El casco urbano se quedó sin luz desde las 22:30 hasta la medianoche en una jornada de gran actividad.
ROSA FERNÁNDEZ , ALMUÑÉCAR
Desde las 22:30 horas del sábado hasta la medianoche el casco urbano de Almuñécar sufrió un nuevo apagón de luz que dio al traste con las expectativas de los comerciantes sexitanos, que celebraban la shopping night, en la que tenían puestas grandes expectativas de ventas. El corte de luz provocó que los clientes se marchasen y que muchos de los negocios tuviesen que cerrar, por lo que las calles quedaron desiertas en una noche en la que por coincidir con el inicio de las fiestas patronales de la localidad tendría que haber existido una gran animación.
No es la primera vez que ocurre un hecho de estas características, ya que el pasado Jueves Santo se produjo otra interrupción durante unas dos horas, además de otro 15 de agosto del año 2013 e incluso uno breve el pasado viernes.
La alcaldesa de Almuñécar, Trinidad Herrera, ya advirtió a la compañía Sevillana-Endesa que no iba a consentir otro hecho de estas características que tantas pérdidas provocan al comercio y la hostelería de la zona, máxima en temporada alta, con la consiguiente mala imagen de un municipio en el que en estos días vive su semana grande, con la afluencia de miles de turistas. La semana pasada, la regidora anunció que tras una reunión con los responsables de la empresa de electricidad, estos últimos le explicaron que el último apagón de Semana Santa se debió a un caso fortuito y le garantizaron que no volvería a ocurrir, aunque los comerciantes ya temían que la situación se repitiera, como así ha pasado.
No es la primera vez que ocurre un hecho de estas características, ya que el pasado Jueves Santo se produjo otra interrupción durante unas dos horas, además de otro 15 de agosto del año 2013 e incluso uno breve el pasado viernes.
La alcaldesa de Almuñécar, Trinidad Herrera, ya advirtió a la compañía Sevillana-Endesa que no iba a consentir otro hecho de estas características que tantas pérdidas provocan al comercio y la hostelería de la zona, máxima en temporada alta, con la consiguiente mala imagen de un municipio en el que en estos días vive su semana grande, con la afluencia de miles de turistas. La semana pasada, la regidora anunció que tras una reunión con los responsables de la empresa de electricidad, estos últimos le explicaron que el último apagón de Semana Santa se debió a un caso fortuito y le garantizaron que no volvería a ocurrir, aunque los comerciantes ya temían que la situación se repitiera, como así ha pasado.
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