El número de voluntarios también sigue al alza y sube en un 14,43%, según los datos de la Memoria Anual de 2012
L.V/ A.R. GRANADA
Las acciones solidarias siguen siendo la base de muchas instituciones, una de ellas es Cáritas de Granada. Ayer el director de Cáritas Diocesana, Javier de Benavides, presentó la memoria de 2012, un documento que muestra que fueron más de 16.000 personas las que se atendieron durante el último año.
Sin embargo, este número queda muy por debajo de la cifra real y son muchas más las personas que son atendidas. Esto es debido a que no todas las Cáritas Parroquiales tienen contabilizada a la gente a la que ayudan y porque los voluntarios tienen la convicción de trabajar anónimamente, según afirmó José Martínez, antiguo director de la institución.
Entre los datos más relevantes se encuentran el aumento de solidaridad y ayuda. Martínez hizo hincapié en el incremento de un 23,12% en el dinero aportado por donantes y socios, pasando de 1.532.720 euros en 2011 a 1.887.182 en 2012.
Por su parte, el incremento del 14,43% en el número de voluntarios es otro de los pilares que se presentaron en esta memoria. La cuantía económica suministrada desde las Cáritas Parroquiales para atender a personas necesitadas ha ascendido a 530.000 euros en el año 2012.
Sin embargo, en la cara opuesta a la solidaridad o la ayuda se encuentra la situación de empeoramiento que sufre Cáritas para emplear a las personas más necesitadas a través del servicio Laboral-Agencia de Colocación.
Esta opción que está autorizado por el Servicio Andaluz de Empleo derivó ofertas a 189 personas, un 16% menos que en el año anterior en el que se beneficiaron un total de 226 personas.
A pesar de este descenso, Cáritas afirmó que pretenden "seguir redoblando esfuerzos" y que este año han contabilizado casi 3.500 intervenciones realizadas desde sus servicios de orientación laboral y 1.250 desde el programa de intermediación laboral. Por su parte, en la provincia siguen siendo muchas las empresas que escogen a alumnos de Cáritas para que realicen prácticas laborales con las que tener una oportunidad en el mercado laboral.
En otros temas se apuntó que la inmigración está en descenso en los últimos años. Las personas atendidas y registradas en los programas de inmigración ha pasado de 475 en 2011 a 462 en 2012, unas cifras que muestran una caída de casi un 3%.
El documento presentado muestra más de 40 páginas en las que queda plasmado todo el trabajo que hace Cáritas, un gran abanico que está formado por talleres de inclusión sociolaboral, centros para mayores y discapacitados, el trabajo con las personas sin hogar o los programas de inmigrantes, comunidad gitana, mujer, la infancia y la juventud.
Finalmente Benavides afirmó que en Cáritas el trabajo va mucho más allá de lo que se contabiliza ya que "aún mucho de nuestro trabajo se hace calladamente, por aquello de que no se entere tu mano izquierda de lo que hace tu mano derecha".
Sin embargo, este número queda muy por debajo de la cifra real y son muchas más las personas que son atendidas. Esto es debido a que no todas las Cáritas Parroquiales tienen contabilizada a la gente a la que ayudan y porque los voluntarios tienen la convicción de trabajar anónimamente, según afirmó José Martínez, antiguo director de la institución.
Entre los datos más relevantes se encuentran el aumento de solidaridad y ayuda. Martínez hizo hincapié en el incremento de un 23,12% en el dinero aportado por donantes y socios, pasando de 1.532.720 euros en 2011 a 1.887.182 en 2012.
Por su parte, el incremento del 14,43% en el número de voluntarios es otro de los pilares que se presentaron en esta memoria. La cuantía económica suministrada desde las Cáritas Parroquiales para atender a personas necesitadas ha ascendido a 530.000 euros en el año 2012.
Sin embargo, en la cara opuesta a la solidaridad o la ayuda se encuentra la situación de empeoramiento que sufre Cáritas para emplear a las personas más necesitadas a través del servicio Laboral-Agencia de Colocación.
Esta opción que está autorizado por el Servicio Andaluz de Empleo derivó ofertas a 189 personas, un 16% menos que en el año anterior en el que se beneficiaron un total de 226 personas.
A pesar de este descenso, Cáritas afirmó que pretenden "seguir redoblando esfuerzos" y que este año han contabilizado casi 3.500 intervenciones realizadas desde sus servicios de orientación laboral y 1.250 desde el programa de intermediación laboral. Por su parte, en la provincia siguen siendo muchas las empresas que escogen a alumnos de Cáritas para que realicen prácticas laborales con las que tener una oportunidad en el mercado laboral.
En otros temas se apuntó que la inmigración está en descenso en los últimos años. Las personas atendidas y registradas en los programas de inmigración ha pasado de 475 en 2011 a 462 en 2012, unas cifras que muestran una caída de casi un 3%.
El documento presentado muestra más de 40 páginas en las que queda plasmado todo el trabajo que hace Cáritas, un gran abanico que está formado por talleres de inclusión sociolaboral, centros para mayores y discapacitados, el trabajo con las personas sin hogar o los programas de inmigrantes, comunidad gitana, mujer, la infancia y la juventud.
Finalmente Benavides afirmó que en Cáritas el trabajo va mucho más allá de lo que se contabiliza ya que "aún mucho de nuestro trabajo se hace calladamente, por aquello de que no se entere tu mano izquierda de lo que hace tu mano derecha".
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