El PSOE denuncia que la población no puede pagar porque el Ejecutivo de Rajoy no ha cumplido con la reducción del precio
V. GOMARIZ BELDA GRANADA |
Los cortes en el suministro eléctrico por impago han afectado ya a más de 80.000 personas en la provincia de Granada. Estos ciudadanos se encuentran sumidos en una situación de "pobreza energética" al no poder afrontar el encarecimiento de las tarifas de la luz, según manifestó ayer el parlamentario socialista, Miguel Castellano.
En rueda de prensa, el representante del PSOE analizó los "nefastos" efectos para los hogares y las empresas de las continuas subidas en el recibo de la luz. Un servicio "básico y vital" que puede suponer para los bolsillos de un pensionista hasta el 10% de su paga, según detalló.
"El PP emprendió una reforma energética con dos grandes objetivos como eran el de reducir el déficit tarifario de las eléctricas y abaratar el precio de la electricidad", recordó el diputado autonómico, quien añadió que la realidad es bien distinta y las sucesivas maniobras legislativas de los populares al frente del Gobierno arrojan un panorama "radicalmente opuesto".
Castellano señaló que el recibo viene determinado por el consumo y la potencia, esto es, consta de una parte fija, que considera el consumo, y otra variable, ordenada según los peajes, la distribución o el déficit de tarifa. "En función de los distintos consumos hay distintas tarifas, pero los términos de potencia están sobrevalorados, por lo que en ningún caso se prima el ahorro, sino todo lo contrario", explicó el socialista, quien precisó que el fijo del término de potencia llega a suponer la mitad del coste de la factura. De esta manera, una persona mayor que viva sola puede llegar a pagar únicamente 30 euros de consumo de un total de 75 euros del importe global del recibo.
Castellano alertó de que la nueva reforma, cuya entrada en vigor está prevista para el próximo mes de abril, arroja un panorama aún más sombrío, ya que el aumento en diciembre en un 18% del término de potencia propiciará que la supuesta rebaja de los precios del consumo no tengan incidencia alguna en las economías de los hogares.
"Además de determinar un nuevo agravio establecido por los que tienen contadores automáticos y los que tienen contadores tradicionales, la nueva reforma impone más de 1.500 tarifas, una por cada minuto, hora o circunstancia que determine el mercado", indicó el parlamentario autonómico del PSOE, quien calificó esta medida de "disparate".
En rueda de prensa, el representante del PSOE analizó los "nefastos" efectos para los hogares y las empresas de las continuas subidas en el recibo de la luz. Un servicio "básico y vital" que puede suponer para los bolsillos de un pensionista hasta el 10% de su paga, según detalló.
"El PP emprendió una reforma energética con dos grandes objetivos como eran el de reducir el déficit tarifario de las eléctricas y abaratar el precio de la electricidad", recordó el diputado autonómico, quien añadió que la realidad es bien distinta y las sucesivas maniobras legislativas de los populares al frente del Gobierno arrojan un panorama "radicalmente opuesto".
Castellano señaló que el recibo viene determinado por el consumo y la potencia, esto es, consta de una parte fija, que considera el consumo, y otra variable, ordenada según los peajes, la distribución o el déficit de tarifa. "En función de los distintos consumos hay distintas tarifas, pero los términos de potencia están sobrevalorados, por lo que en ningún caso se prima el ahorro, sino todo lo contrario", explicó el socialista, quien precisó que el fijo del término de potencia llega a suponer la mitad del coste de la factura. De esta manera, una persona mayor que viva sola puede llegar a pagar únicamente 30 euros de consumo de un total de 75 euros del importe global del recibo.
Castellano alertó de que la nueva reforma, cuya entrada en vigor está prevista para el próximo mes de abril, arroja un panorama aún más sombrío, ya que el aumento en diciembre en un 18% del término de potencia propiciará que la supuesta rebaja de los precios del consumo no tengan incidencia alguna en las economías de los hogares.
"Además de determinar un nuevo agravio establecido por los que tienen contadores automáticos y los que tienen contadores tradicionales, la nueva reforma impone más de 1.500 tarifas, una por cada minuto, hora o circunstancia que determine el mercado", indicó el parlamentario autonómico del PSOE, quien calificó esta medida de "disparate".
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