Colectivos con discapacidad pueden contemplar La Charca de Suárez a través de códigos QR y otras medidas de accesibilidad
ROSA FERNÁNDEZ MOTRIL 
"La Charca de Suárez con más de 160 especies de aves se ha convertido en el humedal más importante de la Costa de Granada, gracias a los esfuerzos desinteresados de personas e instituciones que desde el principio apostaron por este proyecto". A partir de ahora, este mensaje que reza en el panel de entrada del humedal puede también ser oído en las palabras del periodista motrileño Alberto Feixas, que ha prestado su voz en off, para que los invidentes, a través de un código QR y a simple golpe de móvil, puedan conocer en detalle este espacio.
Pero no sólo este colectivo de personas discapacitadas se ha beneficiado de las últimas mejoras. La teniente alcalde delegada de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Motril, Ángeles López Cano, explicó que en este proyecto se han tenido en cuenta las opiniones de once asociaciones -Conecta, APAI, Amdical, ONCE, Aprosmo, Asotral, Neuro-Afic, Adimo, Agrafim, Cometa Blanca y Contigo Motril- para mejorar la accesibilidad de esta reserva concertada.
López Cano, que estuvo acompañada en la presentación de este proyecto por la alcaldesa de la ciudad, Luisa García Chamorro, y por el concejal de Medio Ambiente, José Luis Chica, explicó que "la charca de los sentidos" es una iniciativa que engloba una serie de aspectos para mejorar la accesibilidad de las personas con discapacidad. Además de los códigos QR, paneles con pictogramas hacen que las personas con espectro autista puedan tener las mismas oportunidades de conocer el humedal. Se ha conseguido rebajar las ventanas de los observatorios, haciéndolos más accesibles para que los que van en silla de ruedas puedan contemplar las aves y también los dípticos de información se han traducido al sistema de lenguaje braille.
En el panel de la entrada, llaman la atención dos pictogramas. En el de la izquierda, en la parte superior, se ve un dibujo que representa la charca con otros tres abajo: una casa, muchos animales y plantas. Con este lenguaje tan sencillo se quiere transmitir a las personas con trastorno autista de la importancia del humedal. En el otro mensaje y con la misma facilidad se informa a través de dibujos que no se toquen los animales, ni los insectos ni las plantas.
La responsable del área de Asuntos Sociales comentó que "se trata de un proyecto que nació hace un año, y que ahora está ya casi al 90%, por lo que nos tenemos que felicitar de que sea el primer humedal accesible a personas con discapacidad del mundo que pone a Motril en el primer lugar del mundo, pues no tenemos constancia de que exista otro tan accesible".
El concejal de Medio Ambiente recordó que "hemos sido reconocidos con la bandera verde, por lo que aprovechó la ocasión para invitar a todos los ciudadanos a conocerla.
García Chamorro destacó que "un Motril sin barreras es más que un lema, es un compromiso y con estas acciones se demuestra que cumplimos con ellos, por lo que felicito a todos los trabajadores y a los técnicos y todos los colectivos para que esta iniciativa se convierta en realidad".
Además, el Ayuntamiento pone a disposición de los grupos que así lo solicitan un intérprete de lengua de signos y se está formando a los monitores y educadores ambientales que trabajan en la reserva en el lenguaje de signos y el alfabeto dactilológico. Próximamente, la Charca contará también con talleres de educación ambiental dirigidos a colectivos de discapacitados, se instalarán bancos para permitir el descanso en tramos largos del recorrido y se trazará una vereda perceptible en el suelo para que las personas invidentes puedan guiarse con su bastón.
Pero no sólo este colectivo de personas discapacitadas se ha beneficiado de las últimas mejoras. La teniente alcalde delegada de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Motril, Ángeles López Cano, explicó que en este proyecto se han tenido en cuenta las opiniones de once asociaciones -Conecta, APAI, Amdical, ONCE, Aprosmo, Asotral, Neuro-Afic, Adimo, Agrafim, Cometa Blanca y Contigo Motril- para mejorar la accesibilidad de esta reserva concertada.
López Cano, que estuvo acompañada en la presentación de este proyecto por la alcaldesa de la ciudad, Luisa García Chamorro, y por el concejal de Medio Ambiente, José Luis Chica, explicó que "la charca de los sentidos" es una iniciativa que engloba una serie de aspectos para mejorar la accesibilidad de las personas con discapacidad. Además de los códigos QR, paneles con pictogramas hacen que las personas con espectro autista puedan tener las mismas oportunidades de conocer el humedal. Se ha conseguido rebajar las ventanas de los observatorios, haciéndolos más accesibles para que los que van en silla de ruedas puedan contemplar las aves y también los dípticos de información se han traducido al sistema de lenguaje braille.
En el panel de la entrada, llaman la atención dos pictogramas. En el de la izquierda, en la parte superior, se ve un dibujo que representa la charca con otros tres abajo: una casa, muchos animales y plantas. Con este lenguaje tan sencillo se quiere transmitir a las personas con trastorno autista de la importancia del humedal. En el otro mensaje y con la misma facilidad se informa a través de dibujos que no se toquen los animales, ni los insectos ni las plantas.
La responsable del área de Asuntos Sociales comentó que "se trata de un proyecto que nació hace un año, y que ahora está ya casi al 90%, por lo que nos tenemos que felicitar de que sea el primer humedal accesible a personas con discapacidad del mundo que pone a Motril en el primer lugar del mundo, pues no tenemos constancia de que exista otro tan accesible".
El concejal de Medio Ambiente recordó que "hemos sido reconocidos con la bandera verde, por lo que aprovechó la ocasión para invitar a todos los ciudadanos a conocerla.
García Chamorro destacó que "un Motril sin barreras es más que un lema, es un compromiso y con estas acciones se demuestra que cumplimos con ellos, por lo que felicito a todos los trabajadores y a los técnicos y todos los colectivos para que esta iniciativa se convierta en realidad".
Además, el Ayuntamiento pone a disposición de los grupos que así lo solicitan un intérprete de lengua de signos y se está formando a los monitores y educadores ambientales que trabajan en la reserva en el lenguaje de signos y el alfabeto dactilológico. Próximamente, la Charca contará también con talleres de educación ambiental dirigidos a colectivos de discapacitados, se instalarán bancos para permitir el descanso en tramos largos del recorrido y se trazará una vereda perceptible en el suelo para que las personas invidentes puedan guiarse con su bastón.
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