El censo del lince ibérico correspondiente al año 2015, que por vez primera incluye a los especímenes liberados fuera de Andalucía --las sueltas en estas zonas comenzaron en 2014, y ese año no se integraron en el recuento para que se establecieran como territoriales y se asentaran en los entornos de liberación--, arroja un total de 404 ejemplares, 361 en la comunidad autónoma andaluza y 43 en Vale do Mértola (Portugal), Matachel (Badajoz), Montes de Toledo y Sierra Morena Oriental y Occidental, en lo que supone una tendencia al alza, pues en el caso andaluz se proviene de una cifra de 327 animales en 2014.
El principal aumento se establece en la población de Sierra Morena, uno de los dos grandes núcleos linceros andaluces junto al del Doñana-Aljarafe, que pasa de 247 a 285, según los datos del censo consultados por Europa Press. Dicho asentamiento se distribuye en parte en los Parques Naturales de Cardeña (Córdoba), Andújar (Jaén) y las áreas de reintroducción de Guadalmellato y Guarrizas, uniéndose en los últimos años los espacios intermedios.
Gracias al intercambio de ejemplares que se produce entre estos núcleos ha sido posible que estas áreas conformen una única metapoblación, incluso comunicada con el área de reintroducción de Sierra Morena Oriental de Ciudad Real, hecho muy importante, ya que constituye uno de los objetivos del proyecto.
De esta manera, el crecimiento experimentado en las áreas de reintroducción de Guadalmellato y Guarrizas, la conexión con las zonas históricas y la presencia estable de ejemplares en las zonas de conexión está compensado el ajuste experimentado en Andújar-Cardeña y Doñana-Aljarafe.
Las principales amenazas para el animal siguen siendo los atropellos y, sobre todo, los efectos de la enfermedad hemorrágica vírica del conejo, presa básica del lince, que están provocando un reajuste de las poblaciones linceras de Cardeña-Andújar y Doñana-Aljarafe a la nueva capacidad de carga del medio, así como un incremento de las áreas de campeo de los felinos y de la superficie de sus territorios, con los consecuentes riesgos que esto conlleva.
Ante la disminución de las densidades de conejo, la Junta de Andalucía puso en marcha en 2013 un plan de choque en Doñana-Aljarafe y Andújar-Cardeña con repoblaciones de conejos silvestres mediante la puesta en carga de los cercados de cría de conejo construidos con LIFE anteriores. Estas repoblaciones han ayudado a frenar la caída del censo lince ibérico y están conteniendo el desplome de las poblaciones de conejo.
"ATROPELLOS VA A HABER, PERO QUE SEAN LOS MENOS POSIBLES"
Respecto a los atropellos --otros motivos de muerte como ahogamiento, disparo o peleas son anecdóticos--, aunque el número de estos ha bajado considerablemente --de 21 a 10--, esta causa sigue teniendo un efecto negativo sobre la población. En este sentido, el consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, José Fiscal, ha precisado a Europa Press que ya es "raro" que se produzcan estos sucesos en los sitios donde históricamente ha habido linces, por las medidas adoptadas en su día.
A día de hoy, los técnicos se encuentran en proceso de diagnóstico de los 'puntos negros' principales para actuar en ellos, labor en la que es fundamental la coordinación de esfuerzos entre administraciones, según Fiscal, que recuerda, con todo, que hay que ser consciente de que "atropellos va a hacer, pero hay que trabajar con responsabilidad para que sean los menos posibles".
Por otro lado, el refuerzo genético sigue dando buenos resultados. Los descendientes de los linces liberados se encuentran distribuidos por toda el área de presencia y ya se han detectado cachorros de tercera generación. Se está realizando un análisis científico de la repercusión de este refuerzo genético que aclarará los beneficios de esta acción.
El programa de recuperación concluye que la puesta en marcha del plan de choque contra los efectos de la enfermedad hemorrágica vírica y el mantenimiento de la alimentación suplementaria en los casos aprobados por el Grupo de Trabajo de Lince ibérico está garantizando la "estabilidad" y una cierta recuperación de las poblaciones de lince.
Fiscal, que este lunes ha inaugurado en la Facultad de Biología de la Universidad de Sevilla (US) el V Seminario Internacional para la Conservación del Lince Ibérico --celebrado en Sevilla del 4 al 6 de abril--, ha señalado también que se estudia la reintroducción en otros lugares, como la Sierra Norte de Sevilla o la provincia de Granada, para lo que hay que analizar si los entornos cuentan con las características adecuadas y contar con la población, aunque por regla general el lince despierta "simpatía".
UN "SÍMBOLO" DEL QUE ANDALUCÍA ES "MOTOR"
En el evento, que reúne a más de 250 representantes de colectivos y asociaciones, propietarios y gestores de fincas, técnicos, científicos y socios del LIFE+Iberlince para abordar las estrategias de reintroducción del felino más amenazado del planeta, el consejero ha recordado que a mediados de 2015 la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), gracias a los buenos resultados obtenidos, rebajó el grado de amenaza del lince ibérico de 'en peligro crítico de extinción' a 'en peligro'.
Fiscal, considerando este logro un "paso insuficiente", sostiene que esta situación, en lugar de ser motivo de relajación, para esta Consejería "supone un acicate para alcanzar otro reto", como es que el lince ibérico deje de estar considerada especie en peligro de extinción y pase a especie vulnerable, algo que "no se dará a corto plazo, pero es el objetivo: no es una cuestión de un día para otro", sino de años.
El titular andaluz de Medio Ambiente, que afirma que Andalucía seguirá siendo el "motor" del lince ibérico, ha subrayado que la estabilidad de la población andaluza es la característica más importante del resultado de los trabajos conjuntos que se han realizado desde 2002, cuando la población del animal, ya un "símbolo", no superaba los 100 ejemplares. Ésta, tras una inversión de unos 70 millones y 170 convenios de colaboración con propietarios, se ha cuadruplicado.
Ha afirmado también que la conservación del lince ibérico se tiene que ver como un factor más en la creación y generación de empleo: "siempre he defendido que las políticas de esta Consejería han de ser ambientalmente sostenibles y socialmente rentables, ha agregado.
Con el Proyecto LIFE 2006/11 se crearon en Andalucía 31 puestos de trabajo fijos --veterinarios, biólogos y auxiliares de biodiversidad-- y se generó un total de 29.740 jornales en las zonas linceras de Sierra Morena y Doñana-Aljarafe (provincias de Huelva, Córdoba y Jaén), siendo muchas de ellas áreas deprimidas para las que supuso un alivio económico.
El seminario, en cuya inauguración también ha estado presente la vicerrectora de Relaciones Institucionales de la US, Elena Cano, se estructura en conferencias, grupos de trabajo y mesas redondas, impartidas por expertos en la materia en las que se aborda, sobre todo, la situación de la especie en la Península Ibérica, en general, y en Andalucía, en particular.
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