son las más significativas, ya que en una provincia con municipios de tan diverso tamaño debe ser por fuerza la evolución relativa la que se tenga en cuenta.
El ranking de los pueblos granadinos más afectados por la despoblación lo completan Rubite (-9,2%), Pampaneira (-8,2%), La Tahá (-7,8%), Benalúa de las Villas (-7,1%), Morelábor (-6,9%), Gobernador (-6,7%), Gorafe (-6,7%) y Bubión (-6,5%). Además, Órgiva, Cástaras, Alamedilla, Ferreira y Dúdar también se han unido al grupo de 15 municipios en los que la población se ha reducido más de un 5%.
¿Qué tienen en común todas estas localidades? Pues que con la excepción de Benalúa de las Villas y Órgiva, ninguna supera el millar de habitantes. Esto no significa que entre los municipios de más de 15.000 habitantes no haya signos negativos, al contrario. Quizá el caso más significativo sea el de la capital granadina, que entre 2013 y 2014 ha perdido un 0,12% de población, pasando de 237.818 a 237.540 habitantes y dejándose por el camino a 278. También han experimentado una evolución negativa municipios como Baza (-2,9%), Motril (-0,5%), Santa Fe (-1,01%) o La Zubia (-0,11%), mientras que Albolote, Almuñécar, Armilla, Atarfe, Las Gabias, Guadix, Loja (que ha sumado un nuevo vecino) y Maracena, todos ellos del 'club' de los 15.000 habitantes, sí que han aumentado su población.
De hecho, Almuñécar ocupa un lugar destacado en el ranking de los pueblos granadinos que han conseguido sortear la despoblación y sumar nuevos miembros al padrón municipal. Después de crecer un 6,3% en el último año, el municipio costero contaba a principios de 2014 con 27.195 vecinos, 1.609 más que en la misma fecha del año anterior. Aunque es el único gran municipio que ha registrado una evolución tan llamativa, no es la localidad granadina que mejores registros ha contabilizado en este último año.
Ese puesto privilegiado le corresponde a Carataunas, el pueblo que más ha crecido al sumar 47 nuevos vecinos, que equivalen a un 29,01% en este municipio de 209 habitantes. También son muy significativos los crecimientos registrados por Busquístar (+11,7%), Soportújar (+11,5%) y Polopos (+9,55%), que junto a Almuñécar forman los cinco municipios que han conseguido crecer demográficamente más de un 5%.
En este último año, Granada no ha sido la única capital de provincia que ha visto reducida su población. De hecho, según el Instituto Nacional de Estadística, sólo siete capitales de provincia (Almería, Ciudad Real, Huesca, Murcia, Palma de Mallorca, Pontevedra y Vitoria) han bordeado la despoblación, registrando incrementos que van desde el 0,34% de Almería al 0,01% de Pontevedra.
En el resto de los casos, la evolución de la población de las capitales ha sido negativa. Especialmente significativos han sido los descensos de población de Castellón (-3,5%), Zaragoza (-2,3%), Segovia (-1,9%), Madrid (-1,3%), Cádiz (-1,02%) y Tarragona (-1,01%).
En Andalucía, con la excepción de Almería, todas las capitales han sido víctimas del fenómeno de despoblación. Cádiz ha perdido un 1,02% de habitantes; Huelva, un 0,6% de habitantes; Sevilla, un 0,5%; Málaga, un 0,3%; Jaén, un 0,29%; Córdoba, un 0,2%; y Granada, un 0,12%.
Según la información del Instituto Nacional de Estadística, referente a 1 de enero de 2014, la población apenas ha variado en el conjunto provincial -que ha pasado en este periodo de 919.319 en 2013 a 919.455 en 2014, un 0,01% más-, pero sí que lo ha hecho en la gran mayoría de los municipios granadinos. En concreto, 104 de las 170 localidades de la provincia (aunque la estadística oficial sólo recoja 168 por ser de principios de 2014) comenzaron el año con menos habitantes que en 2013.
