El año hidrológico está a punto de cerrarse con un 25% menos de lluvias que el anterior
A. ASENSIO GRANADA
El verano que está a punto de despedirse en la provincia se va sin dejar apenas registros de precipitaciones en Granada, lo que deja el balance del año hidrológico, que finalizará el próximo 30 de septiembre, con un 25% menos de lluvia que en el anterior curso, según los datos de la precipitación acumulada en las zonas hidrográficas Guadiana Menor y Alto y Medio Genil. En el primer punto se habían recogido hasta el 31 de julio 296 mm, mientras que la media histórica está en 396 mm. En el segundo, los registros indicaban que hasta fin de julio se habían recogido 94 mm menos que la media histórica (470 mm).
Hay que destacar que este 2013/2014 ha sido, sobre todo, un curso lleno de contrastes, con un invierno desbordante en cuanto a las precipitaciones registradas pero con una primavera y verano secos, especialmente en la zona norte de la provincia. Pese a la escasez de nubes y de lluvias, los pantanos encaran la recta final del año hidrológico en buen estado. Están a un 68% de su capacidad, según los datos provinciales ofrecidos por el portal Embalses.net.
Desde la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), que gestiona todos los embalses de la provincia salvo los de la cuenca mediterránea -Rules y Béznar-, las reservas a día de hoy permiten garantizar tres años de abastecimiento y que las dos próximas campañas de riego se desarrollen con "normalidad". Cuando a fin de mes concluya la presente campaña de riego, la previsión de la CHG es que las infraestructuras de su competencia ronden el 70% de su capacidad, lo que supondrá estar por debajo de los registros del pasado septiembre pero sin problemas de abastecimiento. Una vez concluida la campaña y tras analizar el comportamiento meteorológico de las primeras semanas de octubre se analizará la necesidad de realizar desembalses preventivos.
Un dato que da cuenta del buen estado de los embalses granadinos en estos momentos -pese a lo seco del verano- es la comparación entre el porcentaje de capacidad que ahora tienen (68%) y la media de agua embalsada de la última década (52%). Entre uno y otro registro hay 16 puntos de diferencia. En parte, ese buen dato se debe a la bonanza en cuanto a las precipitaciones de los últimos años, especialmente en 2013, pero también al agua caída durante el pasado invierno en la provincia. Según los datos recogidos por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en el aeropuerto de Granada, entre diciembre de 2013 y marzo de este año se superó, semana tras semana, la media de precipitaciones registradas en ese punto, media realizada con los datos que van entre 1971 y 2000. Sirva como muestra el registro de la última semana de febrero de este año, cuando se recogieron 225 mm en el aeropuerto. La media -que establece lo que sería la 'normalidad' en ese punto- está en 100 mm.
La situación cambió radicalmente a partir de abril. Según los datos de la Aemet en ese punto, la precipitación en el aeropuerto no alcanzó en toda la primavera registros de la media. Según el Índice de Precipitación Estandarizado (SPI, por sus siglas en inglés), la situación de falta de lluvias en este año hidrológico ha sido más notable en la zona norte y en la Costa.
Hay que destacar que este 2013/2014 ha sido, sobre todo, un curso lleno de contrastes, con un invierno desbordante en cuanto a las precipitaciones registradas pero con una primavera y verano secos, especialmente en la zona norte de la provincia. Pese a la escasez de nubes y de lluvias, los pantanos encaran la recta final del año hidrológico en buen estado. Están a un 68% de su capacidad, según los datos provinciales ofrecidos por el portal Embalses.net.
Desde la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), que gestiona todos los embalses de la provincia salvo los de la cuenca mediterránea -Rules y Béznar-, las reservas a día de hoy permiten garantizar tres años de abastecimiento y que las dos próximas campañas de riego se desarrollen con "normalidad". Cuando a fin de mes concluya la presente campaña de riego, la previsión de la CHG es que las infraestructuras de su competencia ronden el 70% de su capacidad, lo que supondrá estar por debajo de los registros del pasado septiembre pero sin problemas de abastecimiento. Una vez concluida la campaña y tras analizar el comportamiento meteorológico de las primeras semanas de octubre se analizará la necesidad de realizar desembalses preventivos.
Un dato que da cuenta del buen estado de los embalses granadinos en estos momentos -pese a lo seco del verano- es la comparación entre el porcentaje de capacidad que ahora tienen (68%) y la media de agua embalsada de la última década (52%). Entre uno y otro registro hay 16 puntos de diferencia. En parte, ese buen dato se debe a la bonanza en cuanto a las precipitaciones de los últimos años, especialmente en 2013, pero también al agua caída durante el pasado invierno en la provincia. Según los datos recogidos por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en el aeropuerto de Granada, entre diciembre de 2013 y marzo de este año se superó, semana tras semana, la media de precipitaciones registradas en ese punto, media realizada con los datos que van entre 1971 y 2000. Sirva como muestra el registro de la última semana de febrero de este año, cuando se recogieron 225 mm en el aeropuerto. La media -que establece lo que sería la 'normalidad' en ese punto- está en 100 mm.
La situación cambió radicalmente a partir de abril. Según los datos de la Aemet en ese punto, la precipitación en el aeropuerto no alcanzó en toda la primavera registros de la media. Según el Índice de Precipitación Estandarizado (SPI, por sus siglas en inglés), la situación de falta de lluvias en este año hidrológico ha sido más notable en la zona norte y en la Costa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario