Se invertirán 5 millones de euros en dos años para casas de 31 municipios, excluida la capital
L. Q. GRANADA
La Junta de Andalucía destinará cinco millones de euros en los próximos dos años para arreglar unas 300 infraviviendas de la provincia de Granada que llevan en lista de espera desde 2009, año en el que este tipo de ayudas quedaron en suspenso por el inicio de la crisis económica.
Para este año ya hay previstas actuaciones en 147 viviendas de distintos municipios de la provincia, entre los que destacan Salar, Pedro Martínez, Lanjarón o Huéscar, por el número de obras planificadas. El presupuesto global de 2013 es de 2,9 millones de euros.
El delegado de Fomento, Manuel Morales (IU), destacó ayer la "prioridad" que el Gobierno bipartito de la Junta ha querido darle a estas actuaciones, pese a estar en el peor momento económico. "Hay cosas que no pueden esperar y es necesario actuar en los núcleos familiares más pobres". Después de mostrar una secuencia de imágenes de casas con humedades, techos rotos, suelos de tierra, baños destrozados, Morales insistió en que su prioridad es ayudar a mejorar "esta realidad". Lo más llamativo, según el delegado, es el estado de las viviendas cueva.
Granada es la provincia que aglutina más de la mitad de las infraviviendas contabilizadas en Andalucía. Desde 2009 más de 300 de estas residencias se quedaron a la espera de recibir ayudas para ser arregladas, pero el plan autonómico quedó suspendido. Ahora la Junta lo ha retomado y ha cogido como prioridad esas viviendas que se quedaron en lista de espera.
Según explicó el delegado de Fomento, en la capital se hicieron 22 actuaciones pero no quedaba ninguna pendiente, por lo que Granada no se beneficiará de estas nuevas ayudas.
En algunos casos los arreglos de las casas son intervenciones puntuales y en otros se trata de casi una reconstrucción, pero la media que se ha previsto invertir para cada vivienda es de unos 24.500 euros.
Estas ayudas están previstas para familias cuya renta anual no supera los 7.000 euros y han sido seleccionadas mediante la ayuda de los Ayuntamientos. De todos modos los técnicos han visitado una por una las viviendas para comprobar de primera mano su estado.
Los Ayuntamientos tendrán una importante participación en este plan de arreglo de infraviviendas, pues serán ellos los promotores de las obras. Es decir, la Junta aportará el dinero, pero serán los propios municipios los que contratarán las obras a las empresas y estarán al tanto de las tareas que se van realizando. Además, la selección de las infraviviendas se ha hecho mediante los informes de los servicios sociales de los municipios.
Morales quiso distinguir este programa del de Rehabilitación Autonómica, como el que estuvo en marcha en el Albaicín, por ejemplo. En este caso se trata de viviendas en situaciones más extremas, razón por la cual el Gobierno de la Junta ha decidido primar estas actuaciones pese a la falta de fondos económicos.
"Queremos que los ciudadanos sepan que usamos sus impuestos para favorecer a las familias más pobres de la provincia y para generar empleo", agregó el delegado de Fomento.
Para este año ya hay previstas actuaciones en 147 viviendas de distintos municipios de la provincia, entre los que destacan Salar, Pedro Martínez, Lanjarón o Huéscar, por el número de obras planificadas. El presupuesto global de 2013 es de 2,9 millones de euros.
El delegado de Fomento, Manuel Morales (IU), destacó ayer la "prioridad" que el Gobierno bipartito de la Junta ha querido darle a estas actuaciones, pese a estar en el peor momento económico. "Hay cosas que no pueden esperar y es necesario actuar en los núcleos familiares más pobres". Después de mostrar una secuencia de imágenes de casas con humedades, techos rotos, suelos de tierra, baños destrozados, Morales insistió en que su prioridad es ayudar a mejorar "esta realidad". Lo más llamativo, según el delegado, es el estado de las viviendas cueva.
Granada es la provincia que aglutina más de la mitad de las infraviviendas contabilizadas en Andalucía. Desde 2009 más de 300 de estas residencias se quedaron a la espera de recibir ayudas para ser arregladas, pero el plan autonómico quedó suspendido. Ahora la Junta lo ha retomado y ha cogido como prioridad esas viviendas que se quedaron en lista de espera.
Según explicó el delegado de Fomento, en la capital se hicieron 22 actuaciones pero no quedaba ninguna pendiente, por lo que Granada no se beneficiará de estas nuevas ayudas.
En algunos casos los arreglos de las casas son intervenciones puntuales y en otros se trata de casi una reconstrucción, pero la media que se ha previsto invertir para cada vivienda es de unos 24.500 euros.
Estas ayudas están previstas para familias cuya renta anual no supera los 7.000 euros y han sido seleccionadas mediante la ayuda de los Ayuntamientos. De todos modos los técnicos han visitado una por una las viviendas para comprobar de primera mano su estado.
Los Ayuntamientos tendrán una importante participación en este plan de arreglo de infraviviendas, pues serán ellos los promotores de las obras. Es decir, la Junta aportará el dinero, pero serán los propios municipios los que contratarán las obras a las empresas y estarán al tanto de las tareas que se van realizando. Además, la selección de las infraviviendas se ha hecho mediante los informes de los servicios sociales de los municipios.
Morales quiso distinguir este programa del de Rehabilitación Autonómica, como el que estuvo en marcha en el Albaicín, por ejemplo. En este caso se trata de viviendas en situaciones más extremas, razón por la cual el Gobierno de la Junta ha decidido primar estas actuaciones pese a la falta de fondos económicos.
"Queremos que los ciudadanos sepan que usamos sus impuestos para favorecer a las familias más pobres de la provincia y para generar empleo", agregó el delegado de Fomento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario