La tasa de parcialidad ha crecido en cuatro años de un 21,3 a un 28,9% Más de 2.300 granadinas mayores de 44 años y sin experiencia laboral buscan trabajo por primera vez
GUADALUPE S. MALDONADO GRANADA
La igualdad no ha llegado al mercado de trabajo. Ni de lejos. Basta echar un vistazo a los principales indicadores laborales para constatar que la crisis ha supuesto un antes y un después al proceso de incorporación de la mujer al mercado de trabajo. No porque la haya frenado -de hecho, el número de mujeres inactivas se ha reducido considerablemente desde que comenzaron los problemas económicos-, sino porque ha impuesto la precariedad y la temporalidad. La caída de la actividad en algunos de los sectores más feminizados del tejido productivo granadino -como la hostelería o el comercio-, o los recortes en materia de dependencia -que obligan a muchas mujeres a compatibilizar el cuidado a familiares y un empleo- son algunos de los factores que han contribuido a que se dispare la tasa de contratos parciales.
Según la información de la última Encuesta de Población Activa (EPA), casi tres de cada diez mujeres trabajadoras tienen que conformarse con un contrato a tiempo parcial. De las 120.100 mujeres ocupadas , 34.700 (28,9%) tienen un contrato a tiempo parcial. Esta cifra es un 25,7% mayor que la de hace cuatro años, ya que en 2009 la tasa de parcialidad de los contratos de mujeres era del 21,3% y afectaba a 27.600 trabajadoras. La incidencia de la crisis en este indicador es innegable: mientras que el número de mujeres ocupadas se ha reducido un 7,2% y el de las trabajadoras a tiempo completo lo ha hecho un 16,3%, el de contratación parcial no ha hecho más que crecer.
Igual ocurre con la temporalidad. De las 100.100 mujeres asalariadas de la provincia -el resto corresponde a autoempleo-, un 36,5% tiene contratos temporales, mientras que en el caso de los hombres esta tasa de temporalidad es cinco puntos inferior, del 31,9%.
Ayer los líderes de los sindicatos UGT y CCOO alertaron durante la manifestación del Día Internacional de la Mujer de que el Gobierno se ha propuesto que la mujer "vuelva a casa". ¿Cómo? Con una normativa laboral y social que hace poco para consagrar la incorporación de la mujer al mundo del trabajo. "Nos deja arrumbadas para desarrollar los trabajos más precarios, con peores jornadas y salarios", indicó la secretaria general de UGT de Granada, Manuela Martínez. Por su parte, el secretario general de CCOO de Granada, Ricardo Flores, confirmó que "las mujeres están en muy peores condiciones que el resto de los trabajadores, a pesar de que son más del 50% de los trabajadores", destacando el hecho de que la brecha salarial entre hombres y mujeres sea "superior al 20%".
Con todo, aunque sea por peores trabajos, peores jornadas y peores salarios, son miles las mujeres que con la crisis se han visto obligadas a salir al mercado de trabajo para conseguir algún ingreso que sostenga a la familia. Según los datos de la EPA, el número de mujeres que se declaran inactivas por ejercer labores del hogar (67.400) se ha reducido un 37,9% desde el año 2005, cuando se contabilizaban en Granada 108.700 mujeres inactivas. En ocho años, por tanto, 41.300 mujeres granadinas se han lanzado al mercado laboral para intentar conseguir un empleo.
Aunque en muchos casos se han topado con un muro infranqueable. Según los últimos datos del paro publicados por el Servicio de Empleo Público Estatal, el 64,2% del colectivo de parados sin empleo anterior (10.958 personas que se incorporan por primera vez al mercado de trabajo) está formado por mujeres. De ellas, 2.333, un 33,2%, son demandantes mayores de 44 años que nunca antes han trabajado y que buscan un empleo para llevar algún ingreso a su hogar. Esta cifra es un 77,6% superior a la de hace cuatro años, cuando apenas 1.313 mujeres mayores de 44 años se encontraban en la difícil situación de buscar empleo por primera vez en un mercado de trabajo que no tiene hueco para ellas.
Según la información de la última Encuesta de Población Activa (EPA), casi tres de cada diez mujeres trabajadoras tienen que conformarse con un contrato a tiempo parcial. De las 120.100 mujeres ocupadas , 34.700 (28,9%) tienen un contrato a tiempo parcial. Esta cifra es un 25,7% mayor que la de hace cuatro años, ya que en 2009 la tasa de parcialidad de los contratos de mujeres era del 21,3% y afectaba a 27.600 trabajadoras. La incidencia de la crisis en este indicador es innegable: mientras que el número de mujeres ocupadas se ha reducido un 7,2% y el de las trabajadoras a tiempo completo lo ha hecho un 16,3%, el de contratación parcial no ha hecho más que crecer.
Igual ocurre con la temporalidad. De las 100.100 mujeres asalariadas de la provincia -el resto corresponde a autoempleo-, un 36,5% tiene contratos temporales, mientras que en el caso de los hombres esta tasa de temporalidad es cinco puntos inferior, del 31,9%.
Ayer los líderes de los sindicatos UGT y CCOO alertaron durante la manifestación del Día Internacional de la Mujer de que el Gobierno se ha propuesto que la mujer "vuelva a casa". ¿Cómo? Con una normativa laboral y social que hace poco para consagrar la incorporación de la mujer al mundo del trabajo. "Nos deja arrumbadas para desarrollar los trabajos más precarios, con peores jornadas y salarios", indicó la secretaria general de UGT de Granada, Manuela Martínez. Por su parte, el secretario general de CCOO de Granada, Ricardo Flores, confirmó que "las mujeres están en muy peores condiciones que el resto de los trabajadores, a pesar de que son más del 50% de los trabajadores", destacando el hecho de que la brecha salarial entre hombres y mujeres sea "superior al 20%".
Con todo, aunque sea por peores trabajos, peores jornadas y peores salarios, son miles las mujeres que con la crisis se han visto obligadas a salir al mercado de trabajo para conseguir algún ingreso que sostenga a la familia. Según los datos de la EPA, el número de mujeres que se declaran inactivas por ejercer labores del hogar (67.400) se ha reducido un 37,9% desde el año 2005, cuando se contabilizaban en Granada 108.700 mujeres inactivas. En ocho años, por tanto, 41.300 mujeres granadinas se han lanzado al mercado laboral para intentar conseguir un empleo.
Aunque en muchos casos se han topado con un muro infranqueable. Según los últimos datos del paro publicados por el Servicio de Empleo Público Estatal, el 64,2% del colectivo de parados sin empleo anterior (10.958 personas que se incorporan por primera vez al mercado de trabajo) está formado por mujeres. De ellas, 2.333, un 33,2%, son demandantes mayores de 44 años que nunca antes han trabajado y que buscan un empleo para llevar algún ingreso a su hogar. Esta cifra es un 77,6% superior a la de hace cuatro años, cuando apenas 1.313 mujeres mayores de 44 años se encontraban en la difícil situación de buscar empleo por primera vez en un mercado de trabajo que no tiene hueco para ellas.
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