La actividad forma parte de las actividades para conmemorar el Milenio del Reino de Granada y tendrá un pasacalles dedicado a Almería/Al-Mariyya
Luis Rogelio Rodríguez y Francisca Pleguezuelos formalizan el convenio de colaboración para las Alcaicerías del Reino de Granada. :: J. J. MULLOR
«Cuando Almería era Almería, Granada era su alquería». La verdad y el simple lanzamiento al viento de esta frase, recordada por el propio alcalde, Luis Rogelio Comendador, tendrá su pequeño espacio en las Alcaicerías del Milenio del Reino de Granada, que se instalarán en el Plaza Vieja desde el viernes hasta el domingo. El Consorcio para el Conmemoración del Primer Milenio de la Fundación del Reino de Granada y el Ayuntamiento de Almería formalizaron ayer el acuerdo de colaboración para continuar con celebración de actividades con ese fundamento. Las Alcaicerías prosigue al partido de baloncesto entre las selecciones españolas y francesas disputado en el pasado agosto y tendrá como continuación la exposición 'El alma desgranada'.
El espacio dedicado a ese esplendor almeriense, bajo el título 'Al-Mariyya, espejo de Al-Andalus', será el pasacalles con el que se cerrará el programa de actos de las tres jornadas de las Alcaicerías -once de la noche del viernes y del sábado y nueve de la noche del domingo- y con este pasacalles se demostrará el papel que jugaba en aquellos tiempos Almería no solamente como espejo del mar sino también como espejo de todo el Al-Andalus, tal como recoge el título.
Documentos
Las Alcaicerías permitirá a toda la familia vivir el bullicio y la vida de los mercados de aquella época, según manifestó en la presentación Francisca Pleguezuelos, presidenta del Consorcio para la Conmemoración del Primer Milenio de la Fundación del Reino de Granada, quien rechazó cualquier parecido con los zocos medievales que recorren la geografía española. Mientras en éstos se percibe un tufo mercantil y mercantilista, según la presidenta, en las Alcaicerías se concentra un actividad lúdica, cultural, histórico y atractiva para todos los públicos al reproducir el comercio, el ocio y la vida con actividades artesanales, pasacalles, encuentros, conciertos, gastronomía, rincones infantiles y exhibiciones de cetrería, dirigidas por la Fragua de Vulcano, empresa que produce toda la actividad y que las ha difundido por toda Europa.
En la Plaza Vieja empezaron a instalarse ayer ya los 70 puestos, con un diseño de arco árabe, que constituye únicamente uno de los elementos recogidos de la documentación en la que se apoyan las Alcaicerías y que ha tenido, entre otras fuentes, las 'Cantigas', de Alfonso X el Sabio. Este aspecto cultural, juntamente con el aspecto del conocimiento, que constituyen la base de esta actividad frente a los zocos medievales, se potencia igualmente con 25 paneles, que reproducen imágenes y textos seleccionadas de los 'Tratados de gobierno'. Hay también espacios para la participación del público, como es el taller de fabricación de velas. De «completa, entretenida y muy novedosa» calificó la actividad el alcalde, quien destacó asimismo su carácter plenamente familiar dentro de un ambiente lúdico y festivo. Sostuvo Luis Rogelio Rodríguez que supondrá un revulsivo para el Casco Histórico al disponer como escenario del «corazón de la ciudad», la Plaza Vieja.
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