- Expertos en Psicología aseguran que se diagnostican más depresiones en otoño-invierno por la escasez de luz, que puede producir el denominado 'Trastorno Afectivo Estacional'
La luna le ha 'robado' una hora y 26 minutos al sol en Pamplona en el último mes, según los datos del Observatorio Astronómico Nacional. De modo que, si el 19 de septiembre amanecía en la capital navarra a las 7.50 horas y anochecía a las 20.10 horas; hoy, 19 de octubre, 'Lorenzo' asoma a las 8.24 horas y se esconde a las 19.18 horas.
Pero la 'lucha' por el reinado del firmamento no quedará aquí y la luna se impondrá cada vez más, sobre todo a partir del próximo sábado 25 de octubre, cuando los relojes se retrasarán una hora (a las 3.00 serán las 2.00). Ese día la noche se echará encima a las 18.09 horas, de manera que durante el próximo mes, hasta el 19 de noviembre, los pamploneses perderán 2 horas y 17 minutos de esta fuente de energía.
MÁS DEPRESIONES
¿Puede esta 'pugna' entre la noche y el día afectarnos? "Diagnosticamosmás depresiones en la época de otoño e invierno que en primavera-verano. La luminosidad y el clima influyen de un modo considerable", responde el psicólogo clínico y profesor de la Universidad de NavarraDavid Ramírez Castillo.
Cuando se produce el cambio al horario de verano, muchas personas son propensas a sufrir el denominado 'Trastorno Afectivo Estacional' o 'depresión de invierno', que genera tristeza, baja autoestima, mayor sensibilidad e irritabilidad, insatisfacción y culpa, pérdida de interés, aumento del apetito de carbohidratos y dulces, cansancio y fatiga.
Según explica Ramírez, esto se debe a que los seres vivos nos regimos por el ritmo circadiano, que marca 8 horas de sueño y 16 de vigilia. Es un reloj biológico que nos anuncia cuándo debemos dormir y cuándo estar despiertos. El acortar las horas de luz, y por tanto, el ajuste personal al nuevo horario, produce cambios en los niveles de las hormonas melatonina y serotonina, que se encargan de los ciclos de sueño-vigilia, la energía de la que disponemos y el estado de ánimo.
"En la depresión estacional, es habitual la disminución de secreción de melatonina, que regula la hormona del estrés y defensa del organismo, llamada cortisol, cuya secreción durante esta época se produce de forma más constante y en exceso. Esta sobresecreción afecta a los patrones de sueño, produciendo insomnio, angustia y nerviosismo y tristeza generalizada. Los síntomas asociados a este trastorno pueden durar entre 3 y 10 días", profundiza.
EL MÁS CORTO VS. EL MÁS LARGO
Justo dentro de dos meses Pamplona vivirá su primer día más corto, el19 de diciembre, con tan solo 9 horas y 1 minuto de sol, una circunstancia que se repetirá el 21, 23 y 25 de diciembre. Durante estos cuatro días, el astro rey alumbrará 6 horas y 20 minutos menos que el21 de junio, el día más largo.
Los amaneceres más 'perezosos', a las 8.37 horas, se dan entre el 28 de diciembre y el 9 de enero, mientras que las auroras más 'madrugadoras', a las 6.27 horas, son el 15 y 16 de junio. ¿Y los ocasosmás tardíos? Del 21 de junio al 3 de julio, a las 21.49 horas. Por contra, los más tempraneros suceden del 7 al 11 de diciembre
Pero la 'lucha' por el reinado del firmamento no quedará aquí y la luna se impondrá cada vez más, sobre todo a partir del próximo sábado 25 de octubre, cuando los relojes se retrasarán una hora (a las 3.00 serán las 2.00). Ese día la noche se echará encima a las 18.09 horas, de manera que durante el próximo mes, hasta el 19 de noviembre, los pamploneses perderán 2 horas y 17 minutos de esta fuente de energía.
MÁS DEPRESIONES
¿Puede esta 'pugna' entre la noche y el día afectarnos? "Diagnosticamosmás depresiones en la época de otoño e invierno que en primavera-verano. La luminosidad y el clima influyen de un modo considerable", responde el psicólogo clínico y profesor de la Universidad de NavarraDavid Ramírez Castillo.
Cuando se produce el cambio al horario de verano, muchas personas son propensas a sufrir el denominado 'Trastorno Afectivo Estacional' o 'depresión de invierno', que genera tristeza, baja autoestima, mayor sensibilidad e irritabilidad, insatisfacción y culpa, pérdida de interés, aumento del apetito de carbohidratos y dulces, cansancio y fatiga.
Según explica Ramírez, esto se debe a que los seres vivos nos regimos por el ritmo circadiano, que marca 8 horas de sueño y 16 de vigilia. Es un reloj biológico que nos anuncia cuándo debemos dormir y cuándo estar despiertos. El acortar las horas de luz, y por tanto, el ajuste personal al nuevo horario, produce cambios en los niveles de las hormonas melatonina y serotonina, que se encargan de los ciclos de sueño-vigilia, la energía de la que disponemos y el estado de ánimo.
"En la depresión estacional, es habitual la disminución de secreción de melatonina, que regula la hormona del estrés y defensa del organismo, llamada cortisol, cuya secreción durante esta época se produce de forma más constante y en exceso. Esta sobresecreción afecta a los patrones de sueño, produciendo insomnio, angustia y nerviosismo y tristeza generalizada. Los síntomas asociados a este trastorno pueden durar entre 3 y 10 días", profundiza.
EL MÁS CORTO VS. EL MÁS LARGO
Justo dentro de dos meses Pamplona vivirá su primer día más corto, el19 de diciembre, con tan solo 9 horas y 1 minuto de sol, una circunstancia que se repetirá el 21, 23 y 25 de diciembre. Durante estos cuatro días, el astro rey alumbrará 6 horas y 20 minutos menos que el21 de junio, el día más largo.
Los amaneceres más 'perezosos', a las 8.37 horas, se dan entre el 28 de diciembre y el 9 de enero, mientras que las auroras más 'madrugadoras', a las 6.27 horas, son el 15 y 16 de junio. ¿Y los ocasosmás tardíos? Del 21 de junio al 3 de julio, a las 21.49 horas. Por contra, los más tempraneros suceden del 7 al 11 de diciembre
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