Los negocios de la vieja carretera afectados no han dejado de reivindicar la apertura
Rosa Fernández
motril
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Durante
años fue una reivindicación que casi se daba por perdida. No se
entendía cómo se había construido un ramal que conectaba la A-7 con la
N-323 y luego se había dejado abandonado, sin que se abriese, sobre
todo, cuando suponía una inversión cuantiosa. De ahí que los negocios de
la vieja carretera de la Costa a Granada pidiesen que aquella ejecución
algún día sirviese para algo. Si hubo una empresa que no llegó nunca a
tirar la toalla fue la de las gasolineras de Panata y la persona que
está detrás: Rafael Yanguas. No sólo aprovechó sus contactos entre las
asociaciones empresariales para hacer llegar su problema a la cabeza del
Ministerio de Fomento, sino que cada vez que había una oportunidad,
colocaba una pancarta recordando el tema. La contestación que le dieron
durante algún tiempo es que esa bajada y, en concreto, la curva, era
"muy peligrosa".
Ayer fue un día para celebrar por éste y el resto de negocios de la N-323, que vuelven a estar 'conectados', puesto que el Ministerio de Fomento puso en servicio las obras complementarias del tramo de la autovía A-7 Lobres-Guadalfeo. La actuación permite realizar el movimiento desde la A-7 hacia la carretera N-323 sentido Granada sin necesidad de pasar por la glorieta ubicada en la autovía GR-14. Además, también abrió las vías de aceleración y deceleración del subramal Almería - N-323, El presupuesto de ambas actuaciones alcanza losdos2 millones de euros.
Las obras comprenden la ampliación de la plataforma en la longitud necesaria para alojar los nuevos carriles y la ampliación de los terraplenes adosados al terraplén actual y a los desmontes. También se incluye la ampliación y cubrimiento de las acequias afectadas por la nueva plataforma y la restitución de los elementos de drenaje, señalización, balizamiento y cerramiento.
En la última visita de la ministra de Fomento, Ana Pastor, a la Costa, en la inauguración de un tramo de la A-7, una representante de la gasolinera de Panata le hizo entrega de una torta real, "en agradecimiento de que hubiese desbloqueado el asunto".
Ayer fue un día para celebrar por éste y el resto de negocios de la N-323, que vuelven a estar 'conectados', puesto que el Ministerio de Fomento puso en servicio las obras complementarias del tramo de la autovía A-7 Lobres-Guadalfeo. La actuación permite realizar el movimiento desde la A-7 hacia la carretera N-323 sentido Granada sin necesidad de pasar por la glorieta ubicada en la autovía GR-14. Además, también abrió las vías de aceleración y deceleración del subramal Almería - N-323, El presupuesto de ambas actuaciones alcanza losdos2 millones de euros.
Las obras comprenden la ampliación de la plataforma en la longitud necesaria para alojar los nuevos carriles y la ampliación de los terraplenes adosados al terraplén actual y a los desmontes. También se incluye la ampliación y cubrimiento de las acequias afectadas por la nueva plataforma y la restitución de los elementos de drenaje, señalización, balizamiento y cerramiento.
En la última visita de la ministra de Fomento, Ana Pastor, a la Costa, en la inauguración de un tramo de la A-7, una representante de la gasolinera de Panata le hizo entrega de una torta real, "en agradecimiento de que hubiese desbloqueado el asunto".
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