Un informe de la CEOE desvela que, entre 2015 y 2050, los mayores de 65 años se podrían duplicar, afectando la sostenibilidad del sistema de pensiones.
EFE, MADRID
El descenso de la población activa y el proceso de envejecimiento ayudarán a situar la tasa de desempleo en el 18% en 2017 y en el 7,5% en 2025, según un informe de la CEOE, realizado con proyecciones del INE, que también advierte de que esta situación afectará a la sostenibilidad del sistema de pensiones.
En rueda de prensa, el director del departamento de Asuntos Económicos y Europeos de la CEOE, Bernardo Aguilera, ha explicado que uno de los objetivos del informe es plantear a los partidos políticos el escenario sobre el que deberían trabajar de cara a la reforma del Pacto de Toledo.
Aguilera ha explicado que entre 2015 y 2050 los mayores de 65 años se podrían duplicar y en el año 2064, según las proyecciones del INE, habrá cuatro ocupados por cada tres jubilados. Por ello, según Aguilera habrá que analizar un cambio de tendencia en los hábitos con una propensión hacia el ahorro, variaciones en el consumo de bienes duradero o en cuestiones de financiación de la vivienda.
También ha dicho que esta nueva fotografía implicaría subir los presupuestos destinados a sanidad y servicios sociales y, por contra, reducir las partidas referidas a educación, en especial las destinadas al tramo de menor edad.
Aguilera ha comentado que estas proyecciones se hacen en un marco de crecimiento económico "prudente" del 1,5 % y ha precisado que no contemplan escenarios de crecimiento menores porque ello sería entrar en una "nueva recesión".
Ha insistido en que el documento pretende mostrar la evolución de la población en los próximos años y su efecto en el mercado laboral, y lo hace en dos escenarios: a corto plazo hasta 2017 y a largo plazo, hasta 2025.
En el primer contexto, se espera que entre 2015 y 2017 los mayores de 40 años aumenten en mas de 700.000 personas, de los que 240.000 tendrán más de 70 años, continuando así el envejecimiento de la población.
Sin embargo, si se mantienen las tasas de actividad de 2015, la población activa caerá en 2017 en 333.000 personas.
Si a este escenario se añade la creación de 850.000 empleos, la tasa de paro se podría situar en 2017 en el 18,1 % en medida anual, y estaría por debajo del 18 % en la última parte del año.
A largo plazo, hasta 2015, el informe, basado en las proyecciones del INE, sostiene que la población se reducirá en torno a 620.000 personas.
En este período destacan los descensos de población más jóvenes: 1,3 millones menos entre los menores de 14 años y 3,2 millones menos entre los intervalos de 25 a 44 años.
Por contra, la población mayor de 45 años aumentará en 3,3 millones de personas, de los que 1,7 millones tendrán más de 65 años.
Con esta evolución de la población y si se mantienen las tasas de actividad de 2015, la población activa caería aproximadamente en 1,7 millones de personas y la tasa de paro volvería a niveles previos a la crisis, en torno al 8 %.
En definitiva, según el informe de la patronal, estas dinámicas poblacionales contribuirían a mejorar las cifras de desempleo, pero a largo y medio plazo plantearían "incertidumbres" por su efecto en el potencial de crecimiento, en la sostenibilidad del sistema de pensiones y en las necesidades de atención sanitaria o servicios sociales.
Por ello y en el actual contexto político, el informe llama a "reflexionar" a los negociadores del Pacto de Toledo y les instan a "tomar medidas cuanto antes".
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