A la puesta de largo de la infraestructura, que comenzó a gestarse en 2010, está previsto que acuda la presidenta de la Junta
M. ZUGASTI GRANADA 
Los tiburones que desde hace meses nadan en el Biodomo del Parque de las Ciencias saldrán del anonimato el próximo lunes, 25 de julio, la fecha elegida para la inauguración de la nueva infraestructura del Parque de las Ciencias. Con la puesta de largo de este nuevo espacio en el museo científico granadino se cerrará el círculo de un proyecto que desde 2010 ha ido cumpliendo los plazos previstos para su ejecución y que, aunque estaba previsto cortar la cinta inaugural en junio, la nueva convocatoria electoral obligó al Parque de las Ciencias a posponer el acto.
Con la presencia prevista de Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía, el Parque de las Ciencias ya ha iniciado la cuenta atrás para mostrar al público la quinta fase de ampliación del espacio museístico que ha contado con una inversión de doce millones de euros financiados al 80% por la Unión Europea.
El Biodomo supone una ventana a la biodiversidad del planeta y a las interacciones que lo hacen posible, ambientado en las selvas húmedas tropicales y en los arrecifes coralinos, puntos calientes de la evolución de la Tierra donde la diversidad biológica alcanza sus máximos exponentes.
Se trata de una gran infraestructura educativa con una importante vertiente turística y también científica, ya que está concebido también como un espacio de investigación y desarrollo de proyectos de I+D+i relacionados con la biodiversidad.
Presenta tres niveles de recorrido, subacuático, terrestre y aéreo, el primero de ellos con unos 185 metros de longitud y con acceso o una cascada y una rocalla húmeda de un gran río tropical.
En este nivel se encuentran cocodrilos, peces rayas, corales, tiburones, pez guitarra o medusas y cuenta con bioterios fluvial y marino, los laboratorios y la Sala Biodomo, un espacio polivalente con visión simultánea de los ambientes acuáticos.
El terrestre, con unos 190 metros de longitud, recrea manglares de fauna y flora de ambiente mareal, mediante un bosque tropical con cérvidos, nutrias, reptiles, aves, tortugas, lemures y una colección botánica tropical. Finalmente el recorrido aéreo, con 255 metros de longitud, asciende hasta el mirador y la zona de talleres en la parte superior y permite ver pequeños mamíferos, ranas, aves y numerosos insectos.
En apenas unos días, el Parque de las Ciencias volverá a tomar un nuevo impulso desde que se inauguró hace dos décadas.
Con la presencia prevista de Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía, el Parque de las Ciencias ya ha iniciado la cuenta atrás para mostrar al público la quinta fase de ampliación del espacio museístico que ha contado con una inversión de doce millones de euros financiados al 80% por la Unión Europea.
El Biodomo supone una ventana a la biodiversidad del planeta y a las interacciones que lo hacen posible, ambientado en las selvas húmedas tropicales y en los arrecifes coralinos, puntos calientes de la evolución de la Tierra donde la diversidad biológica alcanza sus máximos exponentes.
Se trata de una gran infraestructura educativa con una importante vertiente turística y también científica, ya que está concebido también como un espacio de investigación y desarrollo de proyectos de I+D+i relacionados con la biodiversidad.
Presenta tres niveles de recorrido, subacuático, terrestre y aéreo, el primero de ellos con unos 185 metros de longitud y con acceso o una cascada y una rocalla húmeda de un gran río tropical.
En este nivel se encuentran cocodrilos, peces rayas, corales, tiburones, pez guitarra o medusas y cuenta con bioterios fluvial y marino, los laboratorios y la Sala Biodomo, un espacio polivalente con visión simultánea de los ambientes acuáticos.
El terrestre, con unos 190 metros de longitud, recrea manglares de fauna y flora de ambiente mareal, mediante un bosque tropical con cérvidos, nutrias, reptiles, aves, tortugas, lemures y una colección botánica tropical. Finalmente el recorrido aéreo, con 255 metros de longitud, asciende hasta el mirador y la zona de talleres en la parte superior y permite ver pequeños mamíferos, ranas, aves y numerosos insectos.
En apenas unos días, el Parque de las Ciencias volverá a tomar un nuevo impulso desde que se inauguró hace dos décadas.
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