El PSOE junto a PILR y CA deciden rebelarse contra Juan María Rivas por su carácter "propotente"
ROSA FERNÁNDEZ MOTRIL
Siete concejales (de nueve de la oposición y trece totales) del Ayuntamiento de Albuñol han rubricado una moción de censura que fue registrada en el Consistorio ayer. Ésta supone la "primera fase", en palabras del partido mayoritario (PSOE), para que haya cambio en la localidad costera, y que la alcaldía pase de manos populares a socialistas. Y todos los pronósticos apuntan a que la nueva alcaldesa de Albuñol será en breve María José Sánchez, ex regidora en el periodo 2009-2011.
Los motivos que aducen los firmantes son la "parálisis" que reinaba en el municipio en una situación anómala, en la que el PP gobernaba en minoría (con 4 concejales) en la que el propio alcalde, Juan María Rivas, se ha quejado reiteradamente de que le echaban para atrás todas sus iniciativas. De ahí que siempre estuviese en la cuerda floja.
Pero para la oposición, ha sido determinante su actitud "prepotente", "autoritaria" y la "ausencia de democracia y de libertad de expresión", imperante en los plenos, que han lamentado todos los grupos políticos, incluso Convergencia Andaluza, que en principio firmó un acuerdo de gobierno con el PP, que luego rompió.
En cualquier caso, la cuenta atrás ya ha comenzado para que el día 12 a las 12 de la mañana se celebre el pleno en el que se debata la moción de censura.
La futura alcaldesa, María José Sánchez, mostraba ayer grandes dosis de seguridad en lo que pasará en once días: Su partido, el PSOE, el más votado en las últimas elecciones, con 5 concejales, el edil independiente de La Rábita y una edil de Convergencia Andaluza son los que darán el vuelco político. La clave, precisamente, está en esta última concejala y en las convulsiones internas que ha sufrido CA (creado de una escisión con los socialistas).
Este último partido, que empezó la legislatura con 3 concejales y la terminará al parecer con 1, ha tenido la llave durante todo este tiempo en una situación en la que el PSOE tenía 5 concejales y el PP 4. Juan Cara, secretario general de Convergencia Andaluza de Albuñol, anunció ayer su intención de expulsar del partido a la edil que "se ha desmarcado", por lo que pasaría a ser concejala no adscrita.
Sin embargo, el PP provincial ve en esta moción la mano oculta de Juan Carlos Benavides: A juicio del vicepresidente ejecutivo del PP, Antonio Ayllón, "una vez más el PSOE demuestra que su estrategia es el todo vale y que es capaz de pactar con Benavides, sólo para hacerse con un nuevo poder".
Ayllón se preguntó por el precio que el PSOE provincial va a pagar por esta moción de censura "toda vez que es conocido que Benavides no hace absolutamente nada gratis". En ese sentido Ayllón, vaticinó que el político almuñequero va a ir pasando poco a poco para los socialistas "de indeseable, a colaborador necesario y quién sabe si no acabará en fiel aliado".
María José Sánchez reconoció que llevan dialogando con esta formación durante todo este tiempo (casi tres años) para arrebatarle la alcaldía a Rivas, y que "ha sido ahora" cuando se han dado las circunstancias para ello.
Por su parte, Nicolás Ayala, concejal del PILR (Partido Independiente de La Rábita), tan sólo se quejaba del mandato de Rivas en que su máxima ha sido el "ordeno y mando" y en el abandono de este anejo que aspiraba a ser Entidad Local Autónoma.
Los motivos que aducen los firmantes son la "parálisis" que reinaba en el municipio en una situación anómala, en la que el PP gobernaba en minoría (con 4 concejales) en la que el propio alcalde, Juan María Rivas, se ha quejado reiteradamente de que le echaban para atrás todas sus iniciativas. De ahí que siempre estuviese en la cuerda floja.
Pero para la oposición, ha sido determinante su actitud "prepotente", "autoritaria" y la "ausencia de democracia y de libertad de expresión", imperante en los plenos, que han lamentado todos los grupos políticos, incluso Convergencia Andaluza, que en principio firmó un acuerdo de gobierno con el PP, que luego rompió.
En cualquier caso, la cuenta atrás ya ha comenzado para que el día 12 a las 12 de la mañana se celebre el pleno en el que se debata la moción de censura.
La futura alcaldesa, María José Sánchez, mostraba ayer grandes dosis de seguridad en lo que pasará en once días: Su partido, el PSOE, el más votado en las últimas elecciones, con 5 concejales, el edil independiente de La Rábita y una edil de Convergencia Andaluza son los que darán el vuelco político. La clave, precisamente, está en esta última concejala y en las convulsiones internas que ha sufrido CA (creado de una escisión con los socialistas).
Este último partido, que empezó la legislatura con 3 concejales y la terminará al parecer con 1, ha tenido la llave durante todo este tiempo en una situación en la que el PSOE tenía 5 concejales y el PP 4. Juan Cara, secretario general de Convergencia Andaluza de Albuñol, anunció ayer su intención de expulsar del partido a la edil que "se ha desmarcado", por lo que pasaría a ser concejala no adscrita.
Sin embargo, el PP provincial ve en esta moción la mano oculta de Juan Carlos Benavides: A juicio del vicepresidente ejecutivo del PP, Antonio Ayllón, "una vez más el PSOE demuestra que su estrategia es el todo vale y que es capaz de pactar con Benavides, sólo para hacerse con un nuevo poder".
Ayllón se preguntó por el precio que el PSOE provincial va a pagar por esta moción de censura "toda vez que es conocido que Benavides no hace absolutamente nada gratis". En ese sentido Ayllón, vaticinó que el político almuñequero va a ir pasando poco a poco para los socialistas "de indeseable, a colaborador necesario y quién sabe si no acabará en fiel aliado".
María José Sánchez reconoció que llevan dialogando con esta formación durante todo este tiempo (casi tres años) para arrebatarle la alcaldía a Rivas, y que "ha sido ahora" cuando se han dado las circunstancias para ello.
Por su parte, Nicolás Ayala, concejal del PILR (Partido Independiente de La Rábita), tan sólo se quejaba del mandato de Rivas en que su máxima ha sido el "ordeno y mando" y en el abandono de este anejo que aspiraba a ser Entidad Local Autónoma.
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