Una mujer trata de reconfortar a un niño en un campo de desplazados de Yemen.
El desembarco del 'Aquarius' en el Puerto de Valencia, después de una semana navegando por el Mediterráneo sin saber dónde tocar tierra y tras el rechazo del nuevo Gobierno italiano a que atracase en su costa, ha vuelto a poner de manifiesto este drama global, a escasos días del Día Mundial de los Refugiados, que se conmemora cada 20 de junio.
Las imágenes y los testimonios de esas 629 personas, de ellas 123 menores de edad, a su llegada a nuestro país, son el reflejo de sus propias historias personales, historias de supervivencia y sueños.
Agradecimiento, felicidad, alegría y esperanza han sido las palabras que más han repetido estas 629 personas, mientras las cifras globales de refugiados aumentan. Según el último informe de Acnur Tendencias Globales: Desplazamiento Forzado en 2017, 68,5 millones de personas, 2,9 millones más que el año anterior, se han visto desplazadas forzosamente en todo el mundo como consecuencia de la persecución, los conflictos, la violencia o las violaciones de derechos humanos.
No es posible rediseñar el mundo sin contar con la parte más desfavorecida
Y los conflictos armados siguen generando dramas humanos. Los ocho años de guerra en Siria han provocado que 5,6 millones de sirios hayan buscado refugio fuera del país, entre ellos 2,6 millones de niños. La guerra civil de Sudán del Sur ha obligado a huir a 2,5 millones de personas hacia países vecinos, y la de Yemen está causando la mayor crisis humanitaria mundial, generando el desplazamiento dentro del país de 100.000 personas en lo que va de año.
Mientras, Bangladesh ha acogido a más de 900.000 refugiados rohingya desde agosto de 2017, que se han visto obligados a huir de Myanmar por la persecución del Gobierno, y la playa de Cox's Bazar se ha convertido en el mayor campo de refugiados del mundo.
Se trata de mejorar entre todos como seres humanos, no de fronteras.
Ante esta situación global, en la que los refugiados son vistos como una carga para los países de acogida y se reavivan los discursos proteccionistas, xenófobos y sensacionalistas, desde Quiero no queremos ser neutrales, porque hay realidades ante las que no queremos mantener la equidistancia.
En Sustainable Brands Madrid 2018 la coyuntura global de los refugiados formará parte de la conversión "Redesigning the Good Life: Brands Serving Humanity". Porque si queremos generar un bienestar sostenible y armónico del ser humano y del entorno, la ecuación pasa necesariamente por contar con una sociedad diversa. No es posible rediseñar el mundo sin contar con la parte más desfavorecida –que, por cierto, es mayoría– para crear sociedades más inclusivas y prósperas.
Como dice António Guterres: "No se trata de compartir una carga, sino de compartir una responsabilidad mundial"
El talento, la experiencia, la creatividad y la diversidad de pensamiento, también el de aquellos que inician una nueva trayectoria vital lejos de su país de origen, tienen que estar presentes en todas las organizaciones para que transformen la sociedad. Se trata de mejorar entre todos como seres humanos, no de fronteras.
Por eso, desde Quiero consideramos que las empresas y las marcas tienen una oportunidad para generar un cambio positivo y buscar soluciones para las personas que llegan a los países de acogida junto a los Estados y las ONG. Además, cualquier estrategia de sostenibilidad tendría que contar con acciones específicas para integrar en la sociedad a los refugiados si se quiere dar respuesta a los retos globales.
Yo, tú, ella, él, nosotras, nosotros, vosotras, vosotros o ellas y ellos podríamos ser refugiados
Refugees Welcome, ONG que nació en Berlín en 2014 tras la huida de miles de sirios hacia las costas de Grecia vía Turquía para llegar a Europa, dará su visión en Sustainable Brands Madrid 2018 sobre las necesidades globales de las personas que piden asilo, y explicará cómo trabaja en los 14 países en los que tiene presencia.
Como dice António Guterres, secretario general de la ONU: "No se trata de compartir una carga, sino de compartir una responsabilidad mundial, basada tanto en la idea general de que todos somos humanos como en las obligaciones muy específicas contraídas en virtud del derecho internacional".
Yo, tú, ella, él, nosotras, nosotros, vosotras, vosotros o ellas y ellos podríamos ser refugiados, tanto en España como en cualquier parte del mundo desarrollo
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