Los casos más llamativos son los de Cáñar y Murtas, los dos municipios que mayor pérdida de población han registrado en el último año. En el caso de Cáñar, de los 462 vecinos que residían en el municipio a principios de 2013 han pasado a 408, un 11,7% menos; mientras que Murtas, que ha visto reducida su población un 10,6%, ha pasado de 605 a 541 habitantes. Aunque no se trata de caídas absolutas impresionantes (54 y 64 vecinos, respectivamente), sí que son las más significativas, ya que en una provincia con municipios de tan diverso tamaño debe ser por fuerza la evolución relativa la que se tenga en cuenta.
El ranking de los pueblos granadinos más afectados por la despoblación lo completan Rubite (-9,2%), Pampaneira (-8,2%), La Tahá (-7,8%), Benalúa de las Villas (-7,1%), Morelábor (-6,9%), Gobernador (-6,7%), Gorafe (-6,7%) y Bubión (-6,5%). Además, Órgiva, Cástaras, Alamedilla, Ferreira y Dúdar también se han unido al grupo de 15 municipios en los que la población se ha reducido más de un 5%.
¿Qué tienen en común todas estas localidades? Pues que con la excepción de Benalúa de las Villas y Órgiva, ninguna supera el millar de habitantes. Esto no significa que entre los municipios de más de 15.000 habitantes no haya signos negativos, al contrario. Quizá el caso más significativo sea el de la capital granadina, que entre 2013 y 2014 ha perdido un 0,12% de población, pasando de 237.818 a 237.540 habitantes y dejándose por el camino a 278. También han experimentado una evolución negativa municipios como Baza (-2,9%), Motril (-0,5%), Santa Fe (-1,01%) o La Zubia (-0,11%), mientras que Albolote, Almuñécar, Armilla, Atarfe, Las Gabias, Guadix, Loja (que ha sumado un nuevo vecino) y Maracena, todos ellos del 'club' de los 15.000 habitantes, sí que han aumentado su población.
De hecho, Almuñécar ocupa un lugar destacado en el ranking de los pueblos granadinos que han conseguido sortear la despoblación y sumar nuevos miembros al padrón municipal. Después de crecer un 6,3% en el último año, el municipio costero contaba a principios de 2014 con 27.195 vecinos, 1.609 más que en la misma fecha del año anterior. Aunque es el único gran municipio que ha registrado una evolución tan llamativa, no es la localidad granadina que mejores registros ha contabilizado en este último año.
Ese puesto privilegiado le corresponde a Carataunas, el pueblo que más ha crecido al sumar 47 nuevos vecinos, que equivalen a un 29,01% en este municipio de 209 habitantes. También son muy significativos los crecimientos registrados por Busquístar (+11,7%), Soportújar (+11,5%) y Polopos (+9,55%), que junto a Almuñécar forman los cinco municipios que han conseguido crecer demográficamente más de un 5%.
En este último año, Granada no ha sido la única capital de provincia que ha visto reducida su población. De hecho, según el Instituto Nacional de Estadística, sólo siete capitales de provincia (Almería, Ciudad Real, Huesca, Murcia, Palma de Mallorca, Pontevedra y Vitoria) han bordeado la despoblación, registrando incrementos que van desde el 0,34% de Almería al 0,01% de Pontevedra.
En el resto de los casos, la evolución de la población de las capitales ha sido negativa. Especialmente significativos han sido los descensos de población de Castellón (-3,5%), Zaragoza (-2,3%), Segovia (-1,9%), Madrid (-1,3%), Cádiz (-1,02%) y Tarragona (-1,01%).
En Andalucía, con la excepción de Almería, todas las capitales han sido víctimas del fenómeno de despoblación. Cádiz ha perdido un 1,02% de habitantes; Huelva, un 0,6% de habitantes; Sevilla, un 0,5%; Málaga, un 0,3%; Jaén, un 0,29%; Córdoba, un 0,2%; y Granada, un 0,12%.
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