Boletus, lepiotas, níscalos, lenguas de vaca, cantarelus, tricholomas, legistas, lacarias, amanitas... Cada zona de España tiene su variedad su calendario de recogida, pero lo que sí es un punto en común es el beneficio para la salud que aporta el consumo de setas. Te damos las cinco claves:
1. Las setas tienen un sabor único. Todos conocemos los cuatro sabores primarios: salado, dulce, amargo y ácido. Pero hay otro sabor menos conocido en nuestra cultura, el umami y que indica la presencia de dos componentes químicos: el glutamato y el guanilato. Entre sus beneficios está que al ser un sabor muy potente permite usar menos sal en la preparación de los platos. Un estudio publicado en la revista Journal of Food Science descubrió que empleando setas en la cocina podía reemplazarse hasta el 80% de la carne y reducir la sal un 25% sin comprometer el sabor de la comida.
2. De los pocos alimentos de origen vegetal ricos en vitamina D. Es una vitamina fundamental para la salud de los huesos. La fuente principal de vitamina D es la luz solar cuando impacta sobre la piel, pero también se puede encontrar en algunos alimentos, uno de ellos son las setas.
3. Son útiles para controlar el peso. Añadir setas a la dieta puede ser un modo de reducir el peso, pues son un alimento de baja densidad energética que aportan muy pocas calorías al organismo aún en grandes porciones. Un estudio publicado en la revista Apetite examinó la evolución del peso en un grupo de adultos obesos que sustituyeron durante un año la carne roja por setas en su dieta y la comparó con un Segundo grupo que seguía una dieta estándar. Al final del ensayo, aquellos que habían incorporado la seta a su dieta habían consumido menos grasa, perdido más kilos y tenían una masa corporal menor que la del grupo de la dieta estándar.
4. Son una buena fuente de vitamina B. En las setas encontramos abundante riboflavina, niacina y ácido pantoténico, todos son componentes de la vitamina B, esenciales para nuestro sistema nervioso. La vitamina B nos ayuda a transformar las calorías en energía útil y eleven la producción de glóbulos rojos.
5. Ayudan a regular el colesterol. Las setas también contienen una fibra llamada betaglucano, beneficiosa para los vasos sanguíneos y que tiene un gran papel en el metabolismo de las grasas porque ayudan a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre.
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