El Ministerio de Cultura inicia el proceso para lograr la declaración como Patrimonio Cultural Inmaterial
V. GOMARIZ BELDA GRANADA
El tapeo es una filosofía de vida muy arraigada en la gastronomía de Granada que ahora inicia su periplo para convertirse en Patrimonio Cultural Inmaterial. De esta manera, este hábito del que la capital granadina es referente a nivel nacional aspira a un mayor reconocimiento mundial y social. A partir de hoy mismo el Consejo de Patrimonio Histórico que se celebra en Avilés (Asturias) va a analizar los trabajos realizados en torno a dicha manifestación con el objetivo de proceder a la incoación del expediente, una vez se cumplan los trámites legales pertinentes.
No obstante, cabe destacar que en última instancia es competencia del Consejo de Ministros hacer efectiva tal declaración. De ahí, que la denominación como tal en caso de producirse llegue más adelante en el tiempo. En el caso que ocupa en Avilés a la mesa del Consejo de Patrimonio Histórico se trata de los primeros pasos para lograr el propósito planteado.
Si esa aspiración se lograra más adelante supondría un respaldo más a uno de los atractivos 'estrella' que Granada y su provincia ofrece a todos aquellos que la visitan. Con el permiso de los pinchos de San Sebastián, a nadie escapa que esta costumbre se ha extendido a otras partes de España desde la ciudad de la Alhambra, creando así un precedente en la cocina española. Es más, en muy pocas ciudades el producto que los negocios de hostelería ofrecen al comensal es totalmente gratuito.
En otras partes de Andalucía como Sevilla o Málaga, por ejemplo, si el cliente quiere degustar una creación tiene que pagar un precio por la misma. Esto en Granada o Almería no ocurre ya que se concibe como un detalle del establecimiento en cuestión.
En Granada no hay visita a un bar que continúe -tras pedir la bebida- con la tradicional tapa sobre la barra o la mesa. Así, la capital granadina se ha convertido en un referente en todo el país, algo que ya conocen también fuera de las fronteras españolas. La futura declaración reforzará más esa posición en todo el mundo.
En los últimos años las administraciones públicas (Junta de Andalucía, Diputación Provincial y ayuntamientos) y el sector empresarial de la hostelería han trabajo codo con codo para posicionar a la tapa como un producto turístico más dentro del campo de las experiencias del visitante. Sin ir más lejos, se han organizado numerosos certámenes para promocionar y dar impulso a este producto.
En la edición de 2016 el concurso 'Granada de Tapas' ha alcanzado su octava edición, una tendencia que también se ha trasladado a otros municipios de la provincia como Pinos Puente donde ya ha calado el certamen tematizado de la 'Tapa Colombina', para fortalecer la vinculación de Cristóbal Colón con esta localidad del Área Metropolitana. También hay firmas privadas como Cervezas Alhambra que convocan a lo largo del año citas de este tipo.
Por otro lado, desde la Federación Provincial de Hostelería de Granada se ha venido trabajando desde años atrás en el marco del Plan de Excelencia Turística (Junta y Ayuntamiento de Granada) para aupar a la tapa al lugar que merece como símbolo de la cocina granadina y antesala de lo que el comensal puede degustar sobre el mantel en mayor cantidad.
En esa línea, a pesar de que todavía existen quienes ofrecen el típico bocadillo con más pan que otro ingrediente, un gran número de los bares y restaurantes se ha preocupado de un tiempo a esta parte en dar al usuario un producto de gran calidad. Y es que de lo que se trata es de que la experiencia sea positiva para el futuro comensal y éste opte por sentarse a la mesa y disfrutar en familia, entre amigos o compañeros.
No obstante, cabe destacar que en última instancia es competencia del Consejo de Ministros hacer efectiva tal declaración. De ahí, que la denominación como tal en caso de producirse llegue más adelante en el tiempo. En el caso que ocupa en Avilés a la mesa del Consejo de Patrimonio Histórico se trata de los primeros pasos para lograr el propósito planteado.
Si esa aspiración se lograra más adelante supondría un respaldo más a uno de los atractivos 'estrella' que Granada y su provincia ofrece a todos aquellos que la visitan. Con el permiso de los pinchos de San Sebastián, a nadie escapa que esta costumbre se ha extendido a otras partes de España desde la ciudad de la Alhambra, creando así un precedente en la cocina española. Es más, en muy pocas ciudades el producto que los negocios de hostelería ofrecen al comensal es totalmente gratuito.
En otras partes de Andalucía como Sevilla o Málaga, por ejemplo, si el cliente quiere degustar una creación tiene que pagar un precio por la misma. Esto en Granada o Almería no ocurre ya que se concibe como un detalle del establecimiento en cuestión.
En Granada no hay visita a un bar que continúe -tras pedir la bebida- con la tradicional tapa sobre la barra o la mesa. Así, la capital granadina se ha convertido en un referente en todo el país, algo que ya conocen también fuera de las fronteras españolas. La futura declaración reforzará más esa posición en todo el mundo.
En los últimos años las administraciones públicas (Junta de Andalucía, Diputación Provincial y ayuntamientos) y el sector empresarial de la hostelería han trabajo codo con codo para posicionar a la tapa como un producto turístico más dentro del campo de las experiencias del visitante. Sin ir más lejos, se han organizado numerosos certámenes para promocionar y dar impulso a este producto.
En la edición de 2016 el concurso 'Granada de Tapas' ha alcanzado su octava edición, una tendencia que también se ha trasladado a otros municipios de la provincia como Pinos Puente donde ya ha calado el certamen tematizado de la 'Tapa Colombina', para fortalecer la vinculación de Cristóbal Colón con esta localidad del Área Metropolitana. También hay firmas privadas como Cervezas Alhambra que convocan a lo largo del año citas de este tipo.
Por otro lado, desde la Federación Provincial de Hostelería de Granada se ha venido trabajando desde años atrás en el marco del Plan de Excelencia Turística (Junta y Ayuntamiento de Granada) para aupar a la tapa al lugar que merece como símbolo de la cocina granadina y antesala de lo que el comensal puede degustar sobre el mantel en mayor cantidad.
En esa línea, a pesar de que todavía existen quienes ofrecen el típico bocadillo con más pan que otro ingrediente, un gran número de los bares y restaurantes se ha preocupado de un tiempo a esta parte en dar al usuario un producto de gran calidad. Y es que de lo que se trata es de que la experiencia sea positiva para el futuro comensal y éste opte por sentarse a la mesa y disfrutar en familia, entre amigos o compañeros.
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