Un prototipo de modelo C4 Grand Picasso recorre sin conductor la distancia que separa la factoría del grupo PSA Peugeot Citroën en Vigo y el Centro de Madrid.
EP, MADRID
El consorcio automovilístico francés PSA Peugeot Citroën se ha convertido en el primer fabricante en realizar un trayecto por carreteras abiertas en España en modo de autónomo, después de que el Gobierno aprobara la semana pasada la normativa que permitía este tipo de test en territorio español.
Un prototipo de modelo C4 Grand Picasso, que se fabrica en España, recorrió este lunes en modo autónomo la distancia que separa la factoría del grupo PSA Peugeot Citroën en Vigo y el Centro de Madrid, donde le esperaba la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que resaltó el apoyo del Ejecutivo a este tipo de tecnología.
Sáenz de Santamaría destacó que el desarrollo de este tipo de tecnologías servirá para mejorar la gestión del tráfico y la seguridad vial, así como para maximizar los beneficios del transporte, para reducir el impacto medioambiental y también para disminuir el impacto sobre el medio ambiente. La vicepresidenta del Gobierno apuntó que la nueva normativa que permite las pruebas de estos vehículos sirve para situar a España como un referente mundial en el apoyo a este tipo de movilidad autónoma y se suma a otros países en Europa, como Alemania o Finlandia.
Por otro lado, el director general de Peugeot, Citroën y DS en España y Portugal, Christophe Mandon, subrayó que España es, después de Francia, el segundo país en el que el grupo ha realizado pruebas de este tipo, con uno de los cuatro prototipos autónomos con los que cuenta, y añadió que es el primer fabricante que hace estos test en carreteras abiertas en España. Igualmente, recordó que el consorcio invirtió "más de 1.800 millones de euros" durante el año pasado en actividades de Investigación y Desarrollo y adelantó que la corporación cerrará el ejercicio actual con un volumen de ventas de todas sus marcas de 180.000 unidades en el mercado español, con una cuota de mercado del 15%.
Esta unidad del Citroën C4 Grand Picasso recorrió este lunes sin intervención del conductor los 600 kilómetros distancia que hay entre sus centros de Vigo y Madrid, después de que la Dirección General de Tráfico (DGT) aprobara el pasado 16 de noviembre la regulación por la que se establece un marco para la realización de pruebas con vehículos de conducción autónoma en vías abiertas a la circulación.
Este modelo dispone de tecnologías de última generación como un sistema de navegación por satélite GPS, así como de radares delanteros y traseros y de láseres con escáner, de cámaras digitales y también de una centralita de guiado electrónico que gestiona de forma autónoma la dirección, la aceleración y el frenado, a través del volante y los pedales. Con estas funciones de conducción automatizada, el conductor no usa ni los pedales ni el volante, aunque puede desactivar la función y retomar el control del coche cuando desee y la velocidad del modelo se adapta a los límites de velocidad vigentes, entre 0 y 120 kilómetros por hora y la dirección sigue las marcas de la carretera.
Al mismo tiempo, este prototipo monta el sensor de detección 'hand on' y una cámara de seguimiento del conductor. La interfaz hombre-máquina intuitiva, que ha sido desarrollada en colaboración con el Centro Tecnológico de Automoción de Galicia (CTAG).
Un prototipo de modelo C4 Grand Picasso, que se fabrica en España, recorrió este lunes en modo autónomo la distancia que separa la factoría del grupo PSA Peugeot Citroën en Vigo y el Centro de Madrid, donde le esperaba la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que resaltó el apoyo del Ejecutivo a este tipo de tecnología.
Sáenz de Santamaría destacó que el desarrollo de este tipo de tecnologías servirá para mejorar la gestión del tráfico y la seguridad vial, así como para maximizar los beneficios del transporte, para reducir el impacto medioambiental y también para disminuir el impacto sobre el medio ambiente. La vicepresidenta del Gobierno apuntó que la nueva normativa que permite las pruebas de estos vehículos sirve para situar a España como un referente mundial en el apoyo a este tipo de movilidad autónoma y se suma a otros países en Europa, como Alemania o Finlandia.
Por otro lado, el director general de Peugeot, Citroën y DS en España y Portugal, Christophe Mandon, subrayó que España es, después de Francia, el segundo país en el que el grupo ha realizado pruebas de este tipo, con uno de los cuatro prototipos autónomos con los que cuenta, y añadió que es el primer fabricante que hace estos test en carreteras abiertas en España. Igualmente, recordó que el consorcio invirtió "más de 1.800 millones de euros" durante el año pasado en actividades de Investigación y Desarrollo y adelantó que la corporación cerrará el ejercicio actual con un volumen de ventas de todas sus marcas de 180.000 unidades en el mercado español, con una cuota de mercado del 15%.
Esta unidad del Citroën C4 Grand Picasso recorrió este lunes sin intervención del conductor los 600 kilómetros distancia que hay entre sus centros de Vigo y Madrid, después de que la Dirección General de Tráfico (DGT) aprobara el pasado 16 de noviembre la regulación por la que se establece un marco para la realización de pruebas con vehículos de conducción autónoma en vías abiertas a la circulación.
Este modelo dispone de tecnologías de última generación como un sistema de navegación por satélite GPS, así como de radares delanteros y traseros y de láseres con escáner, de cámaras digitales y también de una centralita de guiado electrónico que gestiona de forma autónoma la dirección, la aceleración y el frenado, a través del volante y los pedales. Con estas funciones de conducción automatizada, el conductor no usa ni los pedales ni el volante, aunque puede desactivar la función y retomar el control del coche cuando desee y la velocidad del modelo se adapta a los límites de velocidad vigentes, entre 0 y 120 kilómetros por hora y la dirección sigue las marcas de la carretera.
Al mismo tiempo, este prototipo monta el sensor de detección 'hand on' y una cámara de seguimiento del conductor. La interfaz hombre-máquina intuitiva, que ha sido desarrollada en colaboración con el Centro Tecnológico de Automoción de Galicia (CTAG).
No hay comentarios:
Publicar un comentario