ROSA FERNÁNDEZ
La conexión por autovía ha supuesto un gran avance y los distintos sectores coinciden en que la situación ha mejorado con la llegada de la A-7. |
De la Costa Tropical siempre se ha dicho que es la tierra de las potencialidades. Sus carencias siempre han estado marcadas por la falta de infraestructuras. Por eso, la conexión por autovía ha supuesto un gran avance y, aunque todavía falta el tren o la Presa de Rules, los distintos sectores coinciden en que la situación ha mejorado con la llegada de la A-7.
Desde que en octubre de 2015 se inaugurara por completo el recorrido granadino de la Autovía del Mediterráneo han cambiado muchas cosas y, aunque se ha producido un salto hacia adelante en general para todas las poblaciones de manera paulatina según los tramos se iban conectando al mapa de comunicación nacional, los que más han notado estas mejoras han sido los habitantes de la Costa oriental.
El presidente Rajoy y la ministra Pastor, en la inauguración del último tramo de la A-7 en Granada en octubre de 2015 |
Así, en el municipio de Gualchos-Castell de Ferro ha habido un importante repunte de venta de viviendas y ya se está trabajando en que allí se construyan nuevos hoteles. La alcaldesa de la localidad, Toñi Antequera, reconoce que han notado "una mayor afluencia de visitantes" no sólo durante el verano, sino también los fines de semana del resto del año. Desde que esta localidad está conectada por autovía, ya no se piensa sólo en el futuro del sector hortofrutícola, tan importante en la zona, sino que también se quiere desarrollar el turístico y se ha pensado incluso en una zona hotelera con vistas al mar.
Si se echa la vista hacia atrás, antes era preciso que un conductor llegara a Salobreña, para continuar por la N-340 en un trayecto que se hacía interminable por los atascos de Torrenueva y tortuosa por las curvas que venían detrás. Sin embargo, ahora esta población está comunicada con ciudades como Motril en apenas unos minutos, pero es que también "bajan muchos de Granada, Jaén o Madrid".
El Puerto de Motril, otro de los grandes beneficiados |
Así, existe una demanda de viviendas, como han notado las inmobiliarias locales, pero también de plazas hoteleras, de las que el municipio adolece. Tan sólo hay un establecimiento de una estrella y dos hostales. De hecho existen dos franjas hoteleras previstas, que se ubicarían en primera línea de playa, y que se sitúan en la zona del camping Las Palmeras hacia la Punta del Rincón y, la otra, en la playa de Cambriles.
En la Entidad Local de Carchuna-Calahonda también han notado "más vida" desde que se conectó con la A-7. De hecho, en verano sus calles se llenan de negocios, pero también hay apartamentos vacacionales de visitantes de Motril o Granada que se van cada fin de semana a este anejo durante todo el año para disfrutar de paseos por el mar y del buen tiempo.
El cartel que marca que ya se puede ir a Motril sin pasar por Benaudalla. |
En el camping Don Cactus ubicado en la playa de Carchuna también celebran los buenos tiempos de ocupación que ahora les está tocando vivir. "Para nosotros ha sido fundamental, ya que nuestros clientes van tirando de una caravana. Además, la autovía nos ha dejado la Alhambra a una hora, cuando antes había algunas épocas del año en las que llegaba a estar a 4 horas o que se empleaba hora y media tan sólo en el trayecto hasta Motril", comenta su gerente, Álvaro García.
En la parte oriental, donde se encuentran la mayoría de plazas hoteleras, a pesar de que se abriera la A-7 en su totalidad en octubre de 2015, la apertura de Lobres-Taramay y Gualdalfeo-Lobres, de la que ahora se cumplen 3 años, coincide -y no parece que sea casualidad- con el repunte del sector turístico en la Costa Tropical, que ha seguido en sentido ascendente durante los siguientes veranos. De hecho, algunos negocios que arrastraban deudas ya por fin entraron en rentabilidad, después de años de penurias.
"Las habitaciones ya se están pagando conforme a su calidad, y no hay por qué seguir bajando precios, cubriendo solamente costes o realizando ofertas que, al fin y al cabo, no suponían más que atraer a viajeros para que no se fueran a otros sitios, pero que no representaban negocio", comenta el gerente del Hotel Best Salobreña, Manolo Martín.
Sin salir del sector turístico, a los chiringuitos se les han sumado varias circunstancias. Al momento económico -común a todos- se le ha unido el avance en las concesiones y, por supuesto, la conexión por autovía. Todo ello sin duda ha contribuido a que vivan también una época dulce. De las declaraciones en las que apenas cubrían costes para hacer frente a los gastos del año, el presidente de la Asociación de Chiringuitos de la Costa Tropical, Francisco Trujillo, ha pasado a hablar de ejercicios "buenos" y "muy buenos" y destaca además que "con los nuevos chiringuitos se ha logrado dar un empujón a la desestacionalización del turismo" en el litoral granadito, una de las grandes asignaturas pendientes.
En cuanto a las previsiones para este verano, también esperan registrar resultados positivos, "si el tiempo lo permite", como los ha habido en Semana Santa (indicador tradicional del periodo estival) o los puentes.
El presidente de la Asociación de Hoteleros de la Costa Tropical, Rafael Lamelas, desde la zona oriental celebra que les vayan mejor las cosas al litoral oriental, de la que ya vaticinó cuando se abrió la autovía, que ésta iba a "equilibrar mejor ambas zonas". Pero también destaca la importancia para toda la comarca de que esté conectada con el levante, tan dinámico en el sector turístico, puesto que en localidades como Benidorm, Alicante o la misma Murcia, tan cercana a Almería, hay un flujo de turistas muy importante y "ahora ya las malas carreteras ya no serán excusa, para los que quieran continuar de ruta para conocer esta zona".
La alcaldesa de Almuñécar, Trinidad Herrera, fue una de las primeras que habló públicamente de que "la unión viaria completa de toda la zona" supondría una mejora de las "perspectivas" para "continuar trabajando al unísono", de manera que la proyección turística de la zona se hiciera al unísono.
Efectivamente, durante estos años se han llevado a cabo iniciativas de promoción conjunta que, aunque también se hicieron antes, eran menos efectivas cuando en un mundo globalizado un turista difundía que había permanecido atrapado durante horas en un atasco en la Costa Tropical.
Incluso se ha creado el eje Motril-Granada. O se ha hecho la bajada en bañador desde Sierra Nevada. Todo esto es posible porque la distancia marcada por unas carreteras tercermundistas terminó. El Corredor Mediterráneo por carretera cuenta ya con 1.440 kilómetros de longitud desde Cádiz hasta la frontera con Francia y la Costa Tropical está por fin integrada en él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario