La campaña se inició a principios de agosto Cada vez más usuarios respetan la norma que impide reservar sitios en la playa
R. FERNÁNDEZ SALOBREÑA
Una de las imágenes más características de la costa granadina, las sombrillas a primera hora de la mañana para pillar el mejor lugar en la playa, empiezan a ser historia. Esa es la intención del Ayuntamiento de Salobreña y por eso mismo han retirado ya un centenar de sombrillas.
El concejal de Playas del Ayuntamiento de Salobreña, Manuel Guirado, señaló ayer que en las últimas semanas el personal municipal ha continuado con los operativos de retirada de sombrillas o hamacas que se encontraban sin sus propietarios, reservando espacio en primera línea de costa. Desde que se inició esta campaña a comienzos de agosto, se han retirado en torno a un centenar de sombrillas y otras tantas hamacas, que en su gran mayoría no son recuperadas por sus dueños, ya que ello implica el pago de una tasa de 30 euros, cantidad mucho superior a lo que costaría comprar otra nueva. Sí se han dado algunos casos en que han presentado reclamaciones y se les han devuelto los enseres.
Guirado destacó que "gracias a estas medidas los usuarios de las playas ya están conociendo la norma, por lo que cada vez la están respetando más y se están concienciando de que esta práctica no está permitida en el municipio de Salobreña".
Según informaron desde el Ayuntamiento de la Villa, el litoral salobreñero también sigue incrementando sus infraestructuras, últimamente para mejorar la información sobre los servicios que ofrecen las playas del municipio a los usuarios, y también sobre las obligaciones de estos para un mejor uso de este espacio público. De ahí que hayan instalado cinco carteles escritos en tres idiomas que se han situado en las playas de La Guardia, El Peñón, La Charca, El Molino y Punta del Río.
Junto a la información sobre los equipamientos y servicios que ofrecen las playas de Salobreña -tales como salvamento, duchas, baños o torretas, entre otros-, los carteles incluyen también un decálogo de buenas prácticas que se han establecido desde la Concejalía de Playas para propiciar el respeto. El Consistorio ha publicado también en su página web una carta de servicios con diversa información sobre las playas.
El concejal de Playas del Ayuntamiento de Salobreña, Manuel Guirado, señaló ayer que en las últimas semanas el personal municipal ha continuado con los operativos de retirada de sombrillas o hamacas que se encontraban sin sus propietarios, reservando espacio en primera línea de costa. Desde que se inició esta campaña a comienzos de agosto, se han retirado en torno a un centenar de sombrillas y otras tantas hamacas, que en su gran mayoría no son recuperadas por sus dueños, ya que ello implica el pago de una tasa de 30 euros, cantidad mucho superior a lo que costaría comprar otra nueva. Sí se han dado algunos casos en que han presentado reclamaciones y se les han devuelto los enseres.
Guirado destacó que "gracias a estas medidas los usuarios de las playas ya están conociendo la norma, por lo que cada vez la están respetando más y se están concienciando de que esta práctica no está permitida en el municipio de Salobreña".
Según informaron desde el Ayuntamiento de la Villa, el litoral salobreñero también sigue incrementando sus infraestructuras, últimamente para mejorar la información sobre los servicios que ofrecen las playas del municipio a los usuarios, y también sobre las obligaciones de estos para un mejor uso de este espacio público. De ahí que hayan instalado cinco carteles escritos en tres idiomas que se han situado en las playas de La Guardia, El Peñón, La Charca, El Molino y Punta del Río.
Junto a la información sobre los equipamientos y servicios que ofrecen las playas de Salobreña -tales como salvamento, duchas, baños o torretas, entre otros-, los carteles incluyen también un decálogo de buenas prácticas que se han establecido desde la Concejalía de Playas para propiciar el respeto. El Consistorio ha publicado también en su página web una carta de servicios con diversa información sobre las playas.
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