Los fuertes vientos que azotaban la comarca dificultaron la extinción, en la que participaron Bomberos de Cádiar, de Motril y de Granada
JUANJO ROMERO ÓRGIVA |
Los vecinos de la localidad de Órgiva vivieron anoche una auténtica pesadilla tras originarse cuatro incendios prácticamente a la misma hora y en diferentes zonas del término municipal. Las zonas afectadas fueron debajo del castillete en Cerro Negro; bajo el cementerio; cerca del anejo de Bayacas en una finca de olivos y otro foco en la zona de Sortes. Hasta la zona de los incendios se desplazaron dotaciones de los bomberos de Cádiar y Motril.
Los incendios comenzaron sobre las nueve de la noche y las primeras hipótesis que se barajan es que pudieran originarse tras la caída de alguna línea eléctrica según los testimonios de los vecinos, quienes aseguraban haber escuchado fuertes chispazos.
El fuerte viento que azotaba a esa hora la comarca alpujarreña dificultó las tareas de extinción de los incendios. La alcaldesa de la localidad, María Ángeles Blanco, aseguraba que "nos tememos lo peor, que los incendios lleguen a más por culpa del viento".
Aunque Órgiva no fue el único municipio de la Alpujarra afectado por incendios, en el pago de Aldahayar, en el término municipal de Bérchules, se originó un quinto incendio, una zona que linda con Narila y Cádiar y donde hay apartamentos rurales y cortijos, sin que hubiera constancia de desalojos.
Una noche de pesadilla la que se vivió en la Alpujarra, con los fuertes vientos que dejaron algunas zonas de la comarca sin luz. En Bérchules por ejemplo, según señalaba el alcalde, Ricardo Zapata, "por culpa de la caída de un enorme castaño en el kilómetro 24 en el barranco del duende junto al hotel Los Bérchules, ha dejado la carretera del pueblo prácticamente cortada."
Al cierre de esta edición se habían controlado todos los focos menos el del Cerro Negro, donde los operarios de Cádiar, Motril y Granada seguían trabajando. Hoy en la capital, se espera una jornada nubosa, con precipitaciones que acompañarán hasta el próximo lunes. Las temperaturas oscilarán entre los siete y los quince grados.
Los incendios comenzaron sobre las nueve de la noche y las primeras hipótesis que se barajan es que pudieran originarse tras la caída de alguna línea eléctrica según los testimonios de los vecinos, quienes aseguraban haber escuchado fuertes chispazos.
El fuerte viento que azotaba a esa hora la comarca alpujarreña dificultó las tareas de extinción de los incendios. La alcaldesa de la localidad, María Ángeles Blanco, aseguraba que "nos tememos lo peor, que los incendios lleguen a más por culpa del viento".
Aunque Órgiva no fue el único municipio de la Alpujarra afectado por incendios, en el pago de Aldahayar, en el término municipal de Bérchules, se originó un quinto incendio, una zona que linda con Narila y Cádiar y donde hay apartamentos rurales y cortijos, sin que hubiera constancia de desalojos.
Una noche de pesadilla la que se vivió en la Alpujarra, con los fuertes vientos que dejaron algunas zonas de la comarca sin luz. En Bérchules por ejemplo, según señalaba el alcalde, Ricardo Zapata, "por culpa de la caída de un enorme castaño en el kilómetro 24 en el barranco del duende junto al hotel Los Bérchules, ha dejado la carretera del pueblo prácticamente cortada."
Al cierre de esta edición se habían controlado todos los focos menos el del Cerro Negro, donde los operarios de Cádiar, Motril y Granada seguían trabajando. Hoy en la capital, se espera una jornada nubosa, con precipitaciones que acompañarán hasta el próximo lunes. Las temperaturas oscilarán entre los siete y los quince grados.
